II

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[☀️]

Capítulo 2


Jimin no podía quitárselo de la cabeza. Todos los días cuando salía por su puerta sus ojos volaban de inmediato sin fallar al árbol de Yoongi pero el chico nunca estaba allí.
Se esforzó mucho para no dejar que le afectara, no tenía la menor idea de porqué quería ver a Yoongi de nuevo. Tal vez porque era interesante. Tal vez porque era peligroso. O tal vez sólo porque era el único chico que había conocido hasta el momento este verano que no era una adolescente chillona que venía a ver a su hermana.


Sabía que podía conocer fácilmente a gente si quería; sólo tenía que ir al club y... eso era un pensamiento horrible.

Sí, ¿y qué? Sus padres eran pudientes y miembros del club donde su padre jugaba al golf y su madre disfrutaba con frecuencia del spa, pero no era como si hicieran alarde de su dinero. Jimin no creía que fueran diferentes de cualquier otra persona a causa de ello, por lo menos esperaba que no.

Sin embargo, los otros chicos del club no tenían los pies tanto en la tierra; tendían a ser unos engreídos ricachones que pensaban que el tener unos pocos dólares los hacia mejor que los demás. Los gobernantes de la Tierra. Gente vaina le gustaba llamarlos. Sus padres le regañaron por ello, pero Jimin pudo ver la diversión en sus ojos incluso mientras lo hacían. Sabían que él estaba en lo cierto, sentían de la misma manera.

Así que si, quería ver a Yoongi de nuevo. Al menos él se presentaba como una persona real y no alguien programado con cierta etiqueta. Pero lo que consiguió fue Jongin.

Kim Jongin era unos años mayor que él. Solía andar con Jihyun sin realmente notar su existencia, pero parecía que ahora que Jihyun estaba ausente, Jimin era considerado digno del tiempo de Jongin. ¿No era afortunado?

Jongin apareció en un deportivo rojo descapotable, música atronadoramente alta y todo altivez. Así que Jimin no estaba interesado. Por supuesto, sus padres estaban encantados, mirándolo con una sonrisa complacida, y simplemente supo que habían tenido algo que ver en esto. Se sentía traicionado, víctima de una trampa.

— Hola, Chimchim — saludó Jongin, alargando el apodo de su familia para él mientras saltaba sobre la puerta del coche sin molestarse en abrirla. Jimin oró en secreto que se cayera sobre su flaco culo; por desgracia, Jongin era en realidad bastante elegante moviéndose.

— No me llames así — dijo Jimin con voz ronca, su cuerpo sacudiéndose cuando Jongin colocó un brazo sobre sus hombros, agitándolo bruscamente. Jongin era fácilmente tan alto como Jihyun y se alzaba sobre Jimin, quien silenciosamente deseó que su siguiente estirón se apresurase a llegar.

— Por lo tanto, vamos a divertirnos, ¿o qué? — dijo Jongin en voz alta, ya conduciéndole a su coche y dirigiendo a sus padres una reluciente sonrisa blanca. Parecía que elegir no iba a formar parte de su día.

— Sólo llama si no va a estar de regreso para la cena — dijo su madre detrás de ellos, sonriendo feliz. Traidora. Hasta aquí el verano perfecto. ¿Dónde estaba Jihyun cuando se necesita a alguien para llamar la atención del idiota?

Con eso, se encontró alejándose a toda velocidad, apenas logrando ponerse el cinturón y sujetarse con toda sus fuerzas.     

                                [🌊]

Jimin estaba aburrido. Jongin lo había arrastrado por todas partes, a cualquier sitio donde estuviesen las chicas vestidas con casi nada, preferiblemente mojadas, Jongin llegaba, echaba un vistazo, e inevitablemente encontraba la garganta de una chica donde empujar su lengua. El almuerzo había pasado rápido, una parada de camino, una hamburguesa y papas fritas arrojadas en su regazo y en marcha de nuevo.

Deadline on Love · YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora