-Es verdad, me han hablado de ti. Pero quiero oírlo de ti.- dice acercándose peligrosamente a mi.
-Siento decepcionarte.- Digo apartando me y dejándole frente a árbol en el cual estaba apoyada.- Puede que te funcione que las zorras, pero, que no se te olvide, yo de zorra solo tengo la astucia.-Digo giñandole un ojo y girando sobre mis talones dándole la espalda y caminando hacia mi moto. No me apetecía seguir en el instituto. Saqué la llave, la metí en el contacto y salí sin dirección. Solo disfrutaba de el aire chocando contra mi cara y la luz de el sol iluminando el camino.
"No dejes que el mundo cambie tu sonrisa, cambia el mundo con tu sonrisa." Aquellas palabras me vienen a la mente. El dulce olor de mi madre invade mis fosas nasales haciendo que una lágrima se escapara de mi ojos.
Esas palabras son las que me dijo antes de que la mataran. Y ella lo sabia, joder lo sabia, sabia que la iban a matar, ¿por qué cojones salió de casa si lo sabia?
Sin pensarlo dos veces aceleré la moto. Necesitaba desahogarme. Dios la echaba tanto de menos...
Al cabo de 2 minutos llegué a mi destino. Era una pradera, no había nadie, como siempre, la cual cosa me alegré. Nadie suele venir por aquí.
Deje la moto debajo de un árbol y me senté en le suelo. Más bien, me tumbé. Cerré los ojos y me quedé así hasta que se hizo de noche. Me levanté, me subí a la moto y puse rumbo a mi casa.
Esta noche saldria con mi hermano y su mejor amigo. Todo con tal de salir y olvidarme de mi vida por un día.
Bajé de la moto y entré en casa.
-¿Donde estabas? Pensaba que ya no venias esta noche.- dice Liam cuando entro al comedor.
-No es tan fácil librarse de mi hermanito.- Digo deshaciendo su pelo sabiendo que lo odia.
-Chels, cuando lleves tres horas metida en el baño arreglándote y peinándote, te tiraré a la piscina, veras que gracia te hace.- Dice frunciendo el ceño y arreglándose el pelo. Yo reí ante la cara tan graciosa que había puesto.
-¿Y papá?- Digo cuando ya estaba saliendo del comedor en dirección a mi habitación para arreglarme.
-En su despacho.- Lo oigo decir cuando estaba poniendo el pié en el escalón ya para subir.
Me giro y voy en dirección al despacho que estaba justo en la otra punta de la casa.
Cuando estoy a punto de entrar para saludar a mi padre su voz me hace frenar y escuchar su conversación.
-Que no, eso si que no, tiene que haber otra manera.......... Joder, que no..... Si quiero que o firmes.....
Y justo cuando mi padre iba a volver a hablar, alguien me envía un mensaje. Joder.
-Luego te llamo.- Oigo que dice mi padre.- ¿Chels?- Dice dudando de que sea yo.
-Si papi.- Digo pasando con una sonrisa. Joder, hay que ser oportuno...- Solo quería decirte que ya estoy aquí y que esta noche me voy con Liam de fiesta.- Digo pasando y dándole un beso en la mejilla.
-Me parece estupendo cariño.-Dice devolviéndome el beso.
-Vale ¿voy a cambiarme y cenamos?- Él asiente.
Me giro y subo a mi habitación. Me ducho y coloco la toalla al rededor mio. Salgo del baño y voy al armario y cojo unos pitillo negros rajados, una camiseta negra con el dedo corazón en medio, unas botas militares, esta vez grises y cojo mi chaqueta de cuero.
Cuando bajo ya esta la mesa puesta y la comida en la mesa. Me siento en mi sitio y aparece mi padre y mi hermano hablando animadamente.
Comemos y Liam nos cuenta como le ha ido en la universidad y tal. Sobre las once y media llaman al timbre y voy a abrir.
-Buenas pequeña.- Dice Louis abrazándome, yo de le devuelvo el abrazo.
-¿Nos vamos?- Dice la voz de Liam detrás de nosotros.
-Si, vamos.- Digo separándome de Louis.
Nos subimos en el coche, Liam de piloto, Louis de copiloto y yo detrás asomando la cabeza por en medio de los dos asientos de detrás.
-¿Donde dices que hemos quedado con Niall?- Dice Louis de repente.
-¿Niall?¿Quien es ese?- Digo confusa, mirando primero a Louis y luego a mi hermano.
-Uno de la universidad.- Dice Liam tan normal.-Ahora que lo pienso, ¡te he hablado de él!- Dice alterado.- Ya veo el caso que me haces.- Dice medio enfadándose.
-Que no tonto, que yo te quiero.- Digo dándole un beso.
-Viene con su nueva hermana.- Dice Louis de repente.
-¿Con un bebé?- Pregunto extrañada.
-No loca.- Rien los dos.
-¿Entonces?
-Sus padres tienen una gran familia y han adoptado una chica. Pero no nos a contado mucha más de la chica.-Dice Louis encogiéndose de hombros. Yo asiento. Pero la verdad, prefería es que prefería estár a solas con ellos, son mis únicos amigos. Lo sé, es triste, uno de mis mejores amigos es mi hermano y el otro el mejor amigo de mi hermano. Pero no estóy muy disgustada con eso.
Al cabo de unos tres minutos llegamos a la discoteca de la cual mi padre era el dueño junto con otro señor que no se quien es, pero no me interesa mucho la verdad.
-Buenas Taylor.- Digo saludando al portero que hay cuidando la entrada. La cola que hay es verdaderamente larga, pero yo molo y me la salto.
-Buenas preciosa.- Dice saludándome y quitando la cinta.-Chicos.- Dice saludando a los otros.
Mi hermano se para a hablar con el para decirle que deje pasar a el tal Niall y a su hermana. No consigo oír el nombre de la hermana, pero realmente me da igual.
Nada más entrar voy directa a la barra, necesito beber algo.
-¡Chels!- Dice Edward, uno de los camareros.
-Buenas.- Digo sonriendo falsamente.
-¿Lo de siempre?- Le sonrio y asiento.-Marchando un chupito de tequila.
Al cabo de segundos ya tengo a mi hermano y Louis a mi lado pidiendo su bebida.Vodka azúl con fanta de limón.
Me ponen el tequila y como mi padre es el dueño me lo regalan. Lo cogí y me lo bebí sin más, de un trago.
-Que valiente.- Dice una voz detrás de mi haciendo que me sobresaltara al no reconocerla. Me giro y me encuentro con unos ojos azules.
-¿Y tu eres?- Digo algo confusa.
-Soy Niall.-Dice mostrando sus preciosos dientes blancos.- Y esta es Emily.
¿Esta no es la nueva?
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Espero que os haya gustado jejé.
Seguramente hasta el 16 o 17 no vuelva a escribir ya que tengo exámenes y eso.
Bueno, kisses.
