Capítulo 30: Secuestrada.

17K 912 351
                                    

Abro los ojos lentamente y con dificultad, me duele la cabeza y el cuerpo. ¡Pero donde estoy!

Al incorporarme me doy cuenta de que no estoy en mi cabaña, ni tampoco en la isla, estoy en una habitación muy lujosa y elegante, toda en blanco con detalles plateados, yo estoy acostada en una cama de matrimonio.

¿Pero qué ha pasado? ¿Dónde estoy? ¿Y quién me ha traído aquí?

—Buenos días muñeca, ¿ya has despertado? —pregunta Logan acercándose a mí peligrosamente.

—Lo-Logan, ¿que-que hago aquí? ¿Dónde estoy…? —retrocedo en la cama con miedo, él coge mis piernas y se sube encima de mí.

—Tranquila Lucy.

—¡Como quieres que me tranquilice estando contigo, dime de una maldita vez donde estamos Logan, y levántate de encima!

—¡A mí no me hables así mocosa, yo no soy tu querido Peter! —me mira a los ojos y se calma un poco—. Estamos en China, en una montaña un poco alejados de un pequeño pueblo de aquí al lado.

Pego un pequeño grito asustada y a la vez sorprendida, ¡me ha secuestrado!

—¡Me has secuestrado!

—Llámalo como quieras, la cosa es esta, tienes prohibido salir de la casa, es bastante grande, tiene piscina, gimnasio y un jardín enorme, así no te aburrirás. —cada vez está más cerca de mi boca.

—¿Por qué a mí Logan? ¿Yo que te he hecho? ¿Qué consigues reteniéndome aquí? Es por venganza hacia Peter o...

—Nada de eso, es porque me gustas, eres muy inocente y pura, y eso me encanta en las mujeres.

—Pues búscate a otra así y a mí déjame en paz.

—Va a ser que no, yo te quiero a ti —toca mi mejilla con sus dedos, yo no puedo hacer nada ya que está encima mía—, te quiero a ti enterita, pero por ahora quiero que te acostumbres a estar aquí conmigo, tampoco quiero parecer desesperado —guiña un ojo, yo pongo cara de asco, él al fin se levanta de la cama—, bien, yo ahora voy a comprarte algo de ropa, y tú te vas a quedar aquí quietecita, te recomiendo que no intentes escapar porque no hay ninguna salida, la única que hay es una puerta y solo yo tengo la llave, tampoco hay teléfonos así que no puedes pedir ayuda, estamos totalmente solos Lucy —me entran escalofríos con esas palabras—, luego nos vemos muñeca. —da un beso en mi mano y se marcha de ahí.

Esta es mi oportunidad de escapar, o al menos intentarlo.

Me aseguro por la ventana de la habitación de que Logan salga por la puerta de fuera, tiene razón, solo hay una puerta y todo lo demás está amurallado con un gran muro que acaba en puntas, es imposible saltar eso, además no soy capaz ni de saltar un muro de mi estatura...

Salgo de la habitación en busca de alguna otra salida por la casa, pero nada, la casa es espaciosa y lujosa, más que una casa es una mansión, tiene de todo.

Decido ir a la habitación de Logan a ver si hay alguna copia de la llave que él tiene.

La casa es tan grande que me cuesta encontrar su habitación, hasta que por fin la encuentro.

—Dios mío... está loco. —exclamo casi sin aliento.

Al abrir la puerta me encuentro con una habitación llena de fotos mías desde que llegué a la isla, hasta tiene fotos mías durmiendo y hablando con Pablo y con Maxi. Me quedo observando todas las fotos que tiene colgadas en la pared, decido cotillear un poco más por los cajones y encuentro muchas cosas mías, como mi pañuelo, una blusa, y hasta ¡un mechón de cabello! Madre mía, Logan no está bien de la cabeza, ¡está enfermo!

—Parece que has descubierto mi habitación secreta.

Me giro y ahí se encuentra Logan, salgo corriendo por la puerta muy asustada y con miedo, pero enseguida me atrapa del brazo y me arrincona en la pared.

—¿Por-por qué tienes fotos y cosas mías Logan? —pregunto muy asustada y con un hilo de voz.

—Porque cuando me quedo aquí a dormir me gusta verte cada mañana en las fotos, pero sobre todo la que más me gusta es esta. —levanta su almohada y saca una foto mía un tanto comprometedora, salgo en ropa interior, me habría pillado cambiándome.

—¡Pero como tienes esa foto ahí! Cuando Peter me encuentre te dará tu merecido, porque si no lo sabes te está buscando.

—Ya lo sé, ¿y te piensas que me asusta? Por algo te he traído a China, aquí no nos encontrará nunca, él no sabe ni que existe esta casa, yo que tú no me haría ilusiones nena, Black no te va a rescatar, y tú te vas a quedar aquí conmigo, creceremos, tendremos hijos y nos moriremos juntos.

—¡Tú estás loco, no pienso casarme contigo y mucho menos voy a tener hijos! ¿Qué piensas tenerme aquí hasta que nos pudramos o qué?

—Exacto, tú lo has dicho, y ahora cálmate y pruébate la ropa que te he comprado —yo no le hago caso—, será mejor que colabores Lucy, no quiero ser malo contigo.

—No pienso probarme la ropa delante de ti. —él rueda los ojos y para mi sorpresa se marcha de la habitación.

Y así paso con Logan dos meses en esta mansión enorme, un día vamos a la piscina, otro a pasear por el jardín, y así pasa el tiempo. No me queda de otra que aguantar, no puedo hacer nada, he intentado escapar varias veces, pero es imposible, por suerte Logan se controla bastante esos impulsos de toquetearme todo el cuerpo, pero de sus besos no me libro, yo aún tengo esperanzas de que Peter me encuentre y que le dé su merecido a Logan por todo el daño que me ha hecho y me está haciendo.
Es una noche normal y corriente, ceno junto a Logan y me dirijo hacia mi habitación a dormir.

—¿A dónde te crees que vas?

—A mi cuarto a dormir.

—No, hoy no vas a dormir muñeca, sabes, ya no aguanto más, necesito saciar esta sed que tengo por dentro de una vez por todas, y ya he aguantado lo suficiente. —retrocedo con miedo mirándole fijamente.

—¿A qué te refieres Logan…? —él se acerca a mí a paso firme.

—Sabes muy bien a lo que me refiero, ya he esperado lo suficiente, y te deseo Lucy, te deseo como nunca he deseado antes a otra mujer, quiero entrar dentro de ti, ahora, en este instante —me coge por la cintura y puedo sentir a su amigo bastante excitado bajo sus pantalones, se da cuenta de que lo he notado y sonríe—, ya verás cuando lo tenga fuera —le pego un empujón y salgo corriendo lo más rápido posible, pero no sirve de nada, Logan me carga en brazos y me lleva a mi habitación—, te garantizo que lo vas a disfrutar más conmigo que con ese mocoso de Black, ahora sabrás lo que es hacerlo con un hombre de verdad.

Logan rompe la camiseta que llevo puesta y me quita los pantalones de tirón, enseguida me arranca el sujetador y comienza a morder mis pechos, yo grito de dolor, me está haciendo daño, lo hace muy violentamente, él se quita sus pantalones y yo solo lloro y pido ayuda, pero claro, quién me va a escuchar...

Se baja sus boxers y se pone de rodillas.

—¿Te gusta lo que ves? —coge mi cara bruscamente para que lo mire.

—¡Suéltame, eres un maldito violador, socorro, auxilio!

—¡Cállate! —me pega una bofetada y sigue con lo suyo—. Ahora vas a saber lo que se siente al ser penetrarte por un hombre de verdad, pero antes...

Logan mete su mano en mi parte más íntima sin ninguna delicadeza y comienza a moverla, me duele muchísimo.

—Grita, grita para mí muñeca, grita mi nombre.

—¡Socorro, ayuda por favor! —no dejo de llorar descontroladamente.

La ventana de la habitación se abre de par en par, no lo puedo creer ¡es Peter!

Gracias a Dios ha llegado a tiempo. Tiene una expresión en su cara de sorpresa e ira, se está poniendo rojo y sus manos las tiene cerradas en puño, ni yo misma sé de lo que es capaz de hacerle a Logan...

Prisionera en Nunca JamásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora