Sus Uñas espinas

Capitulo seis. "Cenicienta"

Será Mauricio un Capo de la mafia?
Me quede tratando de escuchar más, pero justo alguien me tocó el hombro y murmuró -a quien espías?. Admito que se me salió el alma del cuerpo, tenía mucho miedo y me asuste bastante pero al darme cuenta que era mi mamá mi cara se transformó, ¿que le iba a decir? Estaba espiando a tu marido que resulta ser un capo de la mafia que amenaza a su amante que resulta ser la chica que limpia Mónica, y que además es su complice.
No, no le iba a decir eso
Antonina- me pareció escuchar algo pero no era nada- sonreí pero como toda madre se dio cuenta que estaba nerviosa
Paulina- algo te pasa Antonina
Como te diste cuenta?- dije atacándola con la pregunta
Paulina- por como temblas
Pensé que iba a decir algo como "porque soy tu mamá" pero bueno, me alegra que no se haga la madre presente cuando no lo es
Paulina- es por la fiesta verdad
Se notaba que no me conocía para nada
Antonina- ay si mamá era mi mayor preocupación- dije sarcásticamente
Paulina- tranquila todo va a salir bien y además va a ver chicos y chicas de tu edad
Como si eso me Alegrara.
Llegamos a la fiesta y era demasiado cheta, decoraciones doradas, comida extranjera y por ende cara. El lugar era al lado de un lago, era bastante lindo el salón pero no dejaba de ser muy cheto.
Entre y mi mamá empezó a abrazar a un montón de gente que yo no conocía pero que igual tuve que saludar, fui a tomar algo en una Mesa gigante en donde había cosas para tomar y comer, y en una copa me serví algo que parecía ser gaseosa pero muy cara o no se y se me acercaron 3 chicas. Una rompió el hielo y me dijo -Hola, me llamo Filomena Pérez vos debes ser Antonina, o no?
Con su forma de hablar me di cuenta que algo buscaba y no era bueno
Antonina- ah si si, te conozco?
Filomena- soy hija de la que organizo las fiestas junto a tu mamá, y ellas son mis mejores amigas Georgina Franco y Milena Sosa.
tengo que admitir que me parecía muy linda Milena, parecía la más copada de las tres
Antonina- Hola chicas, bueno espero que podamos llevarnos bien y conocernos este año
Filomena- si...no creo pero bueno lo voy a intentar.
En ese momento pensé en pegarle una linda cachetada pero bueno no quería arruinar ese maquillaje horrible pero carísimo que tenía.
Bueno me tengo que ir- dije evitándola
Filomena- si claro
Yo con la copa en mano, y me empujo la desgraciada manchando todo mi vestido, y con mucha bronca le dije - que hiciste?.
Filomena- uy perdóname jaja
La iba a matar lo juro, pero vino un chico y le dijo - Filomena que te pasa? Siempre lo mismo vos, andate.
Se fue riéndose como una tarada, que tenía contra mi?
- perdona a mi hermana, hace esto con todas las nuevas, supongo que es como un ritual.- dijo el chico que era bastante lindo lastima la familia que tenía - me llamo Julián Pérez.
Antonina- Gracias, y yo me llamo Antonina
Julián- te manchaste todo el vestido, puedo darte alguna ropa de mi mamá o de mi hermana que tengo acá a mano
Antonina- no gracias, no quiero más problemas con tu hermana y aunque no lo creas traje ropa demás, la tengo en el auto pero no es ropa descente para acá.
El tenía puesto un jean negro, una remera blanca, un saco de traje y unas zapatillas estaba bastante bien para mi gusto desarreglado
Julián- si queres te acompaño, yo no quería venir- y sonrió, tenia una sonrisa hermosa y contagiosa.
Nos fuimos al auto, agarre mis cosas y me cambie, me puse un jean y una remera, con mis zapatillas Vans.
Julián- sos muy linda - sonreí nerviosa y agregó - perdón cualquiera que te diga eso
Antonina- en serio no pasa nada- sonreí nuevamente
Caminamos un rato, hablamos de un montón de cosas. Le conté de mi mamá y mi familia en si, el contó la relación que tiene con su mamá y así hasta las doce que era la hora a la que terminaba la fiesta de mamá
Ya llegando al salón en donde era la fiesta nos sentamos en la escalera a esperar que sean las doce, me saque las zapatillas porque me mataban los pies
Julián- me encantas
Antonina- que?
Julián- me doy cuenta el tipo de persona que sos y me encanta -sonreí nerviosa
Se me acercó, y me besó.
Sus labios color carmín, tan delicados y con perfecta forma, eran mágicos
Cuando dejó de besarme apareció Paulo, y al parecer había visto todo el beso
Ya eran las doce, me desesperé y le dije - mierda son las doce!
Me despedí de Julián dándole un beso pero rápidamente quise correrme pero el me apretaba contra su cuerpo, francamente parecía tallado a mano.
Lo aleje de mi y le dije - son las doce - le guiñe un ojo
Y me fui corriendo corrí como nunca antes, con el pelo despeinado y las zapatillas en la mano. Bueno...una sola zapatilla porque la otra se me cayo en la escalera.
Julián gritó- la zapatilla!.