❥Falofilia | ➳[MyungYeol]

❥Our ᵽhilias ¦10¦

-Que me gustas. – confesó, completamente perdido en la profundidad de los ojos castaños de SungYeol, quien le miraba con diversión. MyungSoo se percató de lo que acababa de decir, poniéndose rojo de inmediato. – Y-yo... quiero d-decir... s-sí, eh... m-me gustas... u-un poquito...

SungYeol rio.  

-¿Sólo un poquito? – preguntó, haciendo un adorable puchero, que hizo tambalear la expresión de MyungSoo. "Joder, es demasiado adorable... ¿Estará mal que me lo quiera follar ahora mismo?", pensó Soo, mordiéndose el labio inferior. – Porque tú a mí me gustas mucho, Myungie... 

El menor sale de su ensoñación, mirando, sorprendido a SungYeol. 

-¿E-en serio? – SungYeol asiente, convencido. MyungSoo sonríe, pero, entonces, recuerda algo, y su sonrisa se borra. – Pero... ¿te gusto yo o... mi polla? 

La expresión de SungYeol pasa de ser sonriente a avergonzada en menos de cinco segundos. Sus mejillas se ponen rojas por completo, el color llegando a sus orejas también. 

-Anoche dijiste que estabas enamorado de mi "gran amigo". – relata MyungSoo, haciendo comillas con sus dedos. SungYeol abre los ojos desmesuradamente. 

-¡¿Yo dije eso?! – exclama, completamente abrumado. 

-¿No te acuerdas? – inquiere MyungSoo, frunciendo el ceño.  

-¡Claramente no! – grita SungYeol, cubriéndose la cara con las manos. 

-P-pero... te acuerdas de lo que pasó... entre nosotros... 

-Bueno, no es algo que se pueda olvidar con facilidad, ¿sabes? ¡Follé en la cocina con el chico que he estado persiguiendo desde hace tres semanas! ¿Cómo pretendes que me olvide de eso?  

SungYeol se veía bastante alterado, haciendo preocupar a MyungSoo. 

-N-no debes sentirte mal, hyung. No es la primera vez que me dices algo así. – intentan consolarle MyungSoo, haciéndole sentir peor. 

-Ah, mierda...-SungYeol suspira pesadamente. Se levanta del regazo de MyungSoo y se deja caer a su lado en la cama. – Ya entiendo porque crees que mis sentimientos no son reales sino que van dirigidos a tu pene... 

-Y-yo no dije eso... 

-Lo insinuaste. – le acusa SungYeol, señalándolo acusadoramente. MyungSoo no responde y SungYeol suspira, nuevamente. – Yo también tengo un problema... 

-Filia. – interrumpe MyungSoo. 

-¿Eh? 

-Tú no tienes un problema. Tienes una filia. – le hace saber el menor. – No estoy seguro de cómo se llama, pero la tienes. No puedes hacerlo con hombres que tengan el miembro pequeño porque no sentirás placer... porque te gustan los miembros grandes. 

SungYeol quiso decir algo... pero, ¿qué podría decir? Era verdad, pero, que se lo dijeran tan directamente le causaba vergüenza. Le hacía quedar como un goloso y cosas peores. 

-N-no creo que sea algo malo...- murmura Kim, jugando con sus dedos. – Yo tengo varias. 

-Pero tú eres un sátiro. 

-No es necesario que me lo recuerdes. –MyungSoo rueda los ojos. 

-A ver, ¿y cuáles son las tuyas? – inquiere SungYeol, poniéndose cómodo. MyungSoo lo mira estupefacto. 

-¿En serio quieres hablar de mis filias? Podríamos tardarnos toda la mañana. – le hace saber, alzando las cejas. 

-No tengo nada qué hacer, Myungie. – canturrea SungYeol, recostando su cabeza en el abdomen de MyungSoo. Este suspira, enarcando una ceja.