Cuando Jonathan despertó estaba lloviendo, se vistió y salió hacia la universidad.
Caminó por las aceras mojadas un buen rato, -¡Jonny!- dijo una voz femenina a su espalda. Jonathan se giró y una chica se le agarró al cuello, era rubia y tenía el pelo rizado
-Hola Caroline- dijo Jonathan con una sonrisa, Caroline también sonrió y se le engancho al brazo.
Caminaron hasta un edificio enorme cubierto de cristales, entraron en él y subieron hasta la segunda planta, pasaron una puerta y llegaron hasta su clase. Entonces llegó el profesor y todos se sentaron y se callaron. Pasaron las horas y al fin llegó la hora de comer; más una explosión se le adelanto a la campana; todos se giraron hacía la ventana donde se veía la plaza ella pedazos, la alarma de emergencias empezó a sonar y todos, incluido Jonathan salieron de la clase. Sonó otra bomba y esta vez mucho más cerca, el pánico cundió más aun entre los estudiantes, otra bomba callo pero esta impacto en la universidad dejando a Jonathan al borde de un abismo insalvable; ante el problema de no poder salir de la universidad Jonathan se refugió debajo del canto de una puerta, otra bomba, entonces el chico vio a Caroline corriendo desesperada.
-¡Aquí Coraline!- gritó todo lo fuerte que pudo - ¡Corre! -.
La chica corrió hacia él y se sentó a su lado, se encogió sobre sí misma y hundió la cabeza entre sus rodillas, a Jonathan no le sorprendió ya que ella era muy infantil y miedosa en verdad y aquello la superaba, Jonathan pasó una mano por sus hombros y esperó.
Cuando pareció que el estruendo había parado los dos salieron de su escondite .El paisaje que vieron fue desolador, todo estaba destruido y no quedaba nadie, entonces Coraline salió corriendo y se arrodillo al lado de una figura inerte.
-¡Reyna! – chillo sollozando-.
Entonces Jonathan noto un temblor,
-Quítate de hay Coraline – dijo el chico en voz baja. La chica se volvió hacía el sin entender, -Deprisa- dijo.
Al ver que la chica no reaccionaba y le tendió la mano, ella se levantó y alargo su mano hacia él, un temblor hizo retumbar el edificio y la chica agarro su mano con fuerza al tiempo que el suelo se derrumbaba dejando a la chica colgada sobre el abismo.
-¡No te sueltes!- grito Jonathan, pero el peso de la chica lo arrastraba, ella pareció verlo porque se soltó, pero Jonathan la agarro por la muñeca.
-Suéltame- dijo ella con una voz serena que sorprendió a el chico.
-Jamás- dijo él, la chica sonrió amargamente y le clavo las uñas en el antebrazo, este reprimió un grito e hizo acopio de sus fuerzas para no soltarla, pero ella no se dio por vencida y apretó más, lo que hizo que su mano se aflojara un poco. Caroline aprovecho la oportunidad y consiguió soltarse antes de que el chico callera al abismo con ella.
-¡Caroline!- gritó con los ojos vidriosos.
Entonces hubo otro temblor que lo tiró al suelo, se levantó como pudo y se secó las lágrimas con la manga, tenía que salir de allí sino el sacrificio de Caroline habría sido en vano.
Corrió entre los escombros hasta encontrarse en lo que una vez había sido el vestíbulo, se giró hacía todos lados y vio el cuerpo inerte de Caroline. Sin pensárselo dos veces lo cogió, entonces sonó otra bomba.
-¡Necesito ayuda!- grito tan alto como pudo pero no obtuvo respuesta.
Dejo a la chica en el suelo y grito aún más fuerte pero seguía sin oírse respuesta alguna; noto movimiento cerca e inspecciono el lugar, de repente algo lo agarro y le puso una mano en la boca, Jonathan se revolvió pero su captor apretó más y no le dejó escapatoria alguna. Desde su escondite vio como un grupo de personas armadas entraba en el destruido vestíbulo, del grupo salió una mujer de unos 22 años, calculó Jonathan, que se acercó a el cuerpo de Coraline y lo observo detenidamente, se giró a una de las personas armadas y asintió, esta cogió a la joven como si fuera un saco y se la cargo al hombro; Jonathan se debatió agresivamente al ver que se la llevaban pero su captor lo retenía con fuerza y no consiguió escapar, lo único que pudo hacer fue observar cómo se llevaban a Coraline sin que él pudiese hacer nada.
ESTÁS LEYENDO
Armas Biológicas
Teen FictionJonathan es un chico normal de 20 años que se ve envuelto en una operación del gobierno. Deberá sobrevivir y conseguir ganar a la C.O,.Una historia de amor y aventura. Disfrútenla.