Sam Walker Y La Marca Maldita

Capitulo 1 El inicio de más problemas

         -Todo empezó en el Año 2015. Mi familia siempre dijo que yo era un niño especial, pero ¿Sabía yo que era especial? No, no lo sabía mi infancia fue algo muy extraña no me dejaban salir de casa o charlar con otros niños o simplemente ir a la escuela, me educaban en casa era aburrido. Desde luego siempre le decía a mamá que me concediera permiso para salir a jugar, pero ella siempre replicaba "eres un niño especial, ¿quieres salir con esos normales? No ¿verdad?" . Yo intentaba escapar a veces por una ventana, pero cada vez que lo hacía me atrapaba y me castigaba ¿Cómo? Quitándome lo que más me entretenía un aparato que me compró cuando cumplí doce era como un teléfono, pero con doble pantalla y con teclas. Papá había salido de viaje a una investigación llevaba tres años que no lo veía ella siempre me maltrataba y me culpaba porque mi padre no regresaba. Mamá una vez había salido a comprar alimentos fue mi primera oportunidad, Tomé rápidamente una mochila donde ocupe dos botellas de agua luego empaque tres bolsas de papas fritas y galletas, Me vestí con unos Jeens algo ajustados (esa era la moda aunque no salía)
Usé una camisa negra y escalé hacia la ventana. A continuación, me caí en mi jardín, no sabía que haría, pero no quería pasar mi infancia en esa casa, pensé en ir a un bosque y construir una guarida corrí rápidamente al bosque que quedaba cerca de nuestra casa, pero enseguida sentí algo en mi mano izquierda parecía que estuviera en llamas llegando al bosque. Cuando ya había entrado mi vista se hacía nublosa no podía visualizar nada, pero si pude distinguir una figura parecía una persona, no podía ya controlar mi cuerpo y cuando menos me lo esperaba me caí y lo último que pude percibir fue una sombra que se acercó. Cuando desperté estaba en una cama algo rara no era muy cómoda era hecha con árboles rotos por la mitad con un hueco en el centro y la piel de un oso cubriéndome, me asusté cuando observé el hocico del oso en frente me levanté exaltado pero mis piernas no daban y me caí pude observar que estaba adentro de una cabaña. Caí en los pies de una niña que parecía estudiarme con la mirada, tenía unos lentes extraños que tenían mucho aumento para una niña, sus ojos eran grises y su piel blanca como la nieve, su cabello era castaño, ella me habló:

-Eres el niño de la casa de dos plantas ¿eh?-dijo mientras bebía de una taza de madera

-Sí lo soy, y ¿tú quién eres?- Agregue

-Soy Bianca un placer- ella me tendió la mano

yo se la acepte y la estreché, ella dio un jalón a mi mano izquierda y vio mi mano con asombro.

-¿Qué ves?- pregunté

-¿E-Eres un Slater?-Casi gritó

-¿Qué es un slater?- dije

-Es otra raza de humanos con peculiaridad ¿Cuál es la tuya?- se acercó a mí

-No lo sé- dije, en verdad no lo sabía ni sabía que era un slater me pregunto si Mamá lo sabía ¿Será algo que se hereda? Muchas preguntas pasaban por mi mente.

La niña gritó un nombre – ¡¡¡Mark!!!, ven aquí tenemos uno de nosotros- me soltó la mano y ahí pude ver lo que tenía en ella era una marca extraña, una equis que alrededor tenía un círculo. Me pase la otra mano sobre ella para ver si se quitaba o algo pero no, era muy extraño, la rajé pero lo que conseguí fue un calambre que dolía, al otro lado un chico me dijo:

-Ni lo intentes Jamás se quita a menos que mueras- Esas palabras hicieron que mi corazón diera un vuelco

-¿Qué significa todo esto? – Pregunté casi gritando, el afincó su pies sobre la silla.

-Eso lo descubrirás tú mismo, igual que tu singularidad- Él se subió una manga de su camisa y ahí en su hombro la pude ver era una marca, pero no igual que la mía la suya era una flecha que entraba en un círculo. Luego el tendió la mano y apuntó a un jarrón, de su mano salió una especie de electricidad que hizo explotar al jarrón, me quedé impactado.

-Lo mismo pero diferente puedes hacerlo con tu marca, ¡Vamos identifica tu particularidad!- dijo el mientras sacudía la mano. Me levanté y estiré mi brazo hacía una jarra, pero de ella solo sentí otro fuerte calambre. Al rato llegó un Anciano que se veía en silla de rueda venía acompañado de Bianca la niña.

-Ves abuelo él es el chico que te digo- Me señaló el abuelo me vio y con una voz quebrandosa dijo:

-Si Bianca ya lo veo, Chico ¿crees que puedas mostrarme tu marca?- Asentí y tendí mi mano, la vio y se asombró.

-Como temía es una Marca maldita-