Cap 2

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Al llegar a mi colegio, algo me llamo la atención, Rosalya hablando con Chris, El era muy mujeriego y popular, tiene fama de hacer las mejores fiestas. Luego está Rosalya, completamente diferente a el, es una chica muy amable y linda, con un cabello castaño y ondulado, y unos grandes ojos verdes. La conozco cuando empecé la secundaria en primer año, Me había pedido 5$ para un muffin, luego la encontré en el baño, vomitando por el muffin.

Luego del colegio nos dirigimos al café, como de costumbre, esta vez no le preste ninguna atención a las conversaciones con mis amigas, solo me fijaba en la silueta fuera de café.

Luego de las charlas en el café fui a mi casa, al llegar no había nadie, "que raro" pensé, mi madre y su esposo llegaron ayer. Luego de camino a la sala encontré una tarjeta, la cual decía...
    
     "Jennifer, tu padre y yo fuimos al
      Cumpleaños de su madre, comporta-
      te, volveremos más tardar a las 3:00

                Con amor tu madre."

El que no me lleven no se me hacia raro, ya que había sido yo la que comento el no querer conocer a la familia del esposo de mi madre. Hice una cena rápida y fui a acostarme.

Y lo volví a sentir, un leve rose en mi cabello, y la luz de mi lámpara prendida, cegandome completamente, la cual hizo que me despierte.
Y otra vez lo ví, no dije ninguna palabra, sus exageradamente  hermosos ojos mirándome fijamente, su cabello negro y una hermosa piel blanca.
-¿estas bien?-
* ¿si estoy bien? Me lo pregunta el chico que entra en mi casa a escondidas*
-ahhh...- no podía decir una sola palabra con sus ojos mirándome fijamente.
-Soy Alex-
-...- nos quedamos unos buenos minutos sin decir una palabra, hasta que decidir hablar
-Yo soy Je-
-Jennifer Magnus, lo sé- me interrumpió ¿como maldita sea sabia mi nombre? ¿que era un tipo de acosador o algo así?
-¿Que haces en mi casa?-
-Que bueno que hallas dicho algo, no sabia como romper el hielo- Me daba un poco de gracia/molestia como se tomaba tan normal el que entre a mi casa ILEGALMENTE
-Pero no puedo responder eso todavía-
No podía dejar de mirar sus malditos ojos celestes que brillaban demasiado, para ser un criminal era sexi.
-Maldición,  es demasiado tarde, ¿te importa si te beso?-
QUE?! COMO MALDITA SEA VA A PREGUNTAR ESO?!!
Lentamente vi su celular, 3:15 mi madre y su esposo ya deberían estar aquí.
-Perdón Jen, pero no quiero meterme en más problemas-
Rápidamente vebio del pequeño frasco que contenía esa bebida o poción rara y me beso, dejando entrar el líquido, volviendo a caer en un gran sueño.

Mi Dulce Amante NocturnoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora