Sans sens.

Misery

¿Ya no me extrañas más?

Ni siquiera sé cuando deja de doler, ni siquiera sé si tu corazón seguía latiendo. 

En un momento, en el que creía darle mi tiempo y vida a todos por buscar escapar de la mía, ciegamente iba por ahí creyendo que me importaba más la existencia de alguien que la propia. Nublado de una ilusión vanidosa y despreocupada, de tonos grisáceos y agridulces, iba por la vida enfocándome en mi mismo, incluso en el momento en el que te conocí.

Y a pesar de haber tomado mi cariño, me sentía vacío por no amar como te era merecido, sentía esa pena que se tornaba en dolor sabiendo que tú me querías, pero yo no sabía quererte.
El vacío permanece, tú no.