ImpaSSe [Kaisoo]

parte || 4

— ¡Hey!

Discretamente y sintiéndose molesto, capto la presencia del pelinegro que a unos metros, daba manotazos en el aire para captar su atención.

Jongin sonrió de soslayo mirando a la nada, y continuó andando sin echar otro vistazo a quien había dejado atrás y que obstinadamente, seguía tratando de ganar un poco de su atención, ahora siguiéndole el paso.

— ¡Jongin!

El moreno escuchó los pasos apurados y torpes de aquel chico, y siguió pacientemente hasta llegar a los pasillos del fondo, donde se aseguró de que no había ninguna otra persona a los alrededores.

Llegado el momento, Jongin paró y volteó en la dirección de Kyungsoo con una sonrisa arrogante que el último como tantas veces, no pudo ser capaz de captar.

— No me importan tus razones para seguirme —exclamó sereno y aun sonriente— Vete.

El más bajo negó con la cabeza— No hago esto por lo del jugo —le dedico una sonrisa un tanto apenada— Quiero que seamos amigos.

En cuanto esas palabras vinieron a sus oídos, el rostro de Jongin se vio deformado por un ceño fruncido, debido a la incredulidad— ¿Amigos? —no pudo evitar preguntar.

Ajeno a lo que le había provocado, Kyungsoo asintió eufóricamente— Sí, me encantaría.

"¿Me está tomando el pelo?"

— ¿De verdad?

— ¡Sí!

Fue entonces cuando Jongin le dedicó una de sus sonrisas encantadoras y pasó su brazo por los hombros del chico de ojos grandes, acortando la distancia entre ambos— Claro que podría ser así, pero ¿sabes? —le hablo bajo, de un modo suave y tierno en el oído— Tenemos un problema grande que no va a permitir o siquiera considerar esa posibilidad

— ¿Cuál es? —preguntó el otro, intensificando la atención de sus ojos grandes y curiosos en su dirección.

— No me agradas —declaró el moreno conservando el volumen bajo en su voz, y filtrando hasta el último atisbo de desprecio que había acumulado hasta esa mañana.

El pelirrubio sonrío sintiéndose un poco dichoso y con una expresión relajada volvió a su posición inicial, y sacudiendo la cabellera negra del niño mimado le dedicó una última mirada antes de continuar con su camino.