Capítulo uno

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Miraba la nueva mansión que mi padre había comprado. Era gigantesca. Todavía no terminaba de conocerla, ahora mismo estaba en la sala de juegos, había una mesa de pool, un mete-gol y más juegos. Tenía que admitir que sí era millonaria, mi familia y.. Y yo. Me pregunto adónde estarán los pequeños Jared y Annie. 

Jared y Annie, eran mis hermanos pequeños, son gemelos. Me encanta tenerlos conmigo, son casi mi vida. Ellos me hacen feliz. 

Mamá está en la cocina número cinco. Ahí cinco cocinas, sí, la mansión es muy gigante. Pero.. ¿Cinco cocinas? ¿No es eso exagerado? La empresa de mi padre queda a siete calles de la mansión, dirigida hacia el centro de Londres. 

––¡Bu! ––Escucho decir, sobresaltada y asustada, doy media vuelta y veo a Jared, quién está al lado de Annie, con un disfraz de bruja.

––¡Jared! ––Exclamo y lo alzo. Lo tiro hacia arriba unas cuantas veces, el niño chilla sonriendo––. Me has asustado.––Digo dejándolo en el suelo.

Annie mira a Jared frunciendo el ceño. Al parecer está celosa, eso me hace sonreír.

––Esa era la idea. ––Dice Jared pasando su brazo por el hombro de Annie.––Hey, _____ ¿Sabes dónde está mamá? ––Pregunta mirándome con sus ojos verdes.

––En la cocina número cinco, cariño. ––Le respondo y miro a Annie.–– ¿Pasa algo Ann? ––Le pregunto extrañada. 

––Me duele la panza. ––Contesta haciendo un puchero––. Llévame con mami. ––Dice y explota del llanto. 

Sin decir nada, la cargo en mis brazos. Tomo la mano de Jared y voy en búsqueda de Mamá.

Niall's POV.

La celda estaba vieja, huele mal. Mi segundo cumpleaños en una celda, qué estupendo. Las grandes noticias son que mañana saldré de esta mierda, saldré e iré a matar al hijo de puta que me metió aquí, sí.. al hijo de puta de Liam Payne. Teníamos un acuerdo y él lo rompió llamando a la policía, todavía recuerdo sus palabras.

FlashBack.

Estábamos en la joyería más famosa de Londres, había oro puro y plata por todas partes. Me llevaría la mitad de todo, Payne se llevaría el resto, y lo demás quedaría para el jefe, sí.. ese maldito puto que es el mejor ladrón de todo el mundo, la verdad, es mi ídolo. Payne me hace una señal de que saque lo de oro.

––Eh, chico. ––Me toca el hombro Payne. Hace que frunza el ceño al instante, giro mi cabeza y lo miro.––Iré a sacar el resto de joyas a la primera planta.––Dice y me da palmaditas en la espalda.

––Más te vale que nadie te pille, por que estamos muertos los dos. ¿Te queda claro Payne? ––Le digo y él asiente al instante. Parece asustado y eso me hace sonreír burlón.––Ahora vete.

Le doy un empujón y el baja por las escaleras algo distraído. Río bajo. Será idiota.

La idea de que bajara a la planta baja para sacar más joyas, no me parecía buena idea, el idiota podía ser pillado y no sería bueno, mierda.. tengo que ir a buscarlo.

 Termino de guardar la mitad de las joyas en un bolso grande. Esto sería mucho dinero, sí. Veo luces azules y rojas ¿Qué mierda? Veo por la ventana de la segunda planta y hay autos de policías afuera. ¡Oh mierda, mierda! Tengo que hur. Bajo las escaleras a la primera planta, busco una salida y la única queda por una pequeña puerta, me deslizo por ahi con el bolso y cuándo logro salir, mi felicidad aumenta.

––Vaya.. ¿Creías que podrías huir? ––Escucho una voz detrás de mí. Cuándo me doy vuelta, veo que Payne tiene a un policía a su lado, el policía está apuntándome.

The RobberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora