Jo Jinho llegaba a casa después de un día que se le había hecho eterno en el trabajo. Tantas horas de un lado para otro sin parar, cansado física y psicológicamente también. Desde hace dos días no veía a su pareja. Los dos trabajaban intensamente demasiadas horas al día, teniendo que trasnochar algunas veces. Con este plan de vida, había semanas que solo cruzaban las buenas noches, incluso si vivían juntos, era casi imposible coincidir.Toda esta situación entristecía a Jinho. Cada minuto que pasaba, su pecho se sentía más hueco y vacío. Necesitaba a su pareja al lado, y el grado de dependencia era mayor, ya que no eran ellos los que se eligieron, sino que fue el destino quién decidió predestinarlos y unirlos con un fuerte lazo.
Cuando estaban juntos se sentían como uno solo, se complementaban, y era imposible ignorar la complicidad que tenían. Se amaban tal y como eran, a veces pasando la línea de lo romántico, pero no importaba en absoluto, porque cuando ambos disfrutaban de la compañía del otro, se sentían realizados, queridos y felices.
Por esto, por no disponer de la compañía de su pareja, Jinho se sentía triste, vacío; le faltaba Hongseok. Deseaba llegar a casa tanto como deseaba que él estuviera allí esperándole, o simplemente allí. Necesitaba de él, de sus caricias y miradas que lo hacían sentir importante. Quería descansar con él y darse ánimos para el siguiente día, tocarlo y decirle lo muchísimo que lo echa de menos.
Con parsimonia y quizás un poco esperanzado, abrió la puerta del apartamento dónde vivían, y al estar dentro gritó unas palabras para notificar que había llegado. Esperó unos largos segundos a una respuesta o a un Hongseok corriendo hacia él para abrazarlo, pero no fue así. Con su rostro triste y decepcionado, dejó con desgana todas sus cosas desperdigadas por el hall y vagó por la casa hasta el salón.
Después de todo, sabía que iba a ser así, pero le preocupaba no saber dónde estaba a su pareja y no tener si quiera un simple mensaje de su parte. No quería hacerse malas ideas, no tenía sentido hacerlo, pero es lo primero que se le ocurría.Se tiró al sofá de lleno, resoplando ante toda la situación. Cerró los ojos intentando descansar, pensando en Hongseok y lo mucho que lo quería a su lado en estos momentos. Era difícil de creer la rapidez con la que cayó totalmente por el más alto. Se conocían de antes, pero nunca pensaron que al reencontrarse por pura casualidad, sus ojos iban a conectar de aquella forma, sus corazones empezarían a latir demasiado rápido y una sensación de alegría inundaría ambos cuerpos.
Todo el mundo tenía a alguien para sí mismo en este mundo. Alguien que le completaba. El destino elegía a dos personas, nunca equivocándose en la elección, para que convivieran juntas y pudieran amarse completamente sin ningún miedo al rechazo, mayoritariamente. Encontrar a esa persona ya era trabajo de uno mismo o del propio destino, que la ponía delante de tu camino. Había gente que la buscaba, otros que tan solo esperaban a que llegara, y otros tantos que huían de ese amor pasional que, a ojos de estos, era una prisión y un compromiso agobiante más que algo bonito y sincero.
Jinho no estaba precisamente buscando a su pareja, pero sí que pensaba en ello y lo tenía en cuenta. En parte, le hacía ilusión encontrarla, y por otro lado, le daba miedo que no le gustara su pareja, o que no le gustara él a la otra persona. Tenía miedo de no ser lo suficiente y terminar siendo rechazado, cosa que podía pasar y era, según lo que había escuchado, lo más horrible que puede pasarle a alguien.
Cuando eras rechazado, el destino dejaba de estar de tu lado, ya no velaba por ti y eras abandonado a tu suerte. Podías volver a ser elegido para otra persona y volver a enamorarte, pero escasas veces ocurría, ya que el amor creado antes es muy fuerte como para poder remplazarlo o igualarlo. Te enamorarías de nuevo, sí, pero nunca como la primera vez.
Jinho y Hongseok tuvieron suerte. Al encontrarse y saber, inmediatamente, que habían encontrado a la persona que alegraría sus vidas, decidieron conocerse de nuevo, darse oportunidades, y, después de tiempo forjando una buena relación, pudieron llamarse una pareja como tal. Y desde entonces, Jinho no ha podido ser más feliz, aunque habían factores que complicaban un poco las cosas, sabía que no afectaría a su amor.
Después de unos treinta minutos en modo vegetal en el sofá, decidió hacer algo productivo. Cogió el móvil y abrió el chat de Hongseok. No sabía exactamente qué escribirle, así que se quedó pensando unos segundos. Tiempo suficiente para que, de la nada, como si su novio pudiera leerle la mente a distancia, llegara un mensaje de él.
Jinho, creo que hay un ladrón en casa. Me estaba duchando y escuché una voz, pero no la logré oír del todo bien, así que me asusté y me encerré en el baño.
Y Jinho se echó a reír. Escuchó ruido en la cocina, por lo visto Hongseok había bajado al primer piso para averiguar la identidad del ladrón. Supuso que había cogido algún arma blanca, como un cuchillo o algo así.
Lo vio aparecer con una camiseta blanca holgada, unos pantalones cortos y en chanclas, con una cuchara en la mano y el pelo aún mojado. Tenía cara de horror y cuando se dio cuenta de quién era el verdadero visitante, cambió a una de incredulidad. Hongseok resopló mientras Jinho reía sin parar, y al final acabaron riendo ambos por lo divertido de la situación.
Con tan solo esos absurdos minutos, ya se sentía mejor. Bastaba con tenerlo cerca para animarse y relajarse, sentirse bien y como en un hogar hecho especialmente para él. Los ojos de Hongseok estaban fijados en los suyos, haciéndolo sentir extremadamente bien y especial. No quería que llegara mañana y tener que dejarle otra vez, no quería echarle más de menos, porque vaya si lo hacía, y se estaba muriendo por no haberse echado entre sus brazos aún.
—Te he echado tanto de menos, Hongseok —dijo aún embelesado en la mirada del otro, con un tono un poco triste y necesitado.
☕☕☕
Bueno, aquí está el intento de algo Jinhongseok. Me gustó mucho la idea y quise hacer algo parecido, así que aquí está esto. No sé cuántos capítulos durará, pero no muchos ya que solo se trata de estos dos.
Aunque no es gran cosa y esté un poco hecho como la mierda, espero que guste al menos un poco. (?)

ESTÁS LEYENDO
Treasure in the Island ♡ Hongseok↹Jinho ♡
Historia CortaJo Jinho y Yang Hongseok están predestinados, por esto se convirtieron en una pareja para complementarse y amarse. Aunque el destino los había unido, los últimas días no estaba de su parte. Pero, ¿qué es real y qué no?