Olvidemos el Pasado {Justin Bieber}

Cap.25

---------- Katherin's POV ---------

- Ho-hola... - saludé nerviosa.

Mis padres serían capaz de alejarme de Justin si se enteran que lo hice con el. Son capaces de llevarlo a la cárcel. Denunciarlo. Él es mayor de edad. 18 años. Mi novio tiene 18 años. Por una parte me siento sucia y asquerosa porque todo pasó tan rápido, pero otra parte de mi se alegra porque es con Justin. Si no fuese porque lo conociera tan bien nada de esto estuviera pasando. El amor no tiene edad... Lo repetí en mi mente dos veces hasta que Justin agarró mi mano. Un tacto sutil.

- ¿Dónde han estado, jovencitos? - habló papá. Elias Santiago.

- Bueno, yo y Justin estuvimos... - empecé a hablar pero la voz segura de Justin me interrumpió.

- Hola, señor y señora Santiago. - saludó. ¿Que coñas, Bieber? - Bueno, yo le pregunté a su hermosa hija... - me miró y me sonrojé un poco - ... ayer si quería ser mi novia, y a aceptado.

- Oh... - dijo mamá.

- Señorita, ¿con que permiso tienes novio? Nunca te dije que podías tener uno. - me dijo papá.

Estaba a punto de responder pero Justin me interrumpió nuevamente.

- Por eso mismo vengo aquí, señor. Quiero pedir la mano de su hija. - dijo Justin. Apreté su mano. Nuestras manos estaban algo sudorosas por los nervios, pero eso no causo que soltáramos la mano del otro.

- Bueno es ese caso... pido que las dos chicas se retiren. - dijo papá. Rodeé un poco los ojos sin darlo a notar.

- Claro. - dijo mamá, seguido se paró de su asiento llegó hasta donde mí.

Ella no se veía nada enojada, al contrario, se le veía feliz. Sé que intenta ocultarlo pero sus técnicas de seriedad no le están funcionado ni un poco.

- Vamos, hija. - me dijo. Puso sus manos en mis hombros y tuve que soltar la mano de Justin quien enseguida se tensó.

Mi madre me llevó a rastras por el pasillo de la casa hacia mi habitación. Antes de entrar a mi habitación le eché una ultima mirada a Justin quien me miraba con la cabeza un poco gacha, las cejas un poquito fruncidas y sus ojos expresaban un "Creí que te tendría aquí. Estoy asustado. No quiero que te separen de mí." Sí, todo eso me dijo con la mirada.

Terminé de entrar a mi habitación y mi madre cerró la puerta. Me miró con una sonrisa. Fruncí el ceño. ¿Pero y que le pasa a esta?

- Cuéntame todo con lujo y detalle. - pidió.

Agarró mi mano me aló hasta la cama donde me obligó a sentarme junto a ella.

- ¿Cómo que son novios? - preguntó incrédula.

- Mamá, él me ha pedido que fuera su novia, le dije que era muy rápido y me ha preguntado que si ocho años es poco para mí lo pensé un momento y he aceptado.

- ¡Oh, por Dios! - sonrió - ¿Y te ha besado? - preguntó levantando las cejas muchas veces.

Sentí mis mejillas enrojecer.

- Mamá...

- Solo dime, soy tu madre. - dijo.

- Eso es personal.

- ¿Eso significa que si lo hizo? - preguntó feliz.

- Mamá, ya te dije que... - un grito me interrumpió:

- ¡Lo lamento, joven Bieber! ¡No le voy a permitir que se acerque de nuevo a ella! - era mi padre quien gritaba. Mis ojos se llenaron de lágrimas.