un poco de respeto / luwoo

Parte única.

JungWoo piensa que Lucas no tiene consciencia alguna acerca de que en Corea, la gente suele ser un poco respetuosa con las personas con las que no comparten la misma edad. Podría culpar a su nacionalidad, pero tiene muchos amigos extranjeros y la mayoría de ellos han aprendido a agachar la cabeza y saludar con un respetuoso "¡Hyung!" cuando un muchacho más grande pasa. 

También ha pensado de que eso es culpa de que se junta mucho con DongHyuck. Pero hasta aquel escandaloso muchachito lo llama como corresponde y le trata bien. Además, ha notado que él es el único con el que YukHei se comporta de ese modo, porque a todos sus otros hyungs los trata un tanto mejor. 

"Es tu culpa por malcriarlo" dice Kun, encogiéndose de hombros mientras termina de enjuagar un plato. JungWoo hace un puchero y el chino, una mueca. Luego sacude la cabeza. "Siempre le dejas que haga lo que quiera contigo, obviamente te va a tratar como si fueras... su perro" dice entre risitas. 

JungWoo lo empuja, pero luego se apoya por la mesada y piensa que tiene razón. Con una mueca en su rostro se despide dispuesto a ir a su departamento que está justo al lado. Uno que comparte con cierto dongsaeng malcriado. 

Cuando abre la puerta, lo encuentra tirado en el sofá y todo el lugar está tal cuál lo dejó. Se había ido a almorzar con Kun dejándole como tarea que limpiara y ordenara un poco, pero el muchacho estaba desparramado cuan largo era por el sofá, mirando un drama mal actuado. 

"¡Wong YukHei!" exclamó, con una mezcla de enojo y frustración. Sin importar cuántos sentimientos tuviera por aquel muchacho, era un completo caos vivir con él. 

"Ah, Jeonggu~" canturreó, sentándose en el sofá y palmeado el sitio a su lado. "Ven a ver conmigo este drama, el chico besó a la chica y ella se quedó con cara de" abrió mucho los ojos por unos segundos y luego rió. 

"Nada de Jeonggu, te pedí que ordenaras esto y no hiciste nada" quiso patalear, pero eso no habría causado que lo viera como alguien respetable. 

"¡Prometo que lo haré luego, cuando este capítulo termine!" 

"No te creo, no harás nada"

"¿¡Por qué no me crees!? ¡Lo haré, te lo juro! Sólo siéntate conmigo"

JungWoo torció el gesto, cruzándose de brazos. 

YukHei le hizo ojitos. 

El mayor suspiró y se sentó al lado de él, pero en la otra punta del sofá. Aún cruzado de brazos y sin mirarlo. Kun tenía razón, siempre terminaba haciendo lo que él quería. Bajó la mirada, suspirando ante la idea de que YukHei solo lo viera como el tipo más fácilmente manejable de todo el mundo. 

"Oye, ¿te sientes bien?" 

"Sí, solo me siento conmovido por los sentimientos de la protagonista" miente, sonriendo levemente.

"¿Te sientes identificado con ella?"

JungWoo mira la pantalla, donde parece que el chico que le gusta no la quiere del mismo modo. Entonces termina asintiendo, intentando restarle un poco de importancia.

"Si te beso, ¿también abrirías mucho los ojos?" preguntó el menor, apoyando una mano cerca de él, depositando su peso sobre esta. Una sonrisa coqueta se formaba en sus labios.

JungWoo pensó que ahí iba de nuevo, enganchándose en sus juegos en los que YukHei siempre terminaba riéndose porque era un mocoso tonto. 

Entonces, una idea cruzó por su mente.

Se inclinó apenas lo necesario para poder besarlo y no precisamente como en los doramas. Le dio un beso en serio. Como lo haría un hyung.

Se separó, sonriendo como si no hubiera hecho nada, para efectivamente encontrarse con YukHei con los ojos muy abiertos.

"Yuki, el capítulo terminó, ponte a ordenar todo"

"P-pero" el menor todavía no reaccionaba, miraba muy sorprendido a JungWoo. No terminaba de creérselo.

"¿Pero qué? Anda, ponte a ordenar, te toca" usó voz más seria.

"¡Jeonggu! ¿Qué rayos fue eso?"

JungWoo se paró, dispuesto a ir a su habitación, entonces utilizó la misma sonrisa coqueta.

"Si quieres averiguarlo, tienes que llamarme «hyung» y ordenar todo este desastre" se detuvo antes de desaparecer por la puerta de su habitación. "Apúrate si no quieres que me arrepienta".

YukHei saltó como resorte, no tenía la menor idea de lo que le había pasado a su hyung, pero sea lo que fuera, también le encantaba ese lado de él.