Fantaseando con mi libertad |J.B|

5.

- tranquila soy yo - me quito la mano dejando me ver y respirar bien

- que haces aquí ? - me estaba desesperando nadie sabia donde yo vivía y esto me ponía en riesgo a todo

- te mande a seguir, investigue un poco sobre ti - sonrió

Sin pensármelo dos veces le di un golpe en su pecho.

- estas loca ? Que te pasa ? - me sujetaba las manos para evitar que lo lastimara

- me pueden matar por tu maldita culpa que crees que haces idiota - me estaba tratando de zafar de su agarre y se me era imposible sin lastimarlo

- de que hablas? - me aprisiono contra la pared solo miraba a sus ojos pidiendo que se fuera

- tienes que irte ahora mismo no puedes estar aquí - el me soltó sin entender a que me refería - que te vayas joder ! - lo empuje sacándolo de mi casa cerrando la puerta en su cara

Y ahora que haré? esto esta mal.. así como me encontró el lo pueden hacer otros! Alguien le tuvo que decir mi dirección. Esto es grave me tengo que ir ahora!.

El tocaba la puerta pidiendo una explicación, con ese escandalo los vecinos saldrán a ver que sucede, y si hay reporteros que lo siguieron? Me van a matar por su culpa.

Abrí la puerta sin mostrar mucho mi cara.

- estoy algo alterada y sin contar el cansancio de todo el trabajo que tal si hablamos mañana puedes venir y lo tomamos todo con alma te diré todo lo que me preguntes - su confusión era notable trato de acercarse pero se dio cuenta que no era apropiado

- mañana vendré espero que no te escapes de nuevo y que tampoco que golpees - le Sonreí falsamente y cerré la puerta

Me tome del cabello desesperada, que voy a hacer ahora ? Si Raúl me encuentra sera mi fin, caminaba de un extremo a otro pensando en donde podría ir, fui por un mapa, en donde podría ir? Este a pesar de ser un pueblo pequeño y no muy reconocido me encontró.

No tenía mucho dinero así que tendría que ver como resolvía esto, rebusque entre mis cosas hallando unas pulseras de oro que me encontré estos días en una calle cerca del trabajo, me daba algo de lástima tener que venderla pero era eso o mi vida.

Mire la hora, aun era temprano.. salí de allí directo a el local de venta y compra de joyas, parecía una musulmán me tape la cara tal cual ellas así nadie sabría quien soy.

Logre conseguir unos dos mil dolares por esas pulseras al perecer eran muy caras no hable casi nada con el vendedor no me interesaba en lo mas mínimo hablar con las personas me tenia que ir rápido, lo mas rápido posible.

Metí todo en las maletas que tenia, bueno lo mas que podía, no tenia un rumbo concreto pero creo que lo mas probable era otro sitio mas solitario aun.

<Un mes después>

Caminaba de vuelta a casa, estaba cansada de atender a personas hoy...

Estaba trabajando de lo mismo pero le pague una buena cantidad a mi jefe para que no me dijera en donde estaba y pedí cambio de sucursal, ahora estaba en otro país.. encontré la manera de salir de allí me vine a España a un pueblo donde se hacia el mejor vino según los españoles...

No tenia amigos era la chica rara del pueblo. No llamaba mucho la atención de nadie para que no me tomaran en cuenta.

No tenia nada de hambre así que me encerré en mi cuarto a leer un libro.. uno de derechos, quería aprender a como defenderme en el caso de que me encontraran algún día, o tuviera la valentía de denunciar a esos desgraciados.

Empecé a llorar porque sabia que por mas que hiciera cualquier cosa mis días de libertad y de vida estaban contados, no sabia cuanto estaría lejos de ellos, de sus abusos pero mientras no me encontraran viviría mi vida lo mas decente que podía.