El Arte de la Poesia

Dios ha muerto

De pequeño ungido en aguas del bautismo,
Mi abuela con sus rezos y estampillas,
En la escuela me enseñaron catequismo,
Y me obligaron a asistir a un par de misas.

Más temprano que tarde llegó la conmunión,
Y yo ni sabía lo que hacía,
En la escuela decían que con Dios era la unión,
Yo solo me callaba y asintía.

Más tarde que temprano fue que conocí la historia,
Las masacres, la mentira, los condones, la homofobia,
Y comprendí que eran basura esas viejas enseñanzas,
Pues el hombre hizo a Dios a su imágen y semejanza.

Sé que hay gente muy feliz en la ignorancia,
Esperando con ansias vida eterna,
Y ojalá esto fuera así, no es arrogancia,
Pero al final la nada es todo lo que queda,

Incluso a veces el pensar es un castigo,
Surgen muchas preguntas en la mente.
Hay dias que ni yo encuentro el sentido,
Dios es un mal necesario de repente.

Soy uno de los tantos que afirman que Dios ha muerto,
Se murió de soledad pues al cielo no llega nadie,
Por culpa de instaurar tantas reglas y mandamientos,
Estar libre de "pecado" debería avergonzarte.

Sí él existe realmente ya no importa,
¿De qué sirve tener un Dios ausente?
Sí simplemente calla y nada aporta,
Sí la fé une y divide a tanta gente.

El otro día le llegó la hora a un pariente,
En la noche fue que se hizo el velorio,
Decían "esta con Dios" como aliciente,
Para mi ese consuelo fue ilusorio.
Sin embargo, cuando llegó el momento,
En que había que rezar y hacer la señal de la cruz,
Los acompañe en el sentimiento,
No por credo, por deseo de algo más que un ataúd.