cap 5

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¡Ten cuidado raro! — gritó un chico
       rubio, el cual casi fue el motivo de
       mi caída entre la avalancha de gente.

       Todos apresurados bajaban las
       escaleras, como si de animales
       salvajes que ven el mundo por prime
       -ra vez se tratara. Todo era tan
       monótono. Común. Básico.

       Yo sólo pensaba en Hyung, en tenerlo
       en mis brazos, pensar en su dulce
       olor me hacía sentir un ardor en el
       estómago, algo que ya sentí tantas
       veces pero viene a mí como si fuera
       la primera vez.

       Finalmente, me encontré con la sali
       -da, directo a la azotea, silenciosa
       -mente, apoyé mi mano en ésta y
       la empujé hacia atrás.

       Allí estaba. Admirando atentamente
       el cielo que mostraba sus tonos
       amarillentos y rosados. Me lo ha
       dejado tan fácil.

       Sigilosamente avancé, cada paso
       definía el destino, el mínimo error
       y todo se echaría a perder. No
       permitiría que me arrebataran a
       Taehyung, él es mi todo, no importa
      -ría derramar sangre inocente como
       la de Park Jimin, al final y al cabo,
       ¿Todos vamos a morir de alguna
       forma no es así?

       Un movimiento rápido activó mis
       sentidos, el peli-negro dió media
       vuelta, y si digo "media" es porque
       no le permití completarla. No hay
       tiempo que perder.

   — Oh, JungKook, est...— con todas mis
       fuerzas apoyé ambas manos en sus
       hombros y lo empujé.

       Lo irónico era que el tacho de basura
       estaba ubicado al lado del lugar en
       donde se estrelló.

       Mala suerte hoy, Park.

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