Carpe Diem (18+) Trilogía Mazzeratti Vol. II

Carpe Diem

Mire una vez más la lápida sin dar crédito al tiempo que había pasado, un año tras la muerte de Franco. Colton había llevado unas flores blancas mientras miraba sin decir una sola palabra.

-Luce como si no tuviera muchas visitas ¿Crees que sus padres no vengan?- Me pregunta Colton

-Ellos se fueron de Italia fue lo último que supe cariño, pero si gustas podríamos venir tu y yo mas seguido. ¿Te parce?

Toma mi mano y sonríe, el año sin duda había sido duro. Después de mi despedida con Matt no volvimos a vernos. Se retiró del Básquet y se fue de la ciudad, no podía evitar pensar si estaba con ella o no. Amaba aun a Matt con todo mi corazón pero no era nuestro momento y todo pintaba que jamás lo seria. Vi a Colton sufrir cada día tras su partida al igual que yo pero sin duda era lo mejor. Muchas veces quise marcar su número e intentar de nuevo aquella burbuja que ambos creamos pero estaba mal. En aquello que podemos llamar relación ambos estábamos sujetos al dolor que nos causó el pasado. No culpo a Matt y aunque tal vez lo amase con locura no podía volver, por mi mente cruzaban sus juramentos, sus falsedades y cada vez que me hizo feliz.

-¿Ya terminaron?- Me pregunta Paola

-Si ¿y tú?

-Sí, deje las flores favoritas de Pierre.

Después de ir al cementerio los niños se quedaron en casa con sus abuelos mientras salimos de compras mis hermanos al igual que mi cuñada. Paola había dejado su trabajado en Alemania y volvió a Italia habían pasado tres meses de eso y aun no hablábamos del tema, aunque ambas sabíamos que aquella comida era sin duda un cuatro.

-Los padres de Franco no van ni a ver la tumba de su hijo ¿Cómo pueden ser así? Colton estaba muy furioso. – susurro

-No puedo creer que aún no perdonen que Franco por dejarle dinero a Colton. – Gruñe Hannah

-Alguna gente es así, no pueden cambiarlos.- Exclama Paulo

-La mama de Pierre aun me invita a comer algunas veces.- Sonríe Paola

-Bueno es que Marcela es un sol.

-¿Pueden creer que paso un año? Todo fue muy rápido pero es bueno que todos estemos aquí juntos para navidad. – Dice Paulo

-Oh vamos ya pregunta sé que te mueres por preguntar, sé que ya no puedes más. Él y yo terminamos y no podemos regresar es lo único que les diré. – Gruño molesta

Hannah y Paola se carcajean mientras Paulo me mira con los ojos entrecerrados.

-Yo no dije nada, solo estaba...

-Estabas comenzando a sacar el tema te conozco Paulo.-Gruño.- Terminamos no podíamos seguir así.

-Hannah y yo nos perdonamos después de todo. TU historia no es tan complicada nosotros también no empezamos de la mejor forma pero nos amamos y pudimos superarlo tal vez..

-Matt no eres tú. Tú te quedaste y luchaste aun contra ti mismo. Él se fue y está bien. Fue lo mejor yo... tenia mil cosas en la cabeza y bueno él una tonelada de equipaje oculto

-Pero cuñada... Yo también lo tenía estaba atada a mis recuerdos a una relación toxica mientras tu hermano me quería follar para vengarse de mi pareja en ese momento no fuimos perfectos pero lo superamos y nos enamoremos. El tiempo separado nos hizo ver muchas cosas y sin duda una de ellas fue que no podíamos vivir el uno sin el otro.

Mi hermano toma su mano y la besa ligeramente sonrojando a mi cuñada.

-De acuerdo... ¿Y tú Paola porque regresaste a Italia? –Preguntó para cambiar el tema

Me frunce el ceño mientras devora su rebanada de pizza.

-He sido un hombre paciente hermanita pero... te veías feliz con él no sé qué cambio... solo quiero saber si estás bien.

-¿Has hablado con él? Últimamente te ves muy radiante.- Exclama Hannah

-No, nosotros terminamos y yo. Solo tome un vuelo a casa. Estamos bien así el ... bueno. –Sus ojos se llenan de lágrimas.- Solo puedo decirles una cosa porque era inevitable en un tiempo seguir callándolo.

Fruncimos en ceño mientras ella sonríe.

-No sé cómo.- Suelta una carcajada.- Bueno si se cómo, solo... ESTOY EMANRADAZADA

No doy crédito a lo que acaba de decirme la miro con los ojos abiertos mientras ella sonríe.

-¿Qué? Pero... ¿Cómo fue posible?- Suelta Paulo

-Hermanito con tres hijos está claro que el método lo sabes.- Suelta Paola.- Me habían dicho que yo jamás tendría un hijo que era imposible, pero supongo que los milagros existen ¿no?

La jalo hacia mí y nos abrazamos estamos llorando como dos niñas como solíamos hacerlo para que castigaran a Paulo sin poder evitarlo me carcajeo por ello.

-No sabes lo felicidad que me da eta noticia no te lo puedes imaginar.- Paulo la abraza mientras Paola limpia las lágrimas de la mejillas de mi hermano.

-¿No piensas decirle? -Pregunta Hannah

-Un niño no arreglaría nada entre él y yo, esta es mi ilusión más grande siempre quise ser mama y créame peleare por ello, así pase los próximos 6 meses en cama lo hare para conservar a mi bebe.- Sus ojos se llenan de lágrimas.

-Tenemos 5 meses para organizar el baby shower del siglooooooo.- Grita Hannah

Después de mucho tiempo en verdad me siento completamente feliz, nada me podría hacer más feliz. La vida no siempre era fácil estaba claro y las cosas no siempre salían como uno quería, el tiempo jamás era en balde sanaba heridas y sin duda reformaba cicatrices, sin importar que tan profundas fueron alguna vez. Hoy más que nunca estaba dispuesta a vivir en "Carpe diem" no había un futuro en estos momentos mi felicidad se encontraba en la mesa con mis hermanos, sin futuro ni atadura la única cosa a futuro que estaba en mis planes es conocer aquella hermosa criatura que estaba por venir y cambiarnos la vida a todos. 

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