Relatos Para Concursos

muñeca de trapo

Hola, soy la muñeca de trapo, Lara, bueno así me puso mi dueña, Mirley

Es una niña de unos diez años de edad, es muy dulce y muy linda

Siempre jugaba conmigo todos los días después de su colegio

Pero... un día, todo cambio

Hace aproximadamente unos tres días, ella ya no juega conmigo

Solo me agarra y me abraza muy fuerte mientras ella llora

Se que soy solo una muñeca, que no me puedo mover ni nada, pero... siento un sentimiento muy fuerte hacia Mirley, la quiero mucho es mi mejor amiga aunque ella no lo sepa, o bueno eso creo yo

Últimamente la veo más triste cada día, come poco, hace sus tareas de mala gana, ya no sale de su cuarto, entre otras cosas

Ella ya no me habla, así que no se que le sucede

Desearía poder moverme y hablar, para así decirle lo mucho que la quiero y que la apoyo en esta etapa de su vida

-deseo concedido- escuche una voz

El de hablar y moverme 

-como te lo dije, te e concedido tu deseo- dijo aquella hada y me pare de un salto

Puedo moverme

-sii, puedes hablar, moverte, oler, oír, todo menos comer; pero he de advertirte, si un humano además de Mirley, te ve, el deseo desaparecerá, y solo serás una muñeca de trapo como las demás- dijo aquella hada y desaparecio al terminar

Me puse a caminar por los alrededores del cuarto de Mirley, pues ella aun estaba en el colegio

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Estaba en la cama de Mirley, como era costumbre hasta que la puerta se habré y una linda niña aparició

Como siempre, me busca y me abraza fuerte

-tranquila- susurre y ella miro a todos lados, en busca de aquella persona que dijo eso-soy yo, Lara- susurre

Mirley me mira y me mira confusa, abro mi boca y ella se sorprende

-hablas- susurro ella sorprendida

-un hada me concedió un deseo, y es que me pueda mover, hablar, oír y oler, pero no comer; estoy aquí para que sepas que te quiero mucho, Mirley- dije dándole un mini-abrazo

Ella sonrió y me devolvió el abrazo

-espera aquí, iré a almorzar- dijo ella

Dejo sus cosas en su lugar y salio de su cuarto con ida al comedor

Me subí a la cama y ahí me quedé

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-despierta- susurran en mi oído y yo me levanto de a poco

-que- dije un poco adormilada

Enfoque más mi vista y me di cuenta que era Mirley quien me hablaba

-que paso- pregunto sentándome en mi lugar 

-quiero contarte que me pasa- dijo ella triste y yo me sentí igual

Es raro, pero una muñeca de trapo como yo, tiene sentimientos y eso que no tenemos corazón,  a excepción del que me dio Mirley y el que llevo desde que me lo puso ella

-que te pasa- le pregunto cuidadosamente

-me fastidian en el colegio, por mi aspecto, me dicen cosas feas y me empujan- dijo ella con los ojos llorosos

Así que era eso, Mirley, sufre una enfermedad, no me acuerdo como se llama, pero su aspecto físico es diferente a la de las demás, su cabello es blanco al igual que su piel, sus cejas igual y tiene pecas, es pequeña parte su edad pero muy inteligente tambien

- tranquila, dile a tus padres y ellos te ayudarán,  no sufres sola, siempre estaré contigo- dije consolandola y en ese momento la puerta se habré

-Mirley- menciono la madre de Mirley viéndome y el hechizo desaparece

Se que la madre no recordará lo que acaba de ver, pero aun así el hechizo desaparece

-no me olvides- susurre para ya no oler mas, para no moverme y hablar más

Aun seguía teniendo sentimientos, y cada ves son más fuertes

Sentía como Mirley me abrazaba y como gotas de lágrimas me mojaban

Los días pasaban y Mirley jugaba conmigo, me abrazaba y ya no lloraba

Al parecer me hizo caso y les dijo a sus padres

Nadie merece ser fastidiada por algún defecto que tengan

Cada uno es como es y así se deben querer

Si te fastidian en el colegio por algo, dile a un adulto porque ellos se pueden encargar de que tu vida mejore

Mirley me hizo caso y ahora es una niña feliz, ya no mas problemas para ella

Y como le dije, ella no me ha olvidado

Mucho tiempo a pasado, los días pasaban, los meses igual y los años aun más ,  y Mirley aun me quiere como el primer día que me entregaron sus padres a ella a los cinco años

Soy la muñeca de trapo más feliz que haya existido, y la única que tiene como dueña a Mirley, una niña diferente pero especial en mi corazón de trapo

EditorialPatata