Capítulo único

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Un equipo de tres, una persona que sobraba allí y dos amigos que simplemente parecían querer ignorar a aquel que no pertenecía.

Kirishima no era una mala persona, sin embargo, sus ansias de obtener la atención de Bakugo para él, lo estaban haciendo comportarse como un verdadero patán mientras ignoraban al tercer compañero que formaba parte de aquel grupo de patrullaje.

No era de sorprender que Katsuki lo ignorase, el rubio siempre había destilado ese aura de superioridad. Siempre buscando demostrarle que estorbaba y que su presencia allí no era más que un simple error por parte del mediocre estilo de enseñanza del profesor Aizawa, que normalmente proponía ese tipo de trabajos grupales para fomentar el compañerismo entre los alumno de la clase 1-A.

Todoroki avanzaba detrás de aquel duo que parecía rehuirle en cada oportunidad, de pronto ambos comenzaban a correr dejando al muchacho bicolor alguno metros detrás de ellos, pero claro siempre procuraban no apartarse de su rango de visión, sino se los acusaría de su falta de compañerismo.

Kirishima hacia bromas estúpidas, iniciaba contactos innecesarios con su acompañante, como recargarse sobre el rubio o darle algún abrazo amistoso.

La zona que patrullaban se hallaba particularmente tranquila, las personas que transitaban el lugar eran pocas, lo atribuyó a la copiosa lluvia que no dejaba de caer.

Shoto caminaba a paso firme, si la idea de sus acompañantes era que él corriese detrás de ellos, estaban muy equivocados. Aunque se sintiera solitario no se rebajaría a verse humillado de aquella forma.

Suspiró deseando haber sido equipo de Midoriya y tal vez alguno de los amigos de este último, a fin de cuentas ellos normalmente buscaban integrarlo no apartarlo como sucedía en este caso.

Kirishima se giraba de vez en cuando para contemplar al hijo del héroe número dos, lo veía absorto en una melancolía de la que se asumía culpable, pero es que simplemente no podía concebir la idea de que aquel sujeto fuese digno del interés de Katsuki. Eijiro deseaba más que ser reconocido por su fuerza, deseaba más que una mera amistad con el muchacho explosivo; deseaba que lo considerase un rival, como lo hacía con el bicolor pero sobre todo deseaba despertar las mismas emociones que Todoroki lograba despertar en Bakugo sin siquiera proponérselo.

Al igual que su “supuesto” amigo, Katsuki volteaba su mirar para visualizar al tercer integrante que por mucho, venía detrás de ellos. Había permitido el comportamiento pesado e incluso fastidioso de Kirishima con la esperanza de que tal vez, al voltear su mirar, el rostro de Shoto le trasmitiera algo más que ese parco y frío gesto de desinterés para todo lo que le rodeaba.

Al parecer era imposible que aquel estoico muchacho diera siquiera un simple signo de vitalidad, lo veía caminar sereno, sin siquiera apresurarse por llegar con ellos o cubrir su cuerpo de la incipiente lluvia.

¡Vamos que le gustaba la fortaleza del heterecromatico! ¿Pero en serio le importaba tan poco el intentar acercarse a ellos? ¿Era tan difícil despertar su interés?

Parecía ser que la única persona merecedora de atención para el bicolor, era el idiota de Deku. Ese maldito nerd podía acercarse tanto como quisiera al ridículo mitad y mitad e incluso creía verlo más alegre cuando el bastado sin quirk se acercaba a él.

¿Por qué? Por qué alguien del nivel de Shoto prefería estar cerca de alguien como Deku, en lugar de seguirlo a él, de perseguirlo y considerarlo su rival, de siquiera hacerle creer que su presencia significaba algo.

Desde el primer momento que había visto al joven de la cicatriz su mente era un caos, quería su atención, quería aunque fuese tan solo su odio pero era imposible para Shoto él no existía.

No correspondido [BakuTodo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora