If you love me, don't let go

Capitulo 9

Era domingo alrededor de las 3 de la tarde y Suga se encontraba en casa de Rap recogiendo algunas cosas que su tía le obsequiaba para su casa

—Yoongi porque no nos dices donde vives para visitarte y mandarte cosas —Lo regañaba en broma la madre de NamJoon

—No se apure tía estoy muy bien les agradezco —Levantó las bolsas con algunas cortinas, sartenes, almohadas y cobijas

—Comienza el otoño y al rato ya estaremos en invierno, cualquier cosa no dudes contactar a NamJoon o a mi

—Claro —Se despidieron y Rap ayudó a Suga a guardar todo en el asiento trasero de la camioneta

—¿Es todo?

—Si —El rubio iba a despedirse cuando el teléfono sonó y contestó

—¿Cómo? ¿Dónde estás? —Emitía un sonido de molestia —Pero... Ash está bien voy para allá

Colgó y rápidamente marcó —Contesta, contesta, contesta —Decía una maldición y bufaba casi queriendo lanzar el teléfono

—¿Pasa algo? —Le preguntó sin ganas, al ver el rostro de su primo que casi le rogaba

—¡Si! El muy idiota de JaeJin chocó y quiere que pase a recogerlo por la carretera

—Ohhh y....

—Se supone que iría a la feria con Jimin, él debe de estar allá en estos momentos

—Y no me digas su teléfono no contesta

—¡Y su teléfono está apagado! —Dijeron al mismo tiempo

Rap se le quedó viendo una vez a su primo y el otro retrocedió un poco negando con la cabeza

—No NamJoon, te hice el favor una vez, no voy a ferias

—Por favor —Juntó sus manos —Está bien, solo llévalo a casa... Por favor

Los dos se quedaron viendo, Suga con una cara de pocos amigos pero al ver que Rap seguiría en la misma posición suspiró y el moreno sonrió victorioso

—Eres el mejor Yoongi

—Si si si Hasta luego, dile que se vaya comprando otro teléfono como que ese no sirve

Se subió al auto y luego de despedirse una vez más y de escuchar lo increíble que era, puso la dirección en el GPS y manejó hasta allá

Conforme se acercaba más a su destino algo lo tenía inquieto, no sabía que, simplemente era algo muy extraño, su estómago parecía que tenía una pelota y lo aplastaba

—Veamos donde estas Jimin —Habló para sí mismo mientras aparcaba

Se bajó del vehículo y de nuevos unos extraños y desconocidos nervios lo invadieron, se arregló un poco el cabello con el espejo lateral y se amarró las agujetas de sus converse color blanco, usaba unos pantalones de mezclilla claros algo descoloridos y rotos además de una camisa de botones abierta color negra con una playera blanca abajo

Observó la entrada y examinó a toda la gente cerca de ahí pero no logró visualizarlo en ninguna parte, se detuvo y prestó atención a la bancas encontrándolo mirando a todas partes

Parecía un niño, sentado con sus piernas juntas, usaba bermudas y una playera algo holgada, juntaba sus labios en forma de un puchero y por el rostro se notaba algo preocupado

Sintió una ligera taquicardia pero creyendo que era solo por la sorpresa de encontrarlo, caminó tratando de verse relajado hasta toparse con esos ojos negros