Capitulo 15

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El domingo en la noche estaban viendo un programa Suga y Jimin en casa del primero, sentados en la alfombra con sus piernas extendidas y los platos de la cena arriba en la mesa ya vacíos

—Que idiota —Murmuraba Suga refiriéndose a la decisión que tomaba el personaje

Jimin soltó una risita discreta por eso, se percató que el rubio le encantaba interactuar con el televisor y escucharlo le daba mucha gracia

Siguieron viendo el programa mientras pasaba el tiempo, los celulares se encontraban lejos de ahí, Jimin estaba tranquilo porque ya se había despedido de Rap por mensaje

En una traición por parte de su subconsciente, Jimin bajó la mirada a los pantalones de Suga, observando su entrepierna y ruborizándose de inmediato vio el televisor

Se sentía con muchas ansias, desde unos días atrás su cuerpo le pedía a gritos que Suga lo tocara y aunque esto ocurría, necesitaba más, ya estaba siendo muy difícil controlar sus necesidades

—Bueno se acabó.... —Apagó el televisor y miró al pelinegro —¿Quieres hacer algo?

Se mordió el labio nervioso y con el corazón comenzando a latir por aquella pregunta, Suga lo miró de reojo y sintió un cosquilleo en su abdomen

Se veía bastante apetecible así, aunque fuera una simple playera y un pantalón, a decir verdad era que también se moría por tener a Jimin debajo de forma más comprometedora

—No se.... —Giró su cuerpo y lo miró coquetamente rozando con su mano el muslo de Suga —Yo...

Quiso detenerse en un segundo pero su cuerpo quemaba y sus acciones eran involuntarias, no estaba pensando claramente

Movió sus dedos juguetonamente como si caminara sin dejar de mirar al rubio seductoramente, los dedos subieron hasta llegar cerca de la entre pierna

—Oh...—Suga dio un respingo cuando esos dedos tocaron la tela del pantalón en esa parte

Jimin ya con toda la mano, la movió sintiendo la virilidad del rubio, estaba completamente extasiado, era la primera vez que lo tocaba y en segundos comenzó a excitarse por permitirle realizar esa acción, Suga no se movió ni un poco mirando seriamente al pelinegro no quería ceder tan fácil

De pronto una corriente eléctrica le recorrió su columna cuando, a pesar de la tela, pudo sentir claramente la mano de Jimin, empezando a encenderse

Ambos se vieron, comenzando a dibujarse una sonrisa en el rostro de Jimin al ver ahora si las reacciones del rubio cenizo

Lentamente se acercó y se sentó en sus piernas, lo tomó del rostro y se acercó pero sin besarlo, solo rozaron sus labios y sus alientos chocaron; el rubio lo miraba con inmensos deseos de poseerlo y eso lo notaba Jimin, quien no dejaba de sonreír pícaramente

Suga aprovechó y tomó sus dedos para lamerlos sin dejar de mirarlo

Jimin cerró sus ojos gozando de ese placer y sin querer callar gimió fuerte luego de que las pálidas manos de Suga acariciaran su espalda por dentro de la playera

Por fin dejó los dedos con un hilo de saliva, siempre mirándolo coquetamente y buscó la boca del pelinegro besándolo con hambre, los besos terminaban sonoramente y cada que podía lo pegaba más a su cuerpo, sintiendo sus caderas moverse adelante y hacia atrás

Las prendas comenzaron a estorbar y con ayuda del otro se quitaron la parte superior, Suga besaba sus pectorales y botones que desde que los probó se había vuelto adicto, mientras la voz melodiosa del pelinegro se escuchaba en la habitación

If you love me, don't let goDonde viven las historias. Descúbrelo ahora