Capitulo 7. Mi Culpa

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En el momento cuando me senté sobre el chico, mis ojos se cerraron al igual que mi sentido de el oído.

Cuando abrí los ojos de nuevo, estaba de nuevo en el cuarto blanco.

San Pedro estaba dándome vueltas, asta que llego el momento en el cual se detuvo y me dijo.

-estas seguro de continuar con esto.

Me quede impactado de estar en aquel cuarto de nuevo.

-si claro que si - le respondí - no importa lo que escuche, tengo que seguir con todo esto.

Pedro se me quedo observando y dijo.

-bien. Tendrás la oportunidad de poseer tres cuerpos cuando lo necesites, con este llevas una, te sobran dos.

Muy alegre lo mire y respondí.

-okey.

Pero cuando conteste, note que esa no era mi voz. Me incline para poder ver, pero también me di cuanta de que no era mi cuerpo, si no, el de el chico que estaba con rosita.

Cuando mire de nuevo hacia arriba me di cuenta que ya no estaba en el cuarto, si no de nuevo en el restaurante.

Bueno, pues es momento de las preguntas.

Mire a rosita y le dije como si fuera el otro tipo .

-supiste sobre la muerte de lían.

Ella miro con disgusto y dijo.
-desde luego, todo la privada lo comenta.

Ella seguía mirando con disgusto, así que le dije.

-y no te sientes mal por su muerte. Se supone que eran amigos.

Ella se inclino y dijo.

-en realidad no, y no es por que no lo quiera, si no por algo que el me iso, que asta ahora no e podido olvidar.

Me sorprendió su respuesta.

-y que fue lo que te iso.

Ella miro hacia otro lado, suspiro y dijo.

-hace dos años el y yo eramos excelentes amigos, es mas, me atrevo a decir que los mejores del mundo. Pero un día llegue a su casa y accidentalmente lo escuche a el y uno de sus amigos charlando.

Cuando dijo eso me acorde de aquella charla.

-el y su amigo hablaban de como lían de avía vuelto mi amigo solo por mi dinero. Eso me dolió mucho, ya que yo a el lo consideraba mi amigo..

Es cierto, yo también había lastimado personas.

No podía soportar la culpa y abandone el cuerpo.

Hace tres años rosita se avía mudado a nuestra privada. Su papa es dueño de los hoteles diamond palace, cuando lo supimos un amigo y yo hicimos aquel plan. Con el paso del tiempo conocí mejor a rosita y llegue a apreciarla, fue hay cuando le dije a mi amigo que teníamos que parar con aquel plan, pero creí que rosita no lo sabia, fue por eso que nunca le dije nada.

Como es posible que unos niños de apenas primero de secundaria hallan planeado un plan tan cruel.

Salí de el restaurante y afuera estaba Támara sentada.

La mire me senté a su lado y le conté todo, tenía que des ahogarme.

Todo esto me tenía muy tenso, támara me dijo.

-todos hemos echo algo así en la vida, son errores que cometemos pero tenemos que ser sinceros con aquellas personas y pedir perdón - ella me miro con gran tristeza y me dijo - bueno vámonos de aquí, me veo mal ablando sola.

-okey vamos a otro lugar - dije ya mas tranquilo.

Fuimos a aquel parque de la otra vez y nos sentamos en una banca asta que anochecio.

Ya son dos días menos para que la semana acabe.

Támara me miro y dijo.

-Vamos a el hospital.

Me alegre y le dije.

-okey Vamos.

Cuando llegamos a el hospital fuimos a mi sala, pero justo antes de entrar escuchamos a Jann ablando solo.

Támara entro con Jann entonces Jann la miro y le dijo.

-aun no puedo creerlo.

Támara me vio y luego le contesto a Jann.

-ni yo - entonces Támara suspiro y dijo - cuanta falta nos hace.

Su repuesta me sorprendió, pero mas me sorprendió lo que dijo Jann.

verdad en coma Donde viven las historias. Descúbrelo ahora