La simpleza de los corazones y la tristezas de la mente, son sólo los efectos secundarios de las cicatrices del pasado y como siempre nosotros tratando de ir dos pasos delante de las tristezas porque es más fácil evitar los dolores que tener que enfrentarlos y como siempre tratando de huir de las tormentas sin saber que que yo soy el huracán, al final no huimos de los demás, sino que huimos de nosotros.
Aún así me canse de huir y de enfrentar diluvios así que construire un bote y aprenderé a vivir en la tormenta.