capítulo único

16 4 29
                                    

Me encontraba en la estación central de Seúl, estaba recostado en algunas de las bancas, mientras esperaba que apareciera el tren. El cansancio me consumía; trabajar doble turno en aquella cafetería hacía que me sintiera realmente agotado.

Cuando estaba a punto de cerrar los ojos por completo un sonido estruendoso hizo que me levantara rápidamente de mi lugar por el susto. Al mirar al frente vi como un joven con traje al otro lado de la estación levantaba unas carpetas del suelo; aquellos tubos de las bandas que permitían el acceso a la estación estaban tirados, al parecer eso había provocado el ruido.

Cuando este giro hacía el frente, pude ver su rostro, sentí un escalofrió recorrerme de pies a cabeza y mi mirada no se apartó de la suya, inclusive puedo jurar que tenía una pequeña sonrisa en los labios.

Pero aquella burbuja en la que me encontraba exploto, cuando en tren apareció tapándome la vista de aquel misterioso chico para mí.

Cuando escuche que el tren daba el último aviso para marcharse, decidí ingresar y tomar un asiento cualquiera, pero me sorprendí al ver que el chico misterioso se sentaba frente a mí mientras revisaba las hojas que había en las carpetas. Estaba tan concentrado que ni siquiera noto mi mirada sobre él; ahora verlo un poco más de cerca había alterado todo mi ser, era realmente lindo, cabello rubio bien peinado haciendo que luzca formal, aquel traje que lo hacía lucir extremadamente sexy, piel morena y aquel lindo pocito que se le marcaba en su mejilla por la mueca que tenía en la cara.

Desvié mi mirada hacia la ventana pensando que aquel chico lindo talvez tenia cientos de chicas y chicos tras él; entonces baje la mirada hacia mi ropa, notando que mi pantalón estaba un poco desgastado de la rodilla, mi playera era una talla más grande de lo usual y la gorra que tenía para cubrir el desastre de mi cabello estaba mal puesta.

Mi rostro debía lucir mal y ni hablar de las ojeras que de seguro tenia por trabajar doble turno.

No podía imaginar que el realmente se pudiera fijar en alguien como yo, si tan solo tuviera el día de hoy suficiente valentía para cruzar hacía su asiento y preguntarle su nombre.

^°^

Las semanas pasaron y aquel chico siempre tomaba el lugar frente a mí, pero un día me sorprendió al ver que no llevaba su traje negro, tenía puesto unos jeans negros haciendo que sus piernas lucieran largas una playera blanca, una chamarra grande por el frío que estaba haciendo y un gorro negro que cubría sus cabellos rubio.

Pero note que una tercera persona apareció sentándose a su lado entregándole un café.

Él lo había aceptado gustoso y a cambio le regalo una sonrisa; que daría porque la sonrisa fuera hacia mí. Escuche un poco de la charla que tenían y al parecer el chico de piel pálida le reclamaba por trabajar en exceso y no tomar un descanso.-puedes enfermarte, el trabajo puede esperar-le dijo mirándole con el ceño fruncido. - lo sé, Yoongi gracias por preocuparte- le volvió a sonreír, haciendo que a mí se me retorciera el estómago.-no me vas a hacer caso Namjoon te conozco-suspiro rendido para voltear su rostro serio.

Había escuchado su nombre, era lindo como él y entonces dibuje una sonrisa en mi rostro. Hasta que vi que me miraba fijamente haciéndome sentir cohibido, gire mi vista hacia la ventana sintiéndome verdaderamente pequeño.

El simplemente volteo a ver a su amigo y bostezo, verdaderamente lucia cansado.

^=^

Mí día no podía ir mejor, en la mañana mi cabeza daba vueltas y mi estómago se contraía en aquel excusado de la cafetería; comer solo chatarra por la noche para aliviar mi hambre había traído consigo mi enfermedad.

Salí al espejo del baño y me enjuague la boca, entonces decidí ir avisarle a Hobí que me retiraría a mí casa, el solo había accedido diciéndome que comiera mejor y que debía cuidarme más, lo único que lamentaba es que el día de hoy no podría ver a Namjoon en el tren.

Al día siguiente todo había dado un giro inesperado, estaba sentado frente al chico lindo y el vagón iba vacío, solo éramos nosotros dos, entonces el cambio de lugar ahora sentándose a mí lado, yo solo recargue mi cabeza en la ventana y suspire, su olor embriagaba mi nariz haciéndome sentir cosquillas.

Un dedo había tocado mi hombro y estaba seguro que moriría ahí, gire mi rostro y el me miraba. -¿Estas bien?-me había dicho, su voz era grave pero dulce a la vez, yo solo tenía cara de confusión.-Lo estoy-asentí con la cabeza, mi mirada se dirigió hacia su rostro y pude notar que sus ojos eran realmente preciosos y tenían un brillo especial haciéndome sentir intimidado.-realmente yo no te conozco, pero ayer yo...te extrañe al no verte en el tren- todo el aire de mis pulmones se me había ido al escuchar esas palabras y mi rostro era una extraña combinación de colores rosas y rojos por la pena.-yo lamento si te es extraño esto pero...-levanto una mano hacia mi rostro-eres realmente lindo-acaricio mi mejilla regalando pequeñas descargas eléctricas a mi piel yo solo seguí en estado de shoock, mi cuerpo no reaccionaba y me sentía en un sueño.

Estaba a punto de responder cuando las luces del vagón empezaron a parpadear y entonces pegue un brinco por el susto, mis nervios aumentaron más cuando se cortó la luz por completo; por reflejo había tomado una orilla de la chaqueta de Namjoon con mi mano, apretándola. No podía ver nada y eso me alteraba, sentía que me ahogaba, hasta que sentí como mi mano era apartada de la chaqueta y fue entrelazada con otra realmente cálida.- Nam...Namjoon- me quería morir en ese instante, haber pronunciado su nombre tartamudeando y que descubriera que lo sabía, sin que él me lo hubiera dicho, me hacía sentir patético.-shh Tranquilo-su voz fue tan suave que me reconforto.

Busco mi otra mano y la llevo a su cara regalándome un beso en el dorso de esta, sentía que mi cara estaba totalmente caliente y esperaba que realmente no fuera un sueño.-estas temblando-acaricio mi mano entrelazada-tu...también-debía dejar de tartamudear, pero la oscuridad realmente me daba miedo.-es porque estoy realmente nervioso-cada palabra que salía de su boca hacia que mi cuerpo quisiera ser abrazado por él, que lo reconfortara, que lo hiciera sentir en casa.

Cuando abrí un poco más los ojos, distinguí entre la oscuridad su rostro.

 tal vez estar en la oscuridad traería alguna ventaja, porque a pesar de tener miedo, vi como este se mordía su labio pensativo y entonces me acerque yo, con la poca valentía que me quedaba, puse mis labios sobre los suyos, sintiendo que flotaba, sus labios eran suaves, y se sentían tan bien, como si fueran nubes de algodón. Ninguno hizo un movimiento solo fue un simple roce, pero uno muy lindo.

Al separarme solo podía escuchar nuestras respiraciones y el silencio duro poco tiempo.-Seokjin...así me llamo-le había dicho mi nombre y entonces con lo poco que veía note su hermosa sonrisa, por primera vez esa sonrisa era para mí y era el mejor regalo.

Nuestras manos iban entrelazadas y ninguno hacia algo para separarlas, él estaba a punto de hablar, cuando la luz había regresado, parpadee un par de veces para acostumbrarme y entonces sentí un aliento chocar en mi mejilla y luego unos labios depositarse en ella, solo me había quedado quieto con mis mejillas sonrojadas. Giró un poco su rostro y ahora él me había besado, un beso tierno y delicado, sin prisa alguna.

Al separarse, junto nuestras frentes y entonces mi cuerpo tembló un poco-me gustas Seokjin-palabras tan lindas como el, yo solo le regale un suspiro que venía desde el fundo de mi corazón.

-------------------------------------------------------------------

¡hermoso! <3

bueno espero les haya gustado...

maho...

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Mar 06, 2018 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Jueves [Namjin One Shot]Where stories live. Discover now