Buenas y malas noticias

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Sólo quería salir con mi (redoble de tambores, damas y caballeros) increíble, maravilloso y lleno de talento, mi amigo, y además mi novio, Jung HoSeok. Tenía ganas de ir a comer pizza o hacer algo por el estilo con él, pero la verdad es que recién anoche SeHun había ido a dejarme a casa, Hannie aún no llegaba de quién sabe dónde, y todo el cansancio que no sentí en el viaje, lo sentí en cuanto me tiré a mi cama. Y eso que debía ir a reportarme con Tanina para poder ayudarla en lo de los impuestos que debía pagar, y también lo de la futura cafetería que querían.

Así que, en vez de quedarme haciendo fotosíntesis como las plantas en mi cama, decidí levantarme y bañarme. No dejaba de pensar si a Hobi le guste el regalo que le traje desde Jeju. Si bien no era como el recuerdo que le di a SeHun, que más que eso fue un collar antipulgas de perro, al que forré de terciopelo negro y que le coloqué un cascabel y un llavero de un abuelo de piedra. Agh, puede que no haya sido caro, pero sí me costó bastante armarlo. Además, es un nuevo uso para los aburridos llaveros de siempre, así puedo ser como chica DIY, ¿No?

Pero en cambio, el regalo de HoSeokie me había costado no sólo la mitad de mis ahorros (lo suficiente para un boleto a Francia, pero no de vuelta) y varias horas recorriendo varios mercados de arte y artesanías. Era un trabajo delicadísimo, y no iba a mentir que me colocaba nerviosa el que no le guste.
Al final me levanté y llevé mi cansado trasero a la ducha, esperando que así se me pase el sueño aunque sea un poco. Quería ver a Hobi primero, y que me de abrazos y besos y me cubra de su amor, ya que el día que me pidió noviazgo no pudo haber algo más lindo por culpa de Hannie y de Tae-ssi, además del viaje a Jeju, del cual definitivamente no me arrepentía.

Al momento en que salí de la ducha un tipo empezó a tocar el claxon de un auto. No lo tomé en cuenta, seguramente era algún bruto que había ido a visitar a alguno de esos vecinos malditos que me discriminaban por ser china (país de... su mami, no falta por qué discriminar). Pero el ruido seguía después de dos minutos del infierno, y mientras me colocaba ropa interior, un vestido suelto y unas sandalias, seguía despotricando contra cualquier persona que estuviera haciendo ruido fuera de mi casa. Bufé molesta al ver que el auto estaba estacionado frente a mi casa.

  - ¡Hey! ¡Oye, idiota! - grité a la persona que, incluso si ya había salido, seguía golpeando el claxon como todo un desquiciado, y por los malditos vidrios polarizados, no sabía si era hombre o mujer, y si lo conocía siquiera. Al final decidí acercarme y golpear la ventana del conductor. - ¡Oye, idiota! ¿¡Qué te crees para- !?

Estaba enojada, o tal vez sólo molesta, pero, ¿Quién no lo estaría si una persona hace un montón de ruido fuera de tu casa?

Pero todo pasó cuando vi quién era el que hacía ruido.

- ¿HANNIE? - Y todo el enojo volvió.- ¿¡Estás loco!? ¡Estuviste tocando el maldito claxon durante un montón de tiempo sólo para hacer qué!

  - Calma, enana, calma - soltó riéndose.- Te pondrás como una pasa demasiado pronto si sigues así...

  - Que me calme... ¿¡Que me calme!? - subí mi tono de voz de un susurro a un grito.- ¡Te fuiste cuando yo me fui a Jeju y recién vuelves hoy! ¿O crees que no sabía que te vuelve loco la chica esa?

  - Ey, enana, cálmate... - colocó una mano sobre mi hombro, intentando calmarme, y yo sacudí mi hombro para quitarme su mano. Quizás por dónde pasó. Iugh, qué asco.-  ¿Viste este auto? - me preguntó de la nada, y yo fruncí el ceño.

  - ¡Y qué más da! Estuviste tocando el puñetero claxon desde que el humano pisó la luna, y quieres que me calme...

  - Ok, ok... - alzó sus manos en señal de rendición, y luego hizo una mueca - No creerás nunca que por fin tuve una sesión fotográfica importante, Ronnie, ¡Y no sólo eso!

- ¿Eso significa que ahora serás modelo de pasarela? Saluda de mi parte a Matt Bommer cuando seas famoso - me burlé de él. Y es que aunque mi hermano había estudiado Actuación y Dirección Teatral, le habían ofrecido primero pequeños trabajos de modelaje o actuación en pequeños comerciales que nadie veía, o en anuncios de belleza donde él es sólo el novio de la tipa con los kilos de cemento en la cara. Para nada interesante.

  - ¿Por qué debes ser tan amargada? Arruinas todos los buenos momentos... - se bajó por fin del auto de llamativo color rojo.- Adivina qué pasó...
  - Alguien importante vio tus anuncios, ¿Cierto? - pregunté tanteando el terreno, pensando por fin que tal vez mi enfado debería dejarle espacio a la emoción de mi hermano.

  - ¡LA MISMÍSIMA VOGUE KOREA! - me chilló rebosando de felicidad.

  - ¿Y eso es...?

  - La edición nacional de una de las revistas de moda más importantes del mundo, tonta - me golpeó con su dedo, y yo por fin le tomé peso a sus palabras.

  - Osea que esos anuncios de cuarta valieron la pena - no sabía qué más decir, y no tenía ganas de meter la pata estando mi hermano tan feliz al respecto.- Tu carita de venado me dice que aún hay más...

  - ¡Me contactaron para hacer una película!  - Me miró todo feliz y contento, y yo sólo era capaz de mirarlo.- ¡Oh, vamos, enana amargada! ¿No estás feliz por mí?

Balbuceé, intentando decirle que estaba feliz por él, que por fin podría ejercer su carrera y que se haría rico y famoso como Jackie Chan o Bruce Lee, aunque claro, viviría más tiempo que este último, pero parecía que mi cerebro se había secado por completo,  en vez de decirle que podía desear el cielo y se lo darían, sólo sólo fui capaz de hacerle una pregunta ridícula.

  - ¿Una película?

  - No, Ronnie, un inodoro - Él se rió de mí, y luego me abrazó, dándome vueltas en el aire, pero de esas vueltas que te dan ganas de vomitar que las bonitas. Desventajas de pesar cuarenta kilos y medir apenas un metro y medio.- ¡Estoy tan feliz, Ronnie!

  - ¡Pues felicitaciones, hermanito! - chillé, y preferí cerrar los ojos, y antes de que necesite que parecía o le vomitaré encima, él ya me deja tocar el suelo.- ¿Y dónde es la película?

  - Pues...

  - Lu Han - su mirada de cervatillo, la que ambos compartíamos y que sólo en ello nos parecíamos, la que sabía leer fácilmente porque era casi la misma expresión de los míos, me decían que ahora me estaba ocultando algo más.- ¿Dónde será la película?

  - En China, Ronnie - miró hacia otro lado, y cuando volvió a mirarme, su sonrisa dulce y triste hacía que me dieran ganas de llorar.- En un mes volveré a vivir en China

Hi there💕💕💕
Pues lo prometido es deuda 😉 así que les tengo aquí el capítulo de Kilig, y adivinen qué me hizo volver a la Life...
¡El MV de Airplane! 😍😍😍😍😍😍😍😍😍😍😍😍
Dicho todo eso pos me voy

KILIG (Jung HoSeok)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora