Mikakrul -Mika x Krul- Owari No Seraph

Cuando cae la lluvia

Eran las 6:00 pm en Sanguinem. A pesar de la abundante lluvia que caía, los guardias seguían en sus puestos, vigilando la ciudad de los intrusos.

Dentro del castillo real, un joven vampiro de cabellos rubios se encontraba deambulando por los pasillos, ya que no tenía nada interesante que hacer.

Las gotas de lluvia caían sobre el techo, haciendo retumbar un sonido fuerte, pero relajante.

Mika, caminando sin rumbo, llegó hasta la puerta del jardín central. Pensaba que era buena idea salir a tomar un poco de aire, así que abrió las enormes puertas para cerrarlas una vez fuera.

Gracias al techo de la galeria, no llegó a mojarse con el agua que caía desesperada del cielo.

El chico decidió recargarse en la pared y cerró los ojos, para poder concentrarse en el sonido de la lluvia.

Así estuvo unos minutos. Él amaba la lluvia, era lo más relajante y natural que podía existir en este destrozado mundo.

"¿Cómo estará Yuu-chan?", pensaba. La última vez que lo había visto fue cuando se reencontraron en Nagoya, donde, gracias al pelinegro, su transformación en vampiro finalmente se completó. Aún estaba algo mal por eso, se sentía verdaderamente como un monstruo, y no le gustaba para nada.

Un sonido interrumpió sus pensamientos. Miró a su izquierda y pudo ver que la puerta se abría y una cabellera rosa se asomaba de ésta.

—¿Krul? —preguntó sorprendido.

—¿Mika? —respondió de igual manera.

Era raro ver a Krul fuera del castillo, ya que no solía salir. Siempre se quedaba firmando documentos o en la sala del trono, por eso se sorprendió.

—¿Qué haces aquí, Mika? —ella lo miró, curiosa.

—Nada, disfrutaba de la lluvia, ¿por qué? —respondió con su monótona mirada parca.

—¿Hm? Así que te gusta la lluvia. Qué dato curioso, aunque debo admitir que va totalmente contigo.

—¿Y a ti qué te trae por aquí?
—preguntó mientras la pelirosa se recargaba a su lado.

Mika se sentía cómodo al lado de Krul, era el único vampiro que en verdad le agradaba, y bastante, a decir verdad.

—Es que noté que estaba lloviendo, así que decidí venir a apreciar este hermoso fenómeno de la naturaleza —sonrió.

—Ya veo, así que también te gusta la lluvia. —Mika volvió a cerrar los ojos y concentrarse en el sonido. Y aparte de eso, ahora tenía un olor muy agradable cerca.
Aunque no lo admitía, amaba el olor de Krul, es dulce y delicado, como una flor.

Krul no contestó, sólo se limitó a cerrar sus ojos y recordar. Después de unos minutos, esos recuerdos, hicieron que se le escaparan unas lágrimas. Sorbió su nariz, algo que hizo alertar a Mika, el cual seguía en sus pensamientos.

—¿Krul? —preguntó algo preocupado Mika.

Él se despegó de la pared para poder mirarle la cara de frente. Al ver que estaba llorando, se preocupó aún más.

—¿Q-qué pasó, Krul? —se sorprendió al ver la expresión triste y las lágrimas que presentaba la chica.

—No... —se sorbió nuevamente la nariz— es nada... sólo recordé unos momentos con mi hermano.

—¿Hermano? —Mika se sorprendió al enterarse de que Krul tenía un hermano.

—S...sí. —Ella seguía llorando levemente, pero siguió hablando-. Mi hermano y yo teníamos una hermandad muy grande. Siempre nos defendíamos el uno al otro, nos abrazábamos y nos ayudábamos mutuamente. Nos queríamos mu...mucho. —Su llanto aumentó ligeramente.

Mika no sabía qué decir, le rompía el corazón ver llorar así a Krul. Pero ¿no se supone que los vampiros no tienen sentimientos? ¿Por qué Krul es capaz de sentir tristeza? Y él ¿Por qué se preocupaba tanto por ella y le dolía verla llorar si sólo es su "dueña" y un vampiro? No lo entendía.

—A él... le encantaba la lluvia. Cada vez que llovía, se ponía debajo del agua y cerraba los ojos alzando la cabeza hacia el cielo. Era como si las gotas lo estuvieran acariciando. —Sin poder decir una palabra más, rompió en llanto.

Mika estaba estático, así que sin saber qué más hacer, acercó hasta él a Krul formando un dulce abrazo.

—T-tranquila.

Krul se sorprendió. No podía creer que ÉL, justamente ÉL, esté consolándola de esa forma.

Ella tenía la cabeza hundida en el pecho del chico, sin poder dedicarle ni la más mínima palabra. Así que alzó los brazos y los enroscó en el cuerpo del rubio, correspondiendo su abrazo.

—Mika... —habló como pudo—, me estás asfixiando.

El chico desarmó el abrazo rápidamente y se disculpó apenado con la vampiro.

—Jaja, no pasa nada... —miró a Mika a los ojos —Gracias, en serio, gracias. —Le sonrió y él le devolvió la sonrisa.

Krul se limpió las lágrimas y miró atrás del chico.

—Ven, Mika.

Inmediatamente, salió de la galería y se lanzó debajo de la lluvia. Mika la observó dar vueltas y admirando su felicidad. Eso hizo sonreir al vampiro; Se dio cuenta que le encantaba ver a Krul sonreír alegremente, y eso era motivo más que suficiente para alegrarse él también.

Sin esperar más, salió a que su cuerpo reciba también la lluvia. Alzó las palmas de sus manos hasta su pecho mirando al cielo, para sentir el tacto del agua.

De pronto, unas manos agarraron las suyas y dirigió su vista hacia delante. Se encontró con una Krul completamente empapada y sonriéndole. Él sintió un calor en su pecho, a pesar de la fría lluvia que lo mojaba cada vez más. De la nada, la chica era más que bella ante sus ojos.

Se dedicó a devolverle la sonrisa. Estaba completamente feliz con Krul a su lado. Y sin dudas, Krul sentía lo mismo.

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Holiwis ^w^ ¿cómo están?

Bueno... Quería decirles que es la primer narración que publico >u<.

Si les gustó, pueden dejar su estrellita, comentario y esas cosas.

Acepto cualquier crítica constructiva que puedan aportar.
También si ven algún error (falta ortográfica, puntuación, etc), avísenme.

>>Si quieren más one-shots de esta pareja me avisan. Los leoo <3.<<

~Daca-chan~