STRANGE

U N O

Episodio 1:

“Princesa”

P.O.V Chayna
Han pasado quince años desde aquel día en el que M'Baku me encontró en la nieve. Aún no recuerdo que pasó con mi familia, solo sé que no soy normal, tengo "poderes" si es que así se les puede llamar. Mis uñas se transforman en garras, mis dientes en colmillos, mis sentidos se agudizan y soy rápida y ágil, mis ojos se tornan verdes, igual a los de una pantera, animal en el cual están basadas todas mis habilidades, aunque yo las considero diferencias.

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Como siempre salí de mi habitación y me dirigí a entrenar, no tenía ánimo para ir con mi padre. Llegué y para mí mala suerte allí estaba Jasir, mi hermanastro, y mi peor pesadilla.
Tomé arco y flechas acercándome a los objetivos, al otro lado de donde el estaba –pero miren, es el fenómeno– río. Maldición. Se acercó, simplemente lo ignore, apuntando y acertando en la mayoría –ya deja de perder tu tiempo aquí, sabes que nunca te aceptarán, podrías irte y dejar salir tu lado animal. No te vendría mal salir a cazar– el maldito volvió a reír, lo odio –adios Jasir– dije saliendo del lugar, para luego echarme a correr de vuelta a mi habitación, a llorar por el desprecio con el que aquel muchacho pronunciaba cada palabra, por las miradas de desconfianza del pueblo y las palabras hirientes que carcomen mi alma.

P.O.V Omnisciente
Sin notarlo, Chayna calló dormida en su agonía, harta del desprecio que recibe constantemente.
Golpearon la puerta de forma sonora y firme, despertando a la joven. Rápidamente seco todo rastro de lágrimas y recuperó la compostura mientras caminaba a paso firme hacia la puerta. Cuando se trata de fingir, Chayna es experta. Al abrir, sus ojos se encontraron con la furiosa mirada de M'baku –padre...– exclamó sorprendida –¿Sucede algo?– terminó al notar la expresión del “Hombre Mono” –no fuiste al almuerzo, fui muy específico al decir que quería que todos mis hijos estuvieran allí– Chayna bajo la cabeza –lo siento padre, yo me quedé dormida sin notarlo, y...– hablo rápido pero fue interrumpida. M'baku posó una mano en su mentón y delicadamente levantó su rostro para que lo mirará. Sus cristalizados ojos se encontraron con la preocupada mirada de su padre –Jasir te molestó otra vez– aunque quería preguntar, sonó más como una afirmación y ella solo asintió apenada por ocultarle sus problemas. El hombre suspiro –haz lo que quieras por el resto del día, si quieres falta a la cena, mañana hablaremos de esto– ella asintió y el le dió la espalda para luego retirarse. Ella se quedó allí, en el marco de la puerta, observándolo hasta que salió de su campo visual y fue en ese momento cuando volvió a entrar en la habitación, y se echó en la cama a pensar. No tiene amigas. Nadie además de M'baku parece quererla. La desprecian. Y la pregunta ronda en su cabeza...

¿Porque sigo aquí?

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Chayna pasó el resto del día en su habitación, entreteniéndose con cosas tontas, como los papeles que había en el suelo a un lado de su escritorio.
La mañana llegó y arrancó repentinamente a Chayna de sus sueños. Pesadamente se levantó y decidió ir donde su padre, no tenía nada mejor que hacer –¡Chayna, hija! ¿Cómo amaneciste?– ella frunció el seño –bien...– respondió confundida mientras entraba. Entonces notó al chico en medio de la sala, Jasir. M'baku se veía triste, aunque Chayna no lograba descifrar porque –tu hermano desea decirte algo– el chico rodó los ojos, y ella lo miró atenta –lo siento– dijo Jasir con frialdad –esta bien– contestó ella de la misma manera, y el volvió a voltear hacia delante –con tu permiso padre, me retiro– el hombre asintió y el salió de la sala –padre, te noto nostálgico ¿Sucede algo?– pregunto Chayna, con cuidado de ser cautelosa en cada palabra. El suspiró –¿Sabes? Para mí siempre serás esa pequeña que encontré en la nieve, y que desde entonces se volvió mi princesa– ella sonrió, aunque la confusión inundaba su mirada –pero ya no eres pequeña, y aquí no estás bien, y quiero que sepas que siempre serás mi princesa– la sonrisa se borró del rostro de Chayna y solo pudo pensar en una cosa, me está echando –y es porque te amo que quiero que vayas al exterior, encuentres tu camino y vivas la vida que mereces. No te estoy echando Chayna, solo quería  que vivas como mereces– la alegría golpeó su ser y no pudo evitar que una amplia sonria adornara su rostro –¿Es encerio? ¡Muchísimas gracias, padre!– exclamó mientras se abalanzó sobre el hombre, el río mientras correspondía el abrazo. Ella se separó, pero no se alejó –no creas que te dejaré ir tan fácilmente, en dos días se hará una fiesta de despedida, aunque puedes regresar cuando quieras– ella asintió aún sonriente –padre, no tengo nada que hacer durante el resto del día ¿Podría salir? Para entretenerme con la nieve o caminar– se encogió de hombros, solo deseaba salir del encierro –esta bien, ve, pero no te alejes demasiado– ella asintió y salió corriendo a su habitación para abrigarse.
La sonrisa no parecía querer abandonar su rostro mientras corría alegremente hacia su cuarto. En una pequeña distracción chocó con alguien –lo siento– miró al piso apenada –no me importa si lo sientes, ten más cuidado fenómeno– ella levantó la mirada indignada y se encontró con Jasir –disculpa, me aseguraré de que no vuelva a ocurrir, y con la gracia de Bast no volveré a verte– ella volvió a sonreír, sabiendo que su tribu no creía en la diosa pantera –no seas insolente, solo te dejan ir porque eres un estorbo, dejan que te vayas de aquí para que ya no molestes y deshonres nuestras creencias. Eres despreciable ¿Acaso sabes algo de Bast? Por supuesto que no, pero usas su nombre como si así fuera. Nosotros no adoramos a esa inútil pantera, y tú presencia aquí contrarresta nuestras creencias ¿Acaso crees que te deja ir porque te ama? ¡No! Lo hace porque tú simple presencia es un insulto– Chayna retrocedió, lágrima cayeron por sus mejillas y considerándose, entre la espada y la pared, corrió sollozando a su habitación.
Al llegar abrió desesperadamente el armario y lanzó al piso toda la ropa, vistiéndose para un clima mucho más caluroso. Tomó una capa blanca para protegerse del frió de la montaña y corrió lejos de allí. Mucho más lejos de lo que pensaba.

★★★★★★★★
NOTA

Primero que todo quiero agradecer a todos los que están leyendo esta historia.
Quiero informarlos de que está historia comparte universo con mi otra historia “La Joven Stark” aviso esto para que lo tengan en cuenta si notan alguna distorsión en la trama de Civil War.
Las actualizaciones pueden tardar o a veces publicaré rapidísimo, pero eso depende de los estudios. Nuevamente muchísimas gracias por leer.