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"Un poeta que pierde el romance es un cadáver, un pintor sin su musa es solo uno más del monto."

——  •  ——

La respiración del menor era lenta, su rostro se encontraba relajado y en paz. Taehyung, le miraba absorto; la noche anterior Jungkook no había podido dormir debido a la preocupación por su audición; y este estaba seguro de que su amado lo conseguiría.

Se puso en pie, busco en su maleta un cuaderno y su lápiz favorito; se puso cómodo en el sofá cercano a la cama y se dispuso a dibujarlo, cada trazo era firme, el conocía tan bien la fisionomía del menor.

1 hora después, Jungkook corría por toda la sala buscando sus apuntes; llegaría tarde a la escuela. Tae colocó en su mochila el pequeño boceto, esperando sacarle una sonrisa cuando lo viera.

Ten un excelente día, Jungkookie!~ —grito el más alto desde la cocina cuando el menor salía corriendo del apartamento.

Ese día fue el primero de tantos donde Tae decidió pintar a su amado en un extraordinario amado, pero también fue uno de muchos donde se preguntó... Si Jungkook en verdad lo amaba.

——  •  ——

La brisa era suave, las cortinas de la sala se mecian con suavidad sobre la cabeza del castaño; miraba fijamente a su pequeño cachorro jugar con una pequeña pelota, una pequeña sonrisa se dibujaba en su rostro.

Jungkookie!~ —la voz alegre de  su hermana menor captó su atención, la castaña corría feliz hacia el. —  ¡Adivina! ¡Adivina qué pasó!

Mmm... No lo sé, dime qué sucedió Jinnie. —sonrió al verla tan feliz, sabía que de igual manera le diría lo que sucedía sin necesidad de pedírselo.

¡¡Fui aceptada en la escuela de Artes en Seúl!! — salto al tiempo que lo decía, abrazo a su hermano extremadamente feliz.

Jungkook le abrazo, se sentía orgulloso de ella; pero esa noticia traía consigo otra no tan grata para el menor.  Regresar a Seúl, regresar a ese lugar donde hacía más de 5 años había sufrido; ese lugar donde perdió al amor de su vida, su alma gemela por una boludez.

Hermano, no volveremos a ese lugar. — la voz de Somi resonó en la estancia, la chica le miraba desde el marco de la sala.— Ya rente una casa en otro complejo de viviendas, no te preocupes, no te toparas a ninguno de los Kim.

Un suspiro escapó de sus labios, su cuerpo se relajo un poco al oírle; pero algo le decía que era lo mejor. Además hacia mucho que no veía a Jimin, nunca perdieron contacto pero extrañaba salir con el a veces.

Además... Ya te conseguí trabajo en una muy buena escuela de Artes. —sonrió con complicidad a su hermana.

Dime qué no es en la escuela de Heejin... —una sutil sonrisa escapó de sus hermanas, bueno... ¿Que podría ser lo peor que podría pasarle?

Esa tarde los hermanos discutieron sobre cuando se haría la mudanza y sobre que se cenaría esa noche... Pero, en el fondo Jungkook temía un poco de volver; aún no se sentía listo para volver, pero por su hermana era capaz de todo...

¿Estarías feliz de mi Tae? ¿Que me dirías ahora mismo? ¿Seguirías amándome?

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Haber... Dejemos algo en claro, sí. Yo en verdad las amo, y porque las amo... Aunque sean poquitas las lean esto, seguiré aquí; tratando de actualizar les esto. Pero en verdad, ¡LAS AMO!.

Ahora en otras noticias... ¿Fueron a ver el concierto de BTS al cine? Porque yo no, en fin... La hipotenusa.
Besos en sus hermosas mejillas!~

Atte:
La gashetita!!~

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⏰ Última actualización: Mar 13, 2022 ⏰

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