Antena Lovers {BTS}

Capítulo 8 -Los malos también lloran.

<<Los malos también lloran>>

"Antena Lovers" era el nombre del sucio lugar que te robaba los sueños, donde firmar un contrato significaba vender tu alma. Cada día llegaban extraños de todo tipo, algunas mujeres, pero en su mayoría eran hombres.

Era normal ver a los chicos corriendo desnudos por todo el lugar, no llamaba la atención ver a alguien lleno de moretones puesto que los mismos clientes en ocasiones lo hacían frente a los demás.

Los pobres trabajadores no podían quejarse, cada uno tenía su historia, algunos por necesidad y otros simplemente porque la vida los escogió para sufrir.

No podían quejarse de que incluso su jefe y los demás trabajadores abusaban de ellos, los castigos eran severos y aunque intentaran escapar siempre eran detenidos y no salían victoriosos.

Era increíble que para algunos la esperanza se mantuviera, pero para los más realistas, ese pensamiento solo te ataba al sufrimiento, era mejor adaptarse y siempre pensar en lo peor.

Namjoon miro seriamente al chico en frente suyo, más bajo que él y con cabello de color marrón. Era delgado y a pesar de todo el tiempo que llevaba ahí aun temblaba en su presencia.

Lo excitaba demasiado, había probado dos veces a aquel chico, pero quería más, el trabajo y Jin encima no le habían permitido disfrutar la piel canela que lo llamaba.

Pero ahora no podía, alguien importante iba a llegar y con eso el chico tendría suficiente.

Jungkook, te mande a llamar porque hoy viene un cliente especial.

Se supone que todos son especiales...-dijo con miedo.

Bueno...este es aún más especial, es un mafioso chino llamado Hangeng.

¿Que? –al menor le empezó a temblar el labio –como en las películas?

Namjoon rio.

Realmente no me importa qué clase de películas veas tú, solo quiero decirte que vendrá esta noche y más te vale complacerlo en todo porque es agresivo–el menor palideció con aquellas palabras –ahora largo.

Se levantó lo más rápido para salir de aquel lugar y prepararse, tenía miedo.

Jungkook –escucho que lo llamo antes de salir –tienes dos días libres para que te recuperes después, ni se te ocurra prepararte si él no te lo dice, me entendiste?

¿Por qué? –pregunto con miedo.

No quieres averiguarlo.

.-.-.

La noche llego rápidamente y el menor lucia nervioso ante los ojos de Jin que lo estaba maquillando.

Deja de temblar joder, me perturbas.

Jin...ese mafioso...el tal Hangeng...es tan malo como lo pinta el jefe?

El mayor suspiro y se sentó frente a él tomando sus manos.

Seré sincero contigo, no va a matarte, pero te lastimara mucho y sé que podrás soportarlo, tus amigos y yo te ayudaremos en cuanto se vaya, pero debes resistirlo, ¿me entiendes? –el menor asintió –si sientes que no puedes más finge que te desmayaste, te va a golpear así estés inconsciente así que debes actuar correctamente.

Tengo miedo –le dijo llorando, el maquillaje empezó a resbalarse por su cara y temió que Jin se alterara, pero se sorprendió cuando lo abrazo y sobo su espalda consolándolo.

Te entiendo cariño, el tiempo pasa rápido, podrás salir de esta ya lo veras.

El menor simplemente dejo que Jin lo arreglara y lo alimentara, en menos de una hora llegaría su cliente y no quería tener el estómago vacío.