-¿A la botellita? Odio ese juego.
-Si. ¡Vamos! Te gustará, ese día sólo fue un mal rollo.
-¿Estás segura, Sophy?
-Si.
-Okay, Zayn, ¿Hay reglas?
-Si- Pensó por cinco minutos y habló- 1: No puedes responder la misma alternativa consecutivamente. 2: Una vez dentro, no saldrás. 3 (y última regla): Si te dices que hagas algo, lo haces.
-Okay- Respondimos todos, dando unas vueltas a la botella de vidrio.
La botella la giró Louis, y luego de unas diez vueltas, paró en Eleanor.
-Mmm- Pensó, Liam- Bésala.
Louis, sin chamullos, la besó. Duró más de cinco minutos.
-¡Hey, Bro! Era solo un ❝piquito❞- Dijo Liam, riendo haciendo las mejillas de Eleanor se tornaran rojas.
-Déjemos a los tórtolos, tranquilos- Dije yo, riendo.- ¡Vamos Eleanor! Gira la botella.- La morena la tomó, yo observaba a Louis, que estaba segura que estaba rezando el padre nuestro para que parará en una mujer y así el castigo de verla besarse/abrazarse/tocarse y decirle cosas a otra persona, sea menos duro y doloroso. La botellita paró en mí, Louis suspiró.
-Bien... Abrancense y diganse lo mucho que se quieren- Dijo Zayn.
-Te amo, te adoro y siempre puedes confiar en mí- Dije abranzadola, Eleanor me siguió, e hizo lo mismo.
-Te amo, te adoro, te quiero, te imploro y cuenta conmigo en las buenas y malas- Dijo sonriendo.
Ambas nos sentamos, tomé las botellas; miré mis manos y estaban temblando, la giré y cada segundo que pasaba era eterno, cada vez iba más lento, y en cualquier segundo iba a parar. Estaba parando, en Sophy... Pero la botellita se decidio en parar en Harry, Harry Edward Style Cox. El mismo mujeriego. Todo el grupo sonrió.
-Se-xo- Pronunció Zayn. Lo quería matar, descuartizar ¡Que no quería hacerle en este momento!.
- Dos palabras: ¡Ni Loca!- Pronuncié estas dos últimas demasiado marcadas.
-¿Debo recordartelo, querida Ali? Regla número 3 ''Si te dices que hagas algo, lo haces.''- Sonrió triunfante. Las chicas me miraban, tristes y a la vez espantadas. Mejor dicho, me miraban y sus ojos decían muchos sentimientos, más asqueadas no podían estar- ¿Y...?-
-De acuerdo- Suspiré resignada, sin tener escapatoria de mi mejor amigo, Niall. Él era el que siempre me salvaba, siempre tenía ''relaciones con él'' cuando saliamos en la botellita o verdad o reto. Pero la pura y santa verdad era que nos la pasabamos jugando play en mi habitación. - ¡Pero! Después- Exclamé.
-Ok. -Dijo un tanto molesto, Harry, a el le gustaban los retos, ahora, ya!. A mi no. Tomó la botella, y calló en Zayn.
-¡Venganza!- Grité, Zayn y Harry estaban aterrados, lo que menos querían era besarse entre los dos, pensé- Besense, y luego del beso digan: Te amo. Que el beso dure... cinco minutos.
-¡No!- Exclamó Zayn- Por favor! ¡Por lo que más quieras, Ali! No me hagas besarme con éste-
-Lo siento ¿Debo recordarte la regla número 3?- Dije triunfante, me miró fulminante- Un beso, ¡Ahora!- Se acercaron y se besaron, yo como la buena amiga que era, grabé. Luego se dijeron te amo, y todos rieron.
-¡Esto va a Youtube, señores y señoras!- Grité, me miraron, los ojos más grandes que un buque y la boca a tres metros bajo el suelo.- Broma.- Les sonreí.
-Mucho por hoy- Dijo exhausto Zayn- ¡LA FIESTA ACABÓ!-Gritó para todos los de la fiesta con el megafono que tenia a su derecha. Todos enseguida se largaron.
-A mi no me dejarán entrar a esta hora a casa- Dije
-¿Por qué, Ali?- Dijo Sophy
-¿Que no sabes que hora es? Son las cuatro de la madrugada, mi padre me dijo a la primera fiesta que fui que si no llegaba a las una no entraba, llegué a las tres pensando que era una broma pesada. ¡Y que crees! No entré y tuve que ir donde mi tía. Esa noche fue la peor ¿Alguien donde pueda pasar la noche?- Dije, obteniendo la respuesta de Zayn.
-Yo se.
-¿Donde, negro?- Dije molestandolo, me quemó con la mirada y habló.
-Donde Harry, a si puedes cumplir el reto, y seguimos con nuestras vidas - Dijo dramaticamente Zayn.
-Nah, mejor me quedaré donde Niall y le contaré todo el rollo.- Dije.
-¿Donde el rubio? Cuando llegues allí, dile que necesito hablar muy seriamente con él- Dijo Regina.
-¡Uy! ¿La rubia se enojo con su rubio?- La molesté, se puso roja- Tranquila, Regi. Yo le digo, adios, que ésten bien y no esten con resaca.- Me despedi de cada uno con un beso en la mejilla.
***
-¿Niall?- Pregunté a través de la línea.
-¿Si? ¿Ali?- Preguntó con la voz adormilada
-¡Ohh! ¿Te despierto? ¡Lo lamento! No quería...- Me interrumpió.
-No molestas, Ali. ¿Que necesitas?
-¿Estás en casa?-
-Sip- Dijo explotando la ''P'', reí.
-Pues párate, y abre la puerta. Mira que esto esta como si estuvieramos en el polo norte, rubio- El rió.
-Enseguida- Cortó.
