Poco a poco, fuimos hablando con más frecuencia. Los días pasaban e íbamos cogiendo más confianza la una con el otro.
Mensajes, llamadas... hacíamos de todo por vernos, ya que vivíamos lejos el uno del otro.
Un día, me metí en la página del thiscrush que hace poco me había creado, y vi algo que no me esperaba.
No era ni más ni menos que un mensaje que decía''eres muy guapa''. Yo me lo tomé a broma, y lo ignoré, hasta que otro día me volví a meter, y vi otro mensaje de la misma persona:''me molas''. Ahí fue cuando le di un poco más de importancia, y le fui respondiendo cosas como''¿quién eres?'' y cosas así.
Entonces, un día, mientras hacía una pausa tras ordenar la leña que habían traído para la chimenea, vi un mensaje de él. Había respondido a una de mis historias del instagram, en la que había comentado esto que me estaba pasando.
El mensaje decía''soy yo, esa persona soy yo''. Al instante, una sonrisa se me dibujó en la cara. Me sentía la persona más feliz y más jodidamente enamorada de ese chico del mundo.
Le mandé un corazón, porque no podía decir nada más, ya que tenía que continuar ordenando la leña. A la tarde, como no tenía nada que hacer, decidí hablar con él.
Me dijo que había tardado en decirlo porque ya había sufrido mucho en cuanto al amor, y que no quería pasar por ahí otra vez. Y por raro que pareciese, yo sabía de qué hablaba, ya que había pasado por lo mismo hacía unos meses.
Poco a poco, fuimos hablando más y más, hasta ser algo más que amigos, hasta que pasamos de ser tú y yo a nosotros.