Cap. 4 "Dame apoyo".

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Narra Choromatsu.

Encontre a mi hermano a las 23:30 pm. en la cocina, preparando algo para que yo coma... Estoy medio preocupado.

--Nee... Osomatsu niisan... Estás bien?... --

--Sip, por qué sospechas tanto?--

--Bueno, es que tú... nunca cocinaste... y aunque supieras, jamás nos cocinarias algo.--

--En eso podrias tener razón, pero tú vienes cansado, vamos sientate.--

--Está bien...--

No comprendo lo que quiere de mi, estoy seguro que le puso algo a esta comida,

--Vamos, come Choromatsu.--

--Es que... ahora no...--

--Me haras sentir mal si no te lo comes.--

Me dijo con una sonrisa en su rostro,

--Es que ahora...--

--Choromatsu, comete la comida... AHORA..--

Su sonrisa cambio a algo más duro, más aterrador, seguro me puse blanco del susto.

--Choromatsu, comete eso ahora..--

--Por favor, no me obligues a comerme eso..--

No importaba cuanto me lamentase, lo iba a comer igual, no es que no me fíe de mi hermano, pero ya vieron como es él, hace caos en cualquier lado. Quién dice que no enveneno esa comida.

--Choromatsu, comelo ya! No es nada más que arroz!.--

Si alguien cocina para que los demás lo califiquen, entonces a él tengo que calificarlo a mi modo,

--Vamos, Choromatsu.--

--No me comeré esta porqueria, se ve incipido, asquero, parece que está vivo, todo lo que haces es horrible, lamentable, horrorizante, por que cocinas súper mal!--

--.......--

Parece que lo califique... de más.

--C-Choromatsu... lo hice.. para ti..--

Que mal, pone cara de perrito de la calle, siempre tengo que ser yo el que sufre con las idioteces que él hace?

Sin más que decir, tome aire y comi el arroz que tenia en mi plato, él miraba fijamente, tal vez para ver como me retorcia del dolor en el suelo.

El arroz parecia tergopol, era difícil de masticar, además de que sólo era arroz, no sabía a nada. Pero al fin y al cabo, lo unico que pude hacer era sonreir. Él sonrio también y acercandose más a mi me dijo,

--Y bien?.. Está rico?..--

Como si él fuera un experto en esto, si decia algo mal otra vez, seguro me iba a ignorar por un mes, por alguna razón no quiero.

--Esto... está rico..--

--De verdad?--

--Si... más o menos..--

Como sufro por dentro; pero bueno, por lo menos hay alguien que está feliz. Bocado tras bocado y algunos tirados por ahi mientras él no se daba cuenta, le dije,

--No te hubieses molestado en hacer esto.--

--Queria hacerlo, además por el hecho de que queria hablar contigo.--

--De que se trata?--

--Bueno, considero que tú eres el hermano de confianza, si le digo esto a los demás se pondran como locos.--

--Ya dime!--

Hermano de confianza, eso significa que es algo muy profundo. Por su tono de voz, esta rayado, sus ojos se mueven para todos lados, sus mejillas se tornan de un color carmesi... eso significa... seria obvio, ya era hora creo. Baje la mirada y le pregunte,

--Niisan... Estás saliendo con alguien, verdad?...--

--......--

Ese silencio, es verdad, él está saliendo con alguien. Soy su hermano, lo conozco bien. Su rostro estaba rojo, bajo la mirada, se notaba preocupado o mejor dicho.. avergonzado.

--Osomatsu niisan, está bien. Quién es la chica?.--

--Ella.. es... no la conoces...--

--Por esa razón lo pregunto, estúpido,  Vamos.

--Bueno... la conoci... en un parque..--

--Un parque?.--

--Si, ella estaba sentada en un banquito cerca del rio, y yo... sólo le dije "Hola, eres preciosa". Y... No me golpeó, ES UN MILAGRO!--

No le golpeó?, eso SI que es un milagro, conociendo a mi hermano es un verdadero Desastre con las mujeres, ni uno de nosotros tiene suerte... excepto Jyushimatsu.

--Entonces... sales con ella?..--

--Bueno, no como novios, me le declararé cuando sea el mejor momento! Necesito tu apoyo!--

Dijo eso mientras me tomaba de los hombros, veia brillo en sus ojos, su rostro estaba rojo y mostraba una hermosa sonrisa; de verdad tenia sentimientos por esa chica.

Al verlo asi, me senti.. raro, fingiendo sonreir, lo vi a los ojos y le dije,

--Yo.. te doy mi apoyo.. niisan..--

Por dentro estoy adolorido... y no es por el arroz.

No fue mi intención quererte. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora