I

34 1 0
                                    

Un Día Casi Perfecto

Recordaba los momentos junto a mamá de vacaciones en el verano. Solia pensar que nunca iban a acabar y cuando lo hacían mamá prometía que volveríamos con tal de verme feliz.

Solian ser tiempos hermosos los de mi niñez, donde solo éramos ella y yo. Podía decir que mi mamá siempre fue maternal y siempre apoyo lo que quería lograr en la vida.

Me crió bien siempre dando a conocer que la humildad nunca debe de perderse aunque estés por los cielos.

Siempre pienso que es mejor vivir la vida correctamente, los errores formarán parte de esta siempre a pesar de que con el tiempo se aprende a no volverlos a cometer.

Mamá había enviado una carta hace solo unos días y a juzgar por el contenido parecía muy emocionada con el viaje planeado, sería uno de esos viajes que nunca se olvidarian.

Estaba preparado para esto y haría que mamá disfrure de estas pequeñas vacaciones.

Necesitaba enviar ultimos trabajos de la universidad, después volvería rápidamente a por mis cosas y tomaría el camino a mi ciudad junto a mi madre, tendríamos una cena fuera de casa y al siguiente día saldríamos a nuestra aventura.

Más el día que había pensado sería perfecta acababa por arruinarse por el mal clima. La noticias anunciaban lluvias para los siguientes días.

Camine bajó esta con mi mochila al pecho intentando que no se mojara con la lluvia ya que por un descuido había olvidado el paraguas.

Suspiré frustrado y esperaba que nada de lo que tenía que entregar fuera a arruinarse. Llegué todo mojado pero todo estaba bien, mire la hora y faltaba exactamente dos horas para que el bus saliera.

Tenía tiempo aún de hacer las cosas con calma y después de haber echo la entrega correspondiente en la Universidad salí corriendo a casa, como la lluvia seguía y no traía paraguas tenía que hacerlo.

Corrí sin fijarme por donde iba hasta chocar con alguien tan fuerte que cayó al piso.

-Oh lo siento- Dije -déjeme ayudarlo- le ofrecí mi mano y este que parecía estar muy preocupado solo me ignoro para recoger lo que se le había caído.

Me agache para ayudarlo a recogerlo y lo había arruinado todo estaba muy mojado, lo que faltaba.

-En serio lo lamento- Pedí disculpas, este miró todas sus cosas -¿Donde esta?- Dijo a sí mismo mientras revisaba las cosas todas empapadas -Hyung va a matarme- Dijo algo asustado mientras miraba una de las hojas arruinadas.

Esta vez si me miró con algo de enojo tal vez pero en si no dijo nada y solo se fue. Volví a tomar camino a casa por mis cosas cuando llegue no tuve más remedio que cambiarme de ropa pues todo absolutamente todo se había mojado.

Revise nuevamente la hora para constatarla llegaría a tiempo claramente y tomando mis cosas salí esta vez traía el paraguas.

Empecé a caminar hacia la parada de buses, le avise a mamá que en unas horas estaría en casa y a juzgar por su voz en la llamada se oía bastante contenta, mi plan iba siendo un éxito

El viaje duró entre unas dos o más horas, honestamente no me interesaba saber eso.

Cuando al fin baje del bus, encontré a mi madre en la parada se veía tan feliz.

-¡Que haces aquí mamá!- regañe -Te vas a enfermar- Seguí mientras ella me via sonriendo -¡Quise venir a recogerte cariño!- dijo mientras me pelizcaba dulcemente mi mejilla, -¡Pero no tenias que hacerlo! Tu salud es lo mas importante mamá- Me queje infantilmente mientras ella sonreia  tomando mi otra mejilla en sus manos y me apretaba ambas -Mi hijo es tan atento, todo un caballero -ahh mamá no tan fuerte- Me queje mientras ella sonreia.

La abrace y empezamos a caminar bajo el paraguas que había traído -¿Que crees?- Pregunto mientras caminábamos -¿Que?- Pregunté con cierta emoción -Te prepare tu comida favorita- La mire finjiendo molestia - No tenías que molestarte mamá yo puedo preparar mi comida ya soy grande- Me queje -Pero yo quiero cocinar para mi hijo- Dijo mientras volvía a agarrar mis mejillas.

Al llegar el delicioso aroma a comida llegaba a mis fosas nasales que mi estómago reclamo al instante.

-Ahora mismo te sirvo tu solo siéntate -¡Mamá!- Grite finjiendo molestia -¡No hace falta que lo hagas- explique a modo regaño, -Yooo yo lo hago- Alce mi mano mientras caminaba hacia ella y la hacía sentarse.

En un dos por tres ambos estábamos sirviendonos la deliciosa comida que de echo había extrañado.

Platicamos largo de las cosas que habían pasado mientras no estaba con ella y al igual me daba algunas anécdotas.

-Vamos a ver, todo está listo -Lo está mamá confía en mi -No estoy segura y si olvidamos algo que te parece si volvemos a revisar -Mamá- La tomé de las manos -Todo esta listo no olvidamos nada- Explique cariñosamente -Mejor vamos a dormir que mañana salimos muy temprano ¿de acuerdo?- Mi madre asintió sonriendo.

Mamá y yo caminamos a la habitación que usaba antes de irme a la universidad y donde pasé todos mis días de niño -Ohh- Dije mientras miraba todo alrededor.

-Todo esta en su sitio como lo dejaste- Dijo mamá mientras retiraba unas mantas que cubrían varias cosas.

-Bueno descansa hijo- Dijo abrazándome y dándome un beso de buenas noches -Buenas noches mamá-   Grite mientras cerraba la puerta después de irse.

Sonreí mientras miraba fotos viejas mías y acomodaba un poco las cosas, y al estar listo me tiré a la cama en un salto triunfal, el día no había sido del todo perfecto al inicio pero saber que mamá esta emocionada con todo esto lo cambiaba.

Esperaria al día siguiente pues algo en mi me decía que ese día si iba a ser perfecto.

Esperaria al día siguiente pues algo en mi me decía que ese día si iba a ser perfecto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 25, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Dangerous and wildDonde viven las historias. Descúbrelo ahora