Eran las 2:00 am el reloj repetía un agudo sonido que tintineaba cada que pasaba una hora, las ventanas estaban opacas por la oscuridad de la noche sin poderse ver nada hacia el exterior, la puerta vieja del patio chillaba por el viento soplando, era una noche tan oscura que ni siquiera el reflejo de la luna se percibía como casi todos los días alumbrando hacía las calles, se sentía un frio particularmente paralizador, un frio como el que sentiría un niño al encontrarse de frente el ser con el que su imaginación le atormenta que vive en la oscuridad debajo de su cama esperando por él, el cielo nebuloso y negro que aparentaba se aproximaba una gran tormenta, todo hacía parecer que iba a ser una noche larga...
Justo paso una hora ella lo sabía, enseguida el reloj lo confirmo con su sonido, el viento ceso y parecía que por fin podría conciliar el sueño pero justo cuando ella cerro sus parpados el estruendo de un trueno le hizo abrirlos al instante, esto acompañado de un escalofrío que recorrió desde la brecha de su blanca espalda con su cuello hasta sus pequeños pies, ya que no había logrado conciliar el sueño decidió levantarse hacia la cocina para tomar un té caliente pensó que con eso lograría calentarse y le daría un poco de sueño así que bajo lentamente los pies de la cama y se puso unas pantuflas de terciopelo color rosado se levanto envuelta en una sábana color marfil y solo se podía apreciar su largo y pelirrojo cabello y sus grandes ojos color miel que brillaron con la reflexión de luz de un rayo entrando por la ventana de la habitación, al abrir la puerta de su cuarto creyó observar de reojo una sombra desplazándose hacia el baño pero decidió ignorarlo, siguió su camino hacia la cocina mientras bajaba las estrechas escaleras de madera en forma de espiral hacia la sala creyó ver de nuevo una sombra, solo que ahora le pareció ver en ella la silueta de una persona, esto la animo a seguirla rápidamente con la mirada en un movimiento de un milisegundo sus ojos observaron ascender rápidamente por la pared esta sombra, con dirección hacia la puerta del cuarto de sus padres, esto capto su atención por completo, ya que repentinamente se abrió la puerta de dicho cuarto siendo que estaba deshabitado, ya que su madre estaba visitando a su abuela y su padre en un viaje de negocios rumbo a Múnich, Alemania, pero pensó –Debe haber sido el aire– y decidió seguir ignorándolo y caminar hacia el refrigerador de la cocina, lleno una olla con agua encendió la estufa y espero a que esta hirviera, mientras tanto tomo un sobre de una caja de té de hierbabuena que yacía sobre un mueble color verde olivo, saco una taza cristalina y la puso sobre la mesa color negro azabache, una vez la olla comenzaba a avisar con su chiflido chirriante que el agua estaba lista vacío el agua en su taza y posteriormente coloco el sobre de té, mientras el té enfriaba un poco, ella creyó escuchar unos murmullos en la sala así que miro lentamente hacia la ventana de la cocina para observar por el reflejo del vidrio hacia esa dirección disimulando su miedo giro la cabeza hacia la cómoda que estaba a la derecha del refrigerador y abrió un cajón para luego tomar una cuchara y mezclar su té simulando que no había visto esa figura tan abstractamente escalofriante, pero la realidad era, que lo que había alcanzado a percibir fue un ser totalmente indescriptible observándola desde las obscuridad del cuarto de sus padres, luego al terminar de mezclar su té tomo la bolsa escurriendo y la deposito en el bote de basura color negro mate que estaba cerca de la puerta de la cocina y justo en el instante en el que la bolsa cayó una vibración retumbo desde la sala, observo de nuevo el cristal de la ventana esta vez comenzaba a empañarse y era extraño ya que el clima seguía siendo frio, lo que vio esta vez le causo que los vellos de sus brazos se erizaran, su piel se enchinara y sus piernas se entumieran al instante, en ese momento se percató de que algo estaba aproximándose tras ella cada vez más y más próximo, hasta sentir algo palpando su cuello pero no se podría decir que era una mano la sensación era caliente pero ella sentía escalofríos, luego al instante un miedo inconmensurable lleno su cuerpo y se desmayó.
Justo ahí fue cuando ella despertó en su cama recostada, con el corazón palpitando a más no poder y la respiración totalmente exaltada, trato de tranquilizarse comenzó a respirar más lento hasta que miro el reloj y eran las 2:00 am tal como en su sueño sintió un escalofrió de nuevo y esta vez la recorrió por completo desde la punta de su ultimo cabello pelirrojo en su cabeza hasta la planta de sus blancos pies y al instante sintió un calor abrazador rodeándola, lo último que alcanzo a vislumbrar fue el reflejo de una silueta...
