Jin nunca fue un hombre de prejuicios.
A diferencia de la tendencia de los seres humanos a juzgar por las apariencias, Seokjin siempre fue el tipo de persona de ver para creer, cada que escuchaba un rumor no lo tomaba en cuenta hasta ver pruebas que lo respaldaran. Es el tipo de persona que no dice que algo le desagrada hasta haberlo probado.
La mayoría de las personas siempre creían lo opuesto de él. Creían que porque su color favorito era el rosa y le fascinaba cocinar era alguien súper delicado, criticón, arrogante y perfeccionista a decir verdad, si era un poco perfeccionista, pero no del tipo que no pueden aceptar un simple error. Jin siempre estaba en calma y rara vez perdía los estribos.
Cuando ingresó a la universidad de Seúl en la carrera de gastronomía no tardó en ser tema de conversación. Su belleza física era algo que la mayoría de las personas (incluyendo a varios chicos) no podían ignorar. Y al mismo tiempo era algo que Seokjin siempre había odiado, la incapacidad de las personas para ver más allá de una cara bonita, pero, había aprendido a vivir con eso, incluso él se llamaba a si mismo guapo. Tampoco era que no soportará escuchar cumplidos y ser visto con ojos de amor cada segundo del día, pero de una cosa si estaba seguro, a final de cuentas, lo que realmente importa es el interior.
La mayoría creía que pronto comenzaría a salir con Kim Jisoo, la belleza de derecho o con Bae Joohyun la diosa de comunicación. Pero frente a todo tipo de pronósticos, Jin no se interesó en ninguna del top.
Y fue aún más sorprendente, verlo intentar ser cercano con Yoo Jeongyeon, la chica desastre de diseño gráfico, la gente comenzó a hablar y Jin sentía rabia e impotencia cuando escuchaba a alguien diciendo él es demasiado lindo para ella, quizá Jeong no tenía ese rostro molde de belleza como el de Irene y Jisoo, ni tampoco era extremadamente adorable como Eunha y Sana, pero la chica tenía algo que a Jin fascinaba, quizá era su porte y complexión de modelo, que digo modelo, de súper modelo o tal vez el hecho de que Jeongyeon tenía más personalidad que todas aquellas chicas juntas, también estaba la versatilidad de la chica, si Jeongyeon lo quisiera, podría sacar su lado tierno, y derretir más corazones que Eunha y Sana juntas, también si le diera la gana, podría lucir más ruda que la mismísima Jennie Kim, e incluso, bajo especificas circunstancias, podría llegar a ser más sexy que Momo.
Pero Jeongyeon era ella misma la mayoría del tiempo y eso era lo que más le gustaba a Seokjin.
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La rubia caminaba por el pasillo del segundo piso, el estrés la estaba matando, hoy tenía una presentación muy importante que representaba un alto porcentaje de su calificación. Se desplazaba con prisa hasta que algo a lo lejos captó su atención, se acercó al barandal y observó en la planta baja y a varios metros de ella a un enérgico Jin haciendo un corazón sobre su cabeza con sus brazos.
- ¡Buena suerte cariño! – Gritó mientras seguía haciendo fingerheart y lanzando besos hacia la chica.
Jeongyeon sentía que su corazón se derretía cada que veía a Seokjin sacar su lado más adorable.
La vergüenza le ganaba y mientras inevitablemente una sonrisa se apoderaba de su rostro, la chica desviaba su mirada.
No tenían una relación formal, pero Seokjin ya se tomaba la libertad de llamarla, cariño, bebé y como se le diera la gana, mientras que Jeongyeon solo le concedía a él aquel poder. Jin era el único que podría hablarle de esa forma sin que la chica se incomodara.
La chica entró en el elevador y desapareció de su vista, mientras Jin aún conservaba su sonrisa.
- ¿En serio te gusta esa chica? – El castaño se giró para encontrarse con la expresión de asco de JeongHan.
- Si, ¿Cuál es el problema? – Preguntó Jin girándose hacia el delgado muchacho mientras intentaba contar hasta diez en su mente.
- Ya sabes parece niño. – JeongHan actúo como si soltar aquellas palabras le hubiese provocado nauseas.
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Salió de su clase satisfecha.
Afortunadamente, Seulgi, Chanyeol y ella hacían un equipo perfecto. Su presentación había sido un éxito.
Estaba realmente feliz y después de despedirse de sus compañeros sacó su móvil, en busca de algún mensaje de Jin.
Solo encontró uno de Mina, al abrirlo su sangre se heló.
Corrió escaleras abajo, salió por la puerta principal, atravesó el estacionamiento hasta localizar el automóvil de Jin a medida que se aproximaba distinguió dos figuras, Mina y su novio, parados a lado del coche.
Cuando se acercó vio a Jin sentado dentro del coche.
Jin siempre le había parecido tan bonito. Con aquellas delicadas facciones y esos encantadores ojos.
Desafortunadamente, en este momento no podía verlos, ya que el chico tenía inflamados ambos ojos y un prominente hematoma en su mandíbula, incluso una sección de su labio ligeramente partida. Por suerte su nariz estaba intacta.
- ¿QUÉ TE PASÓ? – Preguntó Jeong horrorizada. Inicialmente pensó que alguien había intentado hacerle algo, pero al ver las manos de Jin con los nudillos rojos e hinchados, lo único que vino a su mente fue pelea.
Jin no era un chico violento, si no, todo lo contrario. Nunca había escuchado que tuviera problemas con alguien e incluso él le había confesado en una ocasión, que jamás en su vida había tenido una pelea física.
El muchacho permaneció en silencio hasta que Jimin habló.
- Se peleó con JeongHan. Ese chico es tan delgado, ¿De dónde habrá sacado tanta fuerza? –
- No nos quiere decir el porqué. – Esta vez fue Mina la que habló.
- ¿Podrían dejarnos solos? – Jin finalmente hablo.
Mina y Jimin cumplieron su petición desapareciendo entre los automóviles estacionados. Jeongyeon entró al auto.
- Jin, ¿Qué pasó? – Preguntó nuevamente la rubia, pasando su mano por el cabello del chico, quien no se atrevía a hacer contacto visual.
- ¿Qué pasó? Pasó que ya me cansé Yeonnie, estoy cansado de que se metan contigo, conmigo, con nosotros. ¿Por qué piensan que tienen el derecho a juzgarte y a evaluar que tan apta eres para mí? ¿Por qué me molestan por interesarme en ti? Sé que no me has dejado avanzar contigo porque tienes miedo, miedo a que esos murmuros en los pasillos se conviertan en insultos descarados en tu cara. Y no es justo. Yo te quiero, tú me quieres, entonces, ¿Qué estamos esperan.. – No alcanzó a terminar por que la chica lo beso, lo hizo con tanta suavidad, procurando no lastimar el herido rostro del chico.
Y Jin correspondió inmediatamente. Porque había estado esperando aquel beso hace mucho tiempo.
Definitivamente Jeongyeon era única, y para Jin, eso era más que suficiente.
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Dedicado a: MegaanMuoz
Aprovecho para recomendarles su historia "You are my destiny" del dúo dinámico (Jeongyeon X Jimin) 😂❣️Creditos de la imagen @ Myshiper en instagram.
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Bangtwice - One Shots [Español]
RomansEste es un libro de One shots Bangtwice [BTS x Twice]. Se aceptan pedidos. ADVERTENCIAS: Alto contenido heterosexual y bajo contenido homosexual. Mención de otros idols. Algunos serán clasificación M. Si no te gusta, no leas. Paz.