Capítulo III.

338 40 8
                                    


Verlo dormir no era ver a alguien apacible perdido la serenidad noctica, mas bien, podía describirlo como  un pájaro enjaulado con el firme anhelo de escapar algún día.

Podía notar, a detalle, las tenues arrugas que se enmarcaban en su frente, y aun con los labios cerrados, casi podía escuchar el rechinar de sus dientes.

Se pregunto si acaso era el recordar a su familia, su soledad en la infancia o los terrores de la guerra lo que le visitaba en sus pesadillas más oscuras; era tan tentador... la delicada y blanca mano voló por los aires como si estuviese poseida, y justo antes de que si quiera se acercara cinco centímetros se vio detenida por un veloz movimiento que la empujo lejos, un tanto brusco, pero bien merecido, se dijo ella a si misma. 

-¿Qué planeabas?- Dijo Sasuke de manera acusatoria, sin abrir los ojos y recostado aún.

Sakura no responde, no se siente capaz, porque ¿que planeaba? 

-Quería saber si estabas despierto, iré de guardía al hospital esta noche, puedes quedarte en mi cama, apuesto a que el sofá es incomodo. De acuerdo, ha sonado convenible y Sasuke asiente. 

No lo había pensado de hecho hasta ese momento, tratarlo ahora era extraño. Suspira mientras se incorpora de a poco, había llegado  e ido inmediatamentea posarse frente al sofá de rodillas para comprobar que su errante inquilino no se hubiera marchado ya. 

-¿Has pensado en lo que te dije?

Siete palabras que formuladas en una pregunta pueden hacer que detenga todas sus acciones y pensamientos en cortos cinco segundos, se remueve incomoda una vez recupera la conciencia.

-Necesito una respuesta Sakura, tengo que irme esta semana a una misión muy importante, he venido aquí, de hecho, sin informar a casi nadie del consejo.

-Yo... eh... - y Dios, pronto vuelve a ser una mocosa pero con un cuerpo más desarrollado.

-Se llevará a cabo en secreto, en el viejo templo Uchiha, he pensado, Kakashi estará ahí. 

-Y mis padres, Naruto...

-No.- Para entonces Sasuke ya esta sentado, dedo pulgar e indice en el puente de la nariz, como si la chica le sacara de quicio con sus respuestas a medias, pero no puede hacer otra cosa que balbucear. -Ya te dije que debo irme esta semana, Naruto esta de misión y tus padres no se pueden enterar. Sakura, te estoy pidiendo que seas razonable. 

El latido de su corazón hizo eco en sus oídos, y como un interruptor acciono un reflejo de llanto que apenas pudo contener, es verdad que había crecido y Sasuke también, pero nada había cambiado. ¿Siempre sería así? 

-Y yo te pido que me digas la verdad, podre ser muchas cosas pero no estúpida. -inhala profundo, las ganas de llorar han pasado. -¿Qué quieres de mi?

-Que te cases conmigo. -la mira directo, sus ojos onix  con un aire desesperado que casi no visita las facciones de Sasuke Uchiha. -Llego la hora de echar raíces, no puedo quedarme aún, pero quiero establecerme en la aldea por completo algún día, deseo...-  siempre recordará el leve y único titubeo del chico pelinegro que jamas había escuchado. -... más que establecer, restablecer mi clan. 

-.-.-.-.-.-.-.

¿Como la llevan? Ya extrañaba esta obra, quizá haga maratón, y con dedicatorias :)) 

❊AFTER THE LAST ||SasuSaku & NaruHina||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora