Todo es tan difícil y tan raro

Un día cualquiera

Calor, siento mucho calor y algo me presiona el abdomen, no estoy agusto necesito salir de aqui. Ring Ring ese sonido tan estruendo me despierta, mi despertador, ese pequeño objeto que cada día me hace salir de este horrible momento, Carlos es quien me tenía sujeta por la cintura, ahora entiendo de donde sentía que me ahogaba y todo el calor, el es un caldero andante.

-Carlos venga, levántate es hora de ir a trabajar, voy a preparar el desayuno.

-Marta deberías de pensarte lo de coger vacaciones, nos vendría muy bien salir de la rutina cariño.

Me mira pidiendo una afirmación por mi parte, sinceramente no se si en el momento en el que me encuentro querría pasar todo un día junto a él.

-Déjame pensarlo ¿ vale? Tendría que ver si me pueden dar algún que otro día.

Lo miro rogando con que no siga insistiendo en esto, el parece ver mi cara y entenderme , no vuelve a insistir lo cual le agradezco. Él no es tonto él sabe que pasa algo, pero sinceramente no me a metido presión para contárselo . Me doy media vuelta y salgo por la puerta dirección a la cocina, empiezo hacer un poco de café y de mientras se hace el café  voy preparando un par de tostadas. Pongo un poco de música para hacer la mañana un poco más llevadera, ya están listas las tostadas y mientras termina el café saco un poco de zumo para mi y me lo echo en un vaso, y no puedo evitar pensar y pensar en lo mismo, ¿está bien que siga recibiendo cariño de alguien el cual no recibe nada por parte de mi? Quedo completamente ida y no me doy cuenta de que a llegado Carlos ya vestido y arreglado, él me está mirando con una cara de ternura que es imposible no apartar la vista, no, no puedo darle lo mismo, el mismo cariño. Pero quiero volver a intentarlo, alomejor son cosas mías y simplemente estoy confundida.

-Cariño, voy a intentar coger vacaciones, nos las merecemos.

Su cara refleja completamente la alegría que siente por completo. 

-Mi vida me alegra tanto que pienses eso, voy a pedir vacaciones en el trabajo , nada más llegue.

Empezamos a empezamos a desayunar,no podía mirarlo a la cara o simplemente cada vez que lo hacía intentaba que no se me notase la expresión que tenía, no voy a ir a ese viaje por mí, si no por él, por que se lo merece, conmigo es atento y no le doy lo mismo, por un momento que me olvide de mi y haga esto por el no tendré ningún problema, ¿no?.

Noto una leve palmada en mi espalda, me giro para ver de donde proviene y es suya, le miro confundida. -¿Que ocurre?. -Marta debes de ducharte, vas a llegar tarde. Miro la hora y ops estado ida todo este rato y ni cuenta me he dado, me levanto y me dirijo hacía ducha...

Cuando salgo de la ducha voy directamente al cuarto para poder vestirme e irme cuanto antes. -Nena me voy en cinco minutos,¿ quieres que te lleve?, dudo durante un segundo -No te preocupes voy en el mio que después de salir voy almorzar con mi hermano.Le digo mientras me coloco la ropa interior .-AH entonces genial, luego nos vemos y dale recuerdos a tu hermano que haber si nos vemos. Me decía mientras venía hacia mi y me daba un leve beso en los labios. -Adios nena. me decía. -Adiós cariño. Me decidí por unos pantalones vaqueros negros y una blusa blanca, hoy quería ir cómoda así que me coloque mis vans negras, hoy sería todo muy básico por lo que me eche rimel y un poco de brillo en los labios, ¿ y que hago con este pelo? me pregunto delante del espejo, me decidí hacerme una cola, para estar cómoda todo el dia. Me dirijo hacia el garage y cuando llego, ahi esta mi pequeño gran bebe, un Ranger Rover en negro, cuando entro lo primero que hago es poner musica, la musica alegra las almas y hoy necesitaba mucho de eso. Voy dirección al Hospital cuando suena el móvil, es Roberto mi gran amigo y compañero de hospital. -Roberto cuanto me alegra oirte, ¿ que ocurre?.- Hola pequeña, oye ya estoy en el hospital y al parecer tengo un novato conmigo, pero resulta que tu tienes a una novata....

Pongo los ojos en blanco ya se por donde va, Roberto siempre a sido un picaflor.-Roberto se por donde vas, y si, me lo puedes cambiar y quedarte tu con la chica.

-Gracias nena se los voy a decir y listo. Me rio solo el puede alegrarme un día como este sin el saberlo. Llego al hospital y aparco en mi plaza.

Vamos por un nuevo día, me digo a mi misma