Hola cariño, hoy se cumplen dos meses desde que te fuiste. A la mayoría de personas ha de parecerles poco tiempo pero a los que han amado como yo te amé a ti, saben a lo que me refiero. Incluso puede haber pasado solo una semana y sentirse como una eternidad.
Sigo sin comprender porque tomaste la decisión de alejarte, me prometiste una vida juntos, hicimos planes, todo giraba en torno a nosotros. Entonces un día solo desapareciste, así sin mas. Me hubiera gustado tanto darte un último beso de despedida.
No te diré que no puedo seguir viviendo sin ti porque sería una mentira de lo más estupida pero la cuestión es que todo se ha vuelto más complicado de lo que creí, hasta el hecho de levantarme de la cama y realizar mi rutina diaria resulta tedioso y sin sentido.
Muy probablemente jamás leas está carta y en realidad no la escribo para ti, si no para mí, siento que através de estás palabras al fin puedo despedirme dignamente. Muchas veces vi en las películas que si mirabas a la luna, la otra persona también lo estaría haciendo, pensaba que era algo totalmente ridículo y ahora ese gesto que en algún momento consideré ridículo es mi único medio de comunicación contigo.
¿Que si me arrepiento de algo? Sí, me arrepiento de nunca haberte dicho cuánto te amaba, no lo hice por miedo, por vergüenza y porque talvez tu no sentías aquello.
Recuerdo las veces que tenía un mal día, solo esperaba verte, que me abrazaras, sentir tu aroma para luego decirme que todo estaría bien. Daría lo que fuera por que en éstos momentos solo me dieras una caricia o una mirada. Si supieras cuánto extraño tus hermosos ojos.
Fuiste y serás el amor de mi vida, sé que algún día volvere a enamorarme y formaré una familia, tendré hijos, nietos, los veré crecer, alguien será mi compañero, pero jamás podré sacarte de mis pensamientos. Quedarás grabado como uno de mis mejores recuerdos.
Siempre tuya...
***
62 Años Después.
El anciano dobló la hoja que había encontrado en la biblioteca de aquella vieja casa. Esa casa que había compartido con su gran amor, décadas atrás, se enteró que su querida dama había fallecido un par de semanas atrás, jamás formó familia alguna.
Luego solo un pensamiento cruzó por su mente.
“Te amo, jamás dejé de hacerlo.”
