Aquella persona. . .

Era martes,el típico martes de aquellos en el que los pensamientos volaban por la ventana y fluían en cada gota derramada por la lluvia. Suspiré ,y volví al mundo real , mi clase . Oír la voz de aquella persona me ostentaba las ganas  de ir a las nubes  recorriendo ese camino lleno de rabia. No había momento en el que no parara de hablar ,era como si cada palabra que salía de su boca huyera de ese interior tan oscuro. No tenía otro remedio que escucharlo, sus palabras duras y frías me quitaban las ganas de trabajar. Me saturaba ...¿Por qué eres así?- me pregunté. No tenía otra cosa que hacer, que explotarnos desde el primer pie que poníamos en su territorio.

-¡Pablo!- gritó- ¡No quiero volver a verte levantado en medio de clase !- dijo mientras lo señalaba- ¡Eres un incompetente ! No entendía por qué esa persona era así , tenía tan mala vibra que podía notar como con solo una mirada ya hacía que el alma de aquella persona se llenaba de complejos  .... Pablo no pudo hacer nada más que mirar al suelo  y reflejar sus sentimientos en cada lágrima caída de sus verdes ojos.

De repente sonó mi salvación, el timbre. Aquel instrumento que hacía que todos tuviésemos un momento de libertad en aquella cárcel llena de locos. Ángel , se llamaba.

No entendía por qué los ex-alumnos de este instituto lo apodaron así , pero algún día lo averiguaré . -¡Riiing! - sonó Ángel-.El profesor como de costumbre nos obligó a salir de la clase, no le importaba que el más frío del invierno penetrara en nuestra piel como agujas clavándose en la venas.

Salimos.....pero al volver a la siguiente clase ocurrió lo que menos nos esperábamos y más nos impactó...