Yo solo buscaba su atención, solo necesitaba que sepa de mi existencia, que solo notara como lo miro, como idolatro cada cosa que hace,como con solo pasar al lado mío detiene mi vida
Me enamoré del chico más deseado de la secundaria,del más popular...
Yo solo buscaba su atención, solo necesitaba que sepa de mi existencia, que solo notara como lo miro, como idolatro cada cosa que hace,como con solo pasar al lado mío detiene mi vida
Me enamoré del chico más deseado de la secundaria,del más popular. Aún sabiendo sus preferencias,aún sabiendo que no me notaría en el mundo.
Soy Kim TaeHyung, un chico de quinto año,un nerd (prefiero el termino bueno academicamente). Un chico que no existía para el mundo, excepto para Jin, mi único amigo.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
A diferencia de cualquier chico, a mi me gustaba Jeon Jungkook(chico perfecto en todo sentido para los ojos de todos).
Era completamente extraordinario, un chico normal academicamente,muy atlético,muy buen cantante y bailarín. Cualquiera caía en sus encantos,y Kim no fue la excepción. Para Tae Tae, Jeon era su mundo, para Él Kim TaeHyung ni existía...
Todo se derrumba al saber que seguramente kook jamás notaría como es Taehyun para con él. Y tan solo pensar que Jeon jamás estaría interesado en un chico, y menos en alguien como él, rompía todo su corazón en mil pedazos.
Un día como cualquier otro, Kim se encontraba en la biblioteca buscando un buen libro...
Tomó el libro que buscaba,pero su mano se encontró con la de la persona que hacia que su corazón palpitara a mil por hora...
Jeon solo le dedicó un sonrisa, que de inmediato kim dejó de ver, ya que le provocaba demasiados nervios...
Tae no lo podí creer, kook le dedicó una de esas preciosas sonrisas, eso dientes de conejo que iluminaban el mundo del mayor...
Esa sonrisa no la cambiaría por nada, no la podía sacar de su mente.
Tae aún tocaba su mano, aún sentía esa placentera sensación de la mano del menor sobre la suya, con tan solo recordar; se sonroja a más no poder, dejando ver esa sonrisa enamorada. Observaba el libro con gran atención, no pensaba que a alguien popular le interesaría la lectura de drama romántico. Sin duda cada día se sorprendía más por ese chico... Ojalá ese momento nunca hubiera acabado