Recuerdo un día llegar a casa después de la escuela, completamente cansado de todo el día y harto de hacer lo mismo todos los días, y decidí abrir la ventana,pero solo un poco porque hacía mucho frío,era invierno.
Me senté en la cama, cogí un libro de la mesa que estaba justo a mi lado,me tumbé y comencé a leer.
De pronto, escucho una música, provenía de la calle, me asomé y vi a unas personas sentadas tomando unos tragos mientras escuchaban música.
Me giré mientras hacía con el rostro una señal de desprecio,y pensé: para unos tragos podrían ir a otro lugar y no desperdiciar tampoco esa música,que era buena.
Voy a dar unos pasos hacia la cama,y la música estalla,sin querer mi cuerpo se mueve, se siente tan bien.. noto que me canso,pero me es imposible parar,es como si toda mi energía gastada de todo el día se hubiese renovado para éste baile.
La música acabó,yo acabé tirado en el suelo,en shock,sin saber lo que había ocurrido. Ésto me hizo plantear mi día a día.
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Sentimiento Extravagante
Teen FictionYu es un joven chico de apenas 19. Con pocos años él bailaba, pero tuvo que dejarlo por temas familiares y de estudios. Pero ahora se ve obligado a seguir con la danza, no puede evitar moverse al escuchar un buen ritmo,y hará lo que sea por llegar a...
