1; Hopeless.

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"Quisiera ser sentimiento y fluir entre tus venas, ser beso y tomar tu aliento,
quisiera ser escalofríos esparcidos en tu columna, desapareciendo en pudor ilógico.

Ser la ventana en la que te recargues todas las mañanas cuando el dorado de la incertidumbre viaje entre tu cabello desordenado y sólo pienses en rendirte ante Morfeo.

Quisiera dejar de ser palabra insípida perdida entre papel y convertirme, en cambio, en coraje y suficiencia.

Kim."

Namjoon sonríe, viendo la pizarra donde semanalmente se colocaban poemas del club de literatura, encontrando entre ellos el de su escritor favorito, Kim Taehyung.

Curiosamente, los poemas del chico nunca lograban estar entre los tres mejores, pero el pelinegro no podía dejar de observarlos con una emoción inexplicable, las palabras manteniéndose en su memoria hasta ser remplazas por nuevas.

Algunas veces le pasaba por la mente la idea de dejar algún tipo de mensaje anónimo, pero se detenía al sentirse fuera de lugar.

Porque conocía a Taehyung, todos lo hacían.

Y quizá esa era la razón principal por la cual no le daban el primer lugar al joven pelirrojo, quizá era tan perfecto en todas las demás áreas que simplemente no podían concebir el hecho de que también fuese excepcional en la poesía.

Era un año más joven que Namjoon, pero podía ver que su alma era vieja, añejada en sentimientos cálidos y pensamientos certeros, deshidratada en el calor de un corazón radiante.

Las palabras del pelirrojo se metían bajo su piel, manejando sus acciones y delineando finas capas de rojo cuando sus ojos chocaban entre si.
Siendo tal su pequeño enamoramiento (quizá Namjoon estaba enamorado del chico desde su presentación de canto al comienzo del año) que la idea de acercarse le asfixiaba.
¿Y qué si el pequeño ángel salía con Jennie, la otra más popular entre los grados menores?

Y aún si no, ¿qué le aseguraba su sexualidad acerca de tener oportunidades con el menor?
De ser él, seguramente saldría con alguien de 'su liga'.

El joven de sonrisa angelical y su amigo el musculitos serían su primera opción.

¿Qué tenía él para ofrecer de todas formas? Era torpe y un nerd de primera.
Estaba en sus plenos 17 y aún seguía discutiendo con su mejor amigo acerca de que de ninguna forma Kumamon era el mejor personaje animado.

El timbre resuena en los pasillos y sabe que tiene que correr para no faltar a su práctica de laboratorio, suspirando pasa frente a la pizarra de los poemas, sus latidos acelerándose sin razón y su humor decayendo un poco más.

Hey, chico lindo. [TaeMon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora