Everglow

Capitulo 2. "No dejes que lo haga"

En un microsegundo en el que quite la mirada de enzima de mi hermano para curar a aquel chiquillo, un tipo de bucle de tiempo nos encerró;

Solo a 4 vidas, 4 seres, y una de ellas merecía la muerte.

Mi hermano sostenía dos almas que claramente identifique, la del pequeño y la del gato, "su gato" era la mascota de aquel niño.

El niño rápidamente supo lo que pasaba pero yo no, yo estaba pasmado, impresionado y aturdido.

"-No dejes que lo haga-un tipo de espectro espiritual que provenía del niño me susurro esas palabras casi al borde del llanto.

-¿Qué? ¿Me hablas a mi?- Le pregunte aun con una duda muy grande de lo que pasaba justo en ese momento.

-No dejes que lo haga- volvió a repetir.

-¿A qué te refieres?

-No dejes que lo haga, No dejes que lo haga, No dejes que lo haga, No dejes que lo haga, No dejes que lo haga, No dejes que lo haga, No dejes que lo haga, No dejes que lo haga- De casi un susurro paso a unos gritos escalofriantes que te enchinaban la piel, se notaba sufrimiento, soledad, tristeza, muchas cosas, ninguna buena, lo repetía una y otra vez, como si fuese un mantra que le ayudaba a desahogarse."

De un momento a otro vi las intenciones de Nohan, no las entendía del todo, pero no debía permitir que lo hiciera sobre todo si aquel chiquillo lo pedía con tal desesperó.-No dejes que lo haga

-¡No Nohan! ¡Espera!, ¡ALTO! Por favor no lo hagas- justo al momento mi hermano pareció salir de un tipo de trance, sus ojos ya no le prestaban atención al vació, si no que me miraban a mí, era plateado contra miel, esos destellos que tanto eran envidiados ahora le lucían a mi hermano.

- Nathan, ¿Qué está pasando?- su mirada se paseaba de entre mis ojos sus manos y el niño.

-No sé, no tengo ni idea, pero si se, que no debes hacerlo.

-¿Por qué no? Si es una vida por otra.

-El no lo quiere así- le dije casi escupiendo las palabras, al momento en el que lo señalaba.-Solo baja las manos hermano, no hagas algo de lo que te puedas arrepentir- pareció que justo esas palabras le calaron pues en sus ojos se asomó un atisbo de tristeza y lentamente retiraba las manos, y tiempo comenzó a recuperar su rapidez y todo volvió a la normalidad, en mis brazos tenia al mocoso y solo lo vi sonreír.

-Gracias- dijo e hizo un intentó de tocar mi mejilla.

-¿Por qué?, al final debí dejarlo, te hubiera salvado- No capte en ese momento la importancia de mis palabras.

-Mi gato, mi única familia, no podría haber vivido yo sin el- y así el ultimo soplo, el último aliento de vida, su ultimo respiro, me lo dio a mí, viendo y sintiendo como paraba su corazón.