Es hora

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"Estaba sentada sobre la mesa fría y dura donde la dormirian, aceptó aquello por que confiaba ciegamente en el profesor, lo que no sabía era si estaba bien o mal, y eso le golpeaba la cabeza."

"Hank había ido a despedirse de ella con lágrimas en sus ojos, se había encariñado tanto con ella que, se le hacía tan difícil imaginarse que la dejaría ir, acabandola de conocer hace apenas unos meses, ¿Y si nada salía bien?, ¿Y si Trask lograba sus objetivos?."

"Erik no se había dignado en acercarse a darle palabras de aliento, no era de su incumbencia, a Erik no le importaba ella, si no su bien propio."

"Logan se acercó a ella a último momento, le dio un fuerte abrazo y beso en la coronilla, le sonrió con nostalgia, y se alejó tan rápido como llegó."

"Ya era hora, todos los presentes salieron, a excepción de un pequeño niño de cabello blanco, que le brindaría un capullo de fuerza pura protegerla. Charles se posicionó por sobre la cabeza de Hope, colocó sus manos la cien de la joven y la miró desde arriba."

"-Todo estará bien-le susurró dulcemente.

-Sigue repitiendo eso hasta que logré creerlo-le dijo ella intentando evitar su mirada penetrante.

-Hope...-esta lo interrumpió.

-¿Te he dicho que tienes una voz muy linda, Charles?-preguntó, él no contestó-Y tu bello acento la hace aún más hermosa, tus ojos son dos maravillosas gotas del mar más azul que alguna vez pude imaginar, tu cabello cae en divinas cascadas castañas que me hacen sentir envidia-le confesaba con admiración-eres tan perfecto. Deseo que lo primero que vea al despertar, sea tu atractivo rostro.

Él dejó salir aire por su nariz rápidamente sonriendo-Gracias, Hope. Nadie dijo nada más.

-Charles-susurró la chica sintiéndose ya adormilada, el soltó un sonido ahogado desde su garganta-Se que mi organismo tiene 7 años de vida y luzco de 25, pero mi mentalidad debe tener más de 50 años-río- tal vez no se nada de política, o cultura, o si quiera educación, pero he vivido infiernos, creo que eso es suficiente para merecer la dicha de disfrutar ahora el cielo, no me refiero al cielo de arriba, el paraíso celestial, si no el paraíso mortal, este paraíso-suspiró por última vez, ahora su pecho subía y bajaba lentamente, en completa tranquilidad, en un sueño profundo."

"El profesor limpió las lágrimas que no soportó y dejó salir, sintiéndose agotado, triste, impotente, pero aliviado, libre, creyendo que hizo lo correcto, todo un collage de emociones, cada una contradictoria a la otra."

"¿Habrá sido lo correcto tomar aquella desición?."

"Lo siento querido amigo, no lo fue."

Mutante XDonde viven las historias. Descúbrelo ahora