𝑪𝒀𝑷𝑯𝑬𝑹 (ᴘᴛ.1) 𝐉𝐈𝐌𝐒𝐔

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Y O O N G I

Una vez ambos terminamos de comer cada uno pago la cuenta.
mientra salíamos para regresar al trabajo a Namjoon le hablaron por teléfono ya que lo necesitaban en un caso.

Se despidió de mi y se fue por su lado,
yo me dirigí a la comisaría para seguir con el caso, de camino a la comisaría iba pensando sobre el caso de ese tal "Park Chim", ahí algo que no me cuadra de ese expediente.

Iba tan sumergido en mis pensamientos que no me di cuenta cuando me desvíe del camino.

–Maldición.– Dije en voz baja dando la vuelta para regresar de inmediato a la comisaría, ya había tardado más de lo necesario en ir a comer.

Después de varios minutos mi teléfono comenzó a sonar, maldije internamente porque sabia quien el que le estaba llamando. Sin demorar más agarre el teléfono y conteste.

–Si, jefe.– Dije de lo más normal que pude.

–¡Donde diablos estas Min! Se suponía que desde hace rato tenias que estar acá porque aún no llegas.– En verdad el jefe se oía muy enojado.

–Lo siento jefe, ocurrió un percance y demore mas de lo debido pero ya estoy por llegar a la comisaría.–Empece a caminar mas rápido ya que aun me falta camino por recorrer.

–Tienes 10 minutos, tu trabajo no se hará solo Min.– Y sin más que decir colgó.

–"Mierda cuando fue que camine todo esto, en verdad que este no es mi día".–  Pensé para mi mismo y es que si como me había desviado tanto en tan pocos minutos.

Como pude llege a la comisaría a tiempo, más rápido de lo que el jefe me había dicho, pero al llegar me quedé pasmado al ver a cierta persona ahí.

–No puede ser.– Dije en un susurro apenas audible para mí.

–No puede ser él. ¿En verdad lo era?, ¿¡Era él!?– Repetí de nuevo en un susurro para mi mismo.

                

J I M I N

Después de que Jin se había ido, me puse a revisar unos documentos sobre las armas que le encargue a MinHo hasta que me puse a pensar lo que me había dicho Jin.

Como alguien se podía enamorar tan rápido de una persona que ni siquiera había visto en toda su vida.
Conocía a Jin y sabia que de el se podía esperar cualquier cosa.

Pero como no, si había crecido solo sin que nadie le enseñará o lo guiará en su vida, sin ningún padre o madre que le diera el amor que uno necesita, los consejos, el consuelo, nada.

Él estuvo solo y de eso se aprovecharon ese malditos desgraciados que lo lastimaron, lo engañaron con hermosas palabras, pintándole un cuento de hadas para que al ultimo lo dejaran solo destrozado y sin ánimos de nada.

Las veces que lo herían me dolía verlo de esa manera tan destrozado y vulnerable, tan frágil, que a como de lugar buscaba a los malditos y los hacia pagar por cada lágrima que habían hecho derramar a Jin.
Él es como mi hermano mayor mi familia la única familia que tengo junto a Jungkook y Taehyung.
y haría cualquier cosa por ayudarlos a pesar de todo.

Y es lo que me hierve la sangre que las personas y los policías, comandantes, hablen de nosotros ya sean criminales, asesinos, etc, con poco respeto, asco o repulsión, como si no fueras personas, hablen de nosotros como cualquier objeto o basura, pero no saben lo tuvimos que vivir, lo que sufrimos o lo que nos conllevó a que tomaramos este camino, dirán que no es el mejor camino, que es el camino fácil pero si en realidad fuera fácil llegar a donde estoy o donde están los demás, mas de la mitad de las personas fueran como nosotros.

Mi teléfono comenzó a sonar y fue cuando me di cuenta que mis manos estaban lastimas en que momento me hice daño.
Rápido conteste al ver quien era.

–¿Qué a pasado Kookie?– Pregunté, se me hacia raro que llamará.

–Hyung, tienes que venir a la bodega.– Dijo en un tono tan serio.

–"Algo no está bien".–  Pensé, es muy raro que Kook hable tan serio, solo habla así cuando ahí problemas o la hemos regado.

–¿Que demonios a pasado?– Algo no cuadraba bien, y tenía que saber que pasaba.

–Es algo que tienes que verlo por ti mismo Hyung.– Sin mas colgué y salí disparado hacia la bodega.

La bodega estaba a las afueras de la ciudad un lugar alejado de todos y bien oculto, donde se guardaba de todo.

Esta mañana había enviado a Jungkook a que revisará si un cargamento había llegado bien y completo pero al parecer había una sorpresa mas.

Rápido baje las escaleras y me dirigi a mi camioneta, entre y salí disparado para llegar a tiempo, en transcurso normal se podía tardar de 30 a 40 min.
Pero debido a que era el asunto de urgencia no podía tardar demasiado así que rápido pero sin llamar demasiado la atención maneje.

[...]

A los 25 minutos llegué, al llegar los hombres que habían acompañado a Jungkook salieron a recibirme, camine rápido y al llegar a la entrada estaba JungKook.

–¿Que diablos pasa?–

–Al parecer no les gusto la idea de ayudar a un comandante y retar a Choi. El grupo mafioso de Taiwán dirigido por Henry nos cambió el cargamento de armas por ésto, y al parecer MinHo esta fuera de esto pues ya viene en camino.–

–¡Que mierda!– No terminé de hablar pues al ver lo que tenía enfrente de mi.

–Siento tanto ésto, pero creo que tenemos infiltrados dentro, vigilandote.– Dijo esta vez con el señor fruncido.

Esto no esta bien, en verdad algo no va bien camine a paso rápido para entrar por completo a la bodega, sentí que mis piernas fallar, mis ojos comenzaron a picar.

–No, esto no puede estar pasando. ¡Mierda!– Con paso lento me acerque al llegar a donde supuestamente estarían las armas, pero no, en cambio era algo peor.

–¡Jodida mierda!–