Realidad.

Pensamientos

Jamás pensé, imaginé o soñé que las personas a mi alrededor, que parecían cercanas, podrían liberar tal magnitud de... maldad. Lograron abrumarme e incluso minimizarme. Ya no sé que pensar o simplemente como seguir. Supongo que escribir logra liberar cierta parte de mi dolor; dolor que por supuesto jamás demostraré frente a esas bestias rabiosas que pretenden alimentarse de mi miedo y mucho menos demostraré mi debilidad frente a las únicas personas que me dan razones y alientos para seguir. Pero... ¿Seguir cómo?, ¿Seguir a dónde?, ¿Quiero seguir?, ¿Deseo sinceramente avanzar en este camino tormentoso que no hace más que lastimarme con cada paso que doy?, ¿Realmente deseo vivir?... Son preguntas frecuentes que rondan y se clavan cual puñal en mi cabeza cada segundo de mi agónica existencia. ¿Para qué o quién seguir?. ¿Por qué debería esforzarme en avanzar sabiendo que muchas, por no decir todas, mis dolencias no sesarán? ¿Siquiera debería intentarlo?.
Lo reconosco, probablemente la mayoría de mis cadenas las he atado yo misma y aún no encuentro las llaves para soltarlas. Sin embargo, creo no merecer estas cadenas al rojo vivo que me han impuesto y que hieren mi alma como si el único fin que  tuvieran fuera asfixiar hasta el último de mis anhelos y deseos.
¿Dónde se fue la felicidad?. ¿En qué momento dejé de sentir paz y me convertí en esta maraña de pensamientos oscuros y suicidas?.
Lo intento. Juro que lo intento. Aparento firmeza, felicidad, gozo e incluso paz... mientras por dentro los puñales del recuerdo y el dolor se me clavan en lo más profundo de mi ser.
No sé como sacarlos. Creo... ya no saber nada. En este preciso momento me siento como una máquina poco inteligente, solo me dejo llevar, hago lo que creo correcto sin indagar más allá, sofoco mis pensamientos, nisiquiera razono con claridad. Perdí mi voz, mi chispa, mi luz... creo que me perdí a mi misma.
¿Qué será de mi mañana? ¿Acaso tendré que seguir soportando no solo mis autoflagelaciones. si no, los tormentos del entorno? ¿Alguna vez culminará mi suplicio? ¿Alguna vez seremos mejor que esto?.
El dolor se ha convertido en una piscina y mis llantos silenciosos son el sustento y el relleno de esta. Ya no quiero callar... necesito gritar, necesito ser escuchada, necesito... vivir.
¿Qué es estar viva? ¿Qué es la vida?.
Si siempre será así, no la quiero. ¿Seré yo? ¿Serán ellos?. Hay demasiadas preguntas corriendo como si de una maratón se tratara dentro de mi cerebro y no logro contestar ninguna. Siento que me estoy volviendo loca. Esta no soy yo. No puedo ser yo.
Recuerdo, con nostalgia, aquellos días en los que realmente creo haber sido feliz. No había dolor, puñales, lágrimas, entornos, falcedad, vagos recuerdos. Solo existía ese pequeño remolino en el pecho que impulsaba la curvación de los labios y ese mínimo, aunque auténtico, sonido proveniente de nuestro ser interior... la risa.
¿Volveré a reír o siquiera sonreír, verdaderamente alguna vez?. ¿Lograremos avanzar? ¿O solo nos quedaremos atascados en esta nube densa y oscura que no nos permite ver más allá de nuestro horror y depresión?.
No soy solo yo. Mi mayor preocupación nunca he sido yo.
Lo que más me lastima, es ver ese triste, acongojado brillo en los ojos de quienes amo, respeto, admiro.
¿Por qué han de sufrir? ¿Por qué hemos de sufrir? ¿Qué errores tan inmesos hemos cometido para recibir esto? ¿Será una prueba? ¿Prueba de qué?.
No lo soporto. Ya no soporto este dolor y ver el sufrimiento de ellos... que merecen las más maravillosas y mejores cosas del universo. ¿Qué culpa tienen?. ¿Por qué le hacen esto?.
De lo único que estoy segura es que no se detendrán hasta volvernos tan miserables como ellos lo son.
Pero no, no lo voy a permitir. Si he de sufrir, sufriré. Si he de peliar, peliaré. Pero no permitiré que los dañen, no a ellos.
Grítenme, abúsenme, golpéenme, pisotéenme, pero mi bandera de lucha no detendrá su flameo. Seguiré firme en mi postura, defenderé hasta el final la última luz, el último brillo que he logrado encontrar en tanta oscuridad, los defenderé a ellos. Sus voces nunca más serán calladas y sus cuerpos no volverán a ser violentados, no mientras dentro de mi exista la fuerza, el valor, el coraje y el amor para apoyarlos.
Me quieren ver débil... y lo han logrado, lograron que me sintiera como una basura que no merece nada más que la soledad y el vacío. Mas, ellos han fortalecido y renovado algo dentro de mi, algo que me ha dado la fuerza para luchar.
¿Sanar? Eso, creo que jamás sucederá. ¿Amarme? Quizás algún día conosca el significado de eso.
¿Olvidar? Nunca.
Tengo tantas heridas sin costra, que difícilmente logro vivir con ellas, me atormentan, me persiguen.
Mi mente y sentimientos son un constante vaivén. Deseo seguir y luchar por ellos, sin embargo, al mismo tiempo anhelo liberarme de este  tormento y solo irme.
¿Qué habrá después? ¿Qué vendrá después?.
Estoy en un torbellino de tiempo que me ha convertido en una bomba activa y a punto de explotar. Se detiene. Cuando creo que será mi liberación, casi como un castigo, el tiempo se detiene. ¿Qué quieren de mi? ¿Quieren provarme? ¿Acaso es un obstáculo de la vida para averiguar si soy fuerte y capaz de sobrellevar esta carga, esta mochila que parece cargar un país completo? No quiero más obstáculos, no necesito más obstáculos... y ellos tampoco.
¿Por qué le haces esto? ¿Por qué dañas a un ser tan angelical y bueno como él? ¡No pudiste solo destruirme a mi! ¡NO! ¿¡TENÍAS QUE DAÑARLO A ÉL?! ¿¡No es suficiente para ti nuestro sufrimiento?! ¿¡No es suficiente la agonía que vivimos a causa tuya?!¿¡Por qué tienes que opacarlo?! ¿¡Por qué le quitas su luz?!
No. Yo puedo soportar cuantos puñales quieran clavarme, cuantos abusos quieran realizarme, cuantas mutilaciones quieran provocarme. Pero jamás permitiré que lo dañen a él, no a él.
Si he de seguir sufriendo, que así sea. Pero no flaquearé hasta verlos completos, felices y libres de ustedes.
Sí, he pensado en irme, en dejar esta vida, en dejar mi dolor, mi sufrimiento, mis recuerdos. Pero...¿Qué clase de ser humano sería yo, si no protegiera a quienes amo?
¿Podré protegerlos? No lo sé. Pero lo averiguaré. Y juro con mi vida que no me detendré hasta apartar por completo la oscuridad que nos rodea, no me detendré hasta que volvamos a brillar como algún día lo hicimos, no me detendré... hasta perdonarme y amarme como sé o espero que algún día lo haré.
Lucharé por ustedes... por mi familia.