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-cariño, ¿quien esta en la puerta?.- la madre de Indivar grito desde la cocina.

-nadie importante.-contesto la joven.

-¿no soy importante.?-Dan dijo en tono burlón mientras colgaba su abrigo en el perchero de la casa como si viviera allí.

Se dirigió a la cocina que desprendía olores hermosos, cocina italiana.

-Dan, ¿que rayos estas haciendo?-pregunto Indivar mientras le seguía el paso al chico.

-señora Brina, buena noche, mucho tiempo sin verla.-Dan se acerco a la madre de la joven y esta dejo de cocinar para abrazarlo.

-Dan, ¿cuando llegaste?, ¿como estas pequeño?.- La señora Brina miro con alegría al joven.

Dan tomo asiento en la barra de desayuno de la cocina y siguió con la conversación -hace poco, y ¿el señor Ethan?.-

-en su oficina, como siempre, ¿quieres quedarte a cenar con nosotros?.- la señora pregunto mientras seguía cocinando.

Dan estaba a punto de contestar pero Indivar interrumpió. -no, no quiere, el tiene una cena con su novia y no tiene tiempo para quedarse a cenar , entonces gracias por tu invitación pero el no quiere.-

-nah, le dolió la cabeza a Helena y se fue a su casa, yo trate de insistir en quedarme con ella pero ella se negó, osea que no tengo ninguna cena con ella.- Dan miro con una sonrisa ganadora a Indivar y acepto la cena.

Toda la familia estaba en la mesa incluyendo a Dan.

-Entonces ¿el es tu novio?-Robin pregunto señalando a Dan con su tenedor.

Indivar se puso muy nerviosa y su padre la volteo a ver con sobre protección. -Robin, el es solo el hermano de mi amiga.-

Dan estaba tomado un sorbo de agua y al escuchar eso se empezó a ahogar. - solo el hermano de una amiga, ja, y yo que te consideraba mi amiga.-

-Entonces, ¿Quien se supone que es?-  -¿es mayor que tu?.- -¿donde se conocieron?.-  las dos hermanas mayores empezaron a hacer preguntas, unas cuantas las aprovecharon para coquetear, sin embargo Dan no les presto mucha atención.

-Dan es una amigo, ya, ¿felices?- Indivar dijo algo molesta.

Después de la larga cena Dan se iba a retirar, Indivar lo llevo hasta la puerta para despedirse.

-Dan, eres un loco que entra a las casas de otros sin su permiso.- Fue lo que la joven dijo.

-Y tu no eres muy buena en las despedidas, adiós.- Dan se despidió, alboroto el cabello de la joven chica y se fue.

-Maldito Dan, se supone que ya no me gusta, ¿por que estoy roja?.- Indivar se echo al suelo frente a la puerta y empezó a dudar toda su existencia.

La joven se puso de pie y subió las escaleras para ir a su habitación, se echo a la cama de un brinco y se estiro.

En la mesita de noche su celular empezó a vibrar, era un mensaje de Yelin.

Yelin: oye, ¿todo bien?

Indivar: sip ¿por que?

Yelin: no me contestaste como 30 mensajes y me preocupe

Indvar: Ñah, estaba tragando

Yelin: ah Ok, solo era eso, buenas noches.

Indivar: Sip

La joven silencio su celular y se quito los anteojos, en menos de 15 minutos cayó rendida al mundo de los sueños.

A la mañana siguiente Indivar se despertó porque tenia sed, bajo por un vaso de agua y vio a sus hermanas con sus uniformes.

-mierda, ¿que hora es?-susurro y se fijo en el reloj que colgaba de la pared de la sala, nuevamente se le hizo tarde, esta vez solo se puso un oberol sobre la camiseta de su pijamas.

Su cabello estaba esponjado como siempre y no le dio tiempo de ponerse sus lentes de contacto.

Llego a la entrada de la escuela y no estaba abierta.

-no, ya cerraron.- dijo mientras se ponía de rodillas frente a la puerta.

Un conserje la vio y se le acerco. -¿Que hace aquí señorita?.-

-vine a clases.- se puso de pie y le contesto al hombre pálido de barba canosa y larga.

-pero si hoy es dia festivo y en esta escuela hoy no hay clases.- el señor de voz ronca dijo amablemente. 

-Ah, si ya sabia, gracias tenga un buen día.- ella se despidió y se marcho. 

Ella estaba caminando por el parque y de reojo pudo ver a Mark con una caja de cigarrillos.

Indivar se le acerco al joven y decidió solo sentarse a su lado. -¿fumas?.- le pregunto ella con una voz tenue.

-nop-el contesto sin siquiera hacer contacto visual.

-¿entonces?.-

-mi padre a parte de ser un imbécil era un adicto al tabaco y vi a un niño como de 14 años con esta caja de cigarrillos.- fue lo único que dijo.

-y...- Indivar quiso seguir con la conversación.

- y no iba a dejar que ese grupo de niños inmaduros arruinen su vida de tal manera.-el explico con un nudo en la garganta.

-aahh, ¿como esta tu hermana?.-ella pregunto.

-bien.-

Los dos se quedaron en un gran silencio que aunque pareciera incomodo no lo era.

-pues ya que, la vida es una basura, ¿quieres ir a comer comida china?- Mark se puso de pie y se estiro, dio dos pasos y tiro la caja de cigarrillos en una cesta de basura que estaba muy cerca de ellos.

-la verdad si, me estoy muriendo de hambre, no tuve tiempo de desayunar.-


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