El caballero del sol negro

El despertar

En Condlar, antiguo reino de reyes y dioses, hacia años que brillaba la paz, las guerras que tuvieron las ganaron, absolutamente todas, ¿Como pudo ser eso posible? Fácil, mataron al rey y al príncipe y ya no tuvieron que obedecer ordenes estúpidas de nadie, montaron su propia estrategia sin limites cosa que les hizo ganar bastantes batallas...

Los reyes, reinas, princesas y príncipes fueron enterrados en un lugar lejano de las tierras de Condlar, un lugar sombrío, áspero y escaso de vida... Donde los monarcas descansaban en paz junto a las criaturas infames de los alrededores, era un lugar de en sueño... Todas las personas eran amables y no buscaban ningún tipo de problema, podías ser tu mismo, si eras homosexual, de otra raza, etnia o creencia... No pasaba nada!
Era todo muy tolerante... Era un reino perfecto... Pero siempre hay un pero...

Un día en aquel cementerio un astro extraño se alzo al cielo y lanzo una especie de rayo oscuro bastante extraño dirigido a la tumba de Haden, el antiguo príncipe de Condlar...

Los guardias extrañados se acercaron a la tumba...

-Mira a ver que pasa... -Dijo el capitán de los guardias-

El guardia se empezó a acercar, de repente una gran espada sale de la tumba cortándole la cabeza en dos al guardia que se acerco a mirar. Un cuerpo alto de unos 2 metros de altura salio de la tumba, acto seguido alzó la mirada hacia los guardias los cuales tan solo con mover la espada ligeramente consiguió que la presión del propio golpe le cortase la cabeza a los 5 guardias restantes.

El príncipe meneaba su cuerpo sorprendido de estar vivo...

-¿Sorprendido? -Dijo el extraño astro-
-¿Quien eres? -respondió el príncipe mirando fijamente al astro-
-Soy tu resucitador... Tu dios y tu nuevo dueño...
-¡YO NO TENGO DUEÑO! -Grito furioso el príncipe mientras atacaba al astro con la misma fuerza y técnica que con los guardias-
-Es inútil... No puedes matar a un dios... -respondió el astro con la misma tranquilidad e inexpresividad que antes-
-Tch... ¿Porque me has reanimado?...
-Porque todo es demasiado perfecto...
- ¿Esto es una broma o algo así?
-No
-Pero... ¿Los dioses no buscáis el bien?
-Pero no la perfección... La perfección es... Aburrida...
-¿Y que quieres que haga un zombie como yo? -Dijo el príncipe con bastante curiosidad
-Solo quiero que acabes tu con todo esto... Que acabes con la perfección...
-Si es perfecto ¿Como pretendes que acabe con eso?...
-Te he concedido el 40% de todo mi poder... Es suficiente para acabar con ese reino de una vez por todas...
-¿Y porque no lo haces tu si tan fuerte eres?
-Los dioses no podemos atacar directamente a la humanidad... Eso seria un crimen celestial...
-¿Y porque yo?
-Preguntas mucho ¿sabes?
-Me has arrebatado de las garras de la muerte, me has echó "invencible" y me estas pidiendo que me cargue mi antiguo reino... ¿Y pretendes que no te pregunte nada? -Dijo el príncipe con tono irónico-
-Te he elegido al azar ¿contento?
-No, mi padre, mi madre, mi amada y mi hijo están muertos...
-¡Por eso te he reanimado! ¡Para que te puedas vengar!
-¿Pero no me habías elegido al azar?
-¡CALLATE O TE FULMINÓ! -Dijo el dios hartándose-
-Pero seria crimen astral... O celestial... O como sea...
-¡MIRA! ¡TE ESTOY DANDO LA OPORTUNIDAD DE VENGARTE! ¡¿VAS A HACERME CASO O TE ARREBATO LA VIDA Y LOS PODERES QUE TE HE DADO?! -Exclamo el dios ya enfadado-
-Vale, vale... Tranquilo... Dime que tengo que hacer...
-Esta bien... -dijo el dios respirando lentamente...- Simplemente llega a la catedral y destruyela...
-A cuanto estoy de la catedral...
-A 1150km...
-¡¿CUANTO?!
-1150km
-¡¿ESTAS TONTO?! ¡¿COMO LLEGO AHÍ A PIE?!
-Caminando, y matando todo lo que se te ponga delante... Sea inocente o no...
-Ay dios... Esta bien... Lo haré...
-Claro que lo harás... Ahora si no te importa... Me marcho... Buena suerte viajero...
-Si,si... Lo que tu digas...

Dicho esto el astro desapareció del cielo causando una leve explosión que tan solo meneo ligeramente el planeta tierra sin causarle ningún daño. El príncipe cogió su espada y se puso su yelmo, dispuesto a vengarse enfundo su espada y lleno de furia... Salio del cementerio dejando detrás suyo una estela de llamas que se convertían en ceniza rápidamente.

-Pagareis por arrebatarme todo lo que amaba...

Dijo el príncipe enfadado y alzando la vista hacia la catedral...
Dicho esto el príncipe destrozo la puerta del cementerio...
Camino a la catedral...