Mr. Grey (CEO #1) ©

Capitulo #58| Profesionales

Unos dias más tarde...

Esa mañana habiamos empezado con una discusión. Siempre insistiendo en lo mismo, llevo dias tratando de convencerle de que puedo ir a trabajar sin correr ningún riesgo. Tengo a Jason, le tengo a él y no me apartaria de recepción en ningún momento. Además, la cafeteria esta abierta hasta las ocho de la noche y la encargada es Fiona. No creo encontrar una psicotico dentro de la empresa, ¿o sí?

-ya lo hablamos. Es mejor que te quedes en casa- masculle.

-y yo digo que estaré bien- refuto de vuelta.

-he dicho no.

Un resoplido lleno de frustración sale de mi boca.

-iré. No se hable más.- cojo mi bolso de la cama y camino en dirección al elevador. Christian corre detrás de mi y me detiene el paso obstaculizandome la entrada al ascensor.

-esta bien- dice de repente negando con la cabeza.- pero debemos ser profesionales en todo momento. Hay un rumor esparciendose y no quiero que salgas afectada.

-¿de qué coño hablas?- espete malhumorada.- ¿qué no me estas diciendo?

-pienso que Olivia esparcio un rumor de nosostros.- confiesa.

-¡esa perra!- escupo cabreada y me cruzo de brazos- así que no era solo por lo de mi madre y su novio, ¿eh?

Ladea la cabeza embozando una media sonrisa cómplice.

Ruedo los ojos al cielo.

-eres un idiota.

-tal vez, pero este idiota quiere protegerte.

Ruedo los ojos de nuevo. Lo hago por decima vez en los ultimos tres dias. Además de tener en mente la boda de Kate, mi madre que aún no contesta, los pensamientos que logran colarse de vez en cuando sobre Elena y la torrida relación que tuvo con Grey, las recientes llamadas de Grace que no he querido contestar y ahora esto. Tenia que ser la odiosa de Olivia.

-si sigo faltando tendra motivos para refutar lo que esta diciendo Christian.- digo.

-tienes razón

-la tengo- hablo con toda la seguridad que puedo imprimir.- ahora demostremole a esa perra que no se juega con fuego a menos que quiera arder en el puto averno.

Emboza una sonrisa maliciosa y me observa fijamente.

-¿Qué?

-Me excita cuando te pones satanica.-se acerca y envuelve sus brazos en mi cintura- Tienes en tú cabeza una locura preciosa, ¿cómo no iba a perder la puta razón por ti?- estrella sus labios contra los mios antes de siquiera sonreir y agradecer lo que ha dicho.

¿Se podria ser más romantico, tentador y sucio?

-espera...- se aparta y alzo una ceja. Tengo algo en mente.- si debemos ser profecionales entonces no debemos mostrar cariño en publico.

Asiente.

-bien, si alguno de los dos se deja llevar por la tentación recibira un castigo del otro al llegar a casa.- arquea ambas cejas.

-eso quiere decir que tú me castigaras si me salgo de la raya.

-asi es- pongo los brazos flexionados sobre su torso y empiezo a jugar con el nudo de su corbata.-¿Qué dice Sr. Grey?

-digo que Olivia no es la única a que le gusta jugar con fuego.- hace una pausa pensando en su respuesta, pero se la resolución a la que ha llegado. No hay desafio que no acepte, como el trato que hicimos al beber el ajenjo en mi casa hace no mucho.- esta bien, ¿estas preparada?

Mis manor arden por la picardia. ¿De verdad haremos esto?... Por su mirada desafiante creo que si.

He vuelto...un poco picarona. Empezando tres dias después de varias revelaciones nos hemos enterado que Olivia a esparcido el rumor de una "posible relación". Coloquence sus cinturones por aqui viene mucho cliché.